Más allá de la tercera consagración de la RFU, la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA Rusia 2021™ ha pasado la historia como una de las más reñidas, además de haber establecido un nuevo récord de goles para la competición.

La RFU no solo es ahora la segunda nación más laureada por detrás de Brasil (5) y por delante de Portugal (2), sino que comparte con ambas potencias el haber alzado el trofeo jugando en casa. Además, hubo hitos para el fútbol playa de Asia y de África.

Más allá de su fortaleza física y mental, la RFU demostró ser un equipo en todo el sentido de la palabra. Solo así se explica cómo encontró respuestas para cada uno de los escollos que le supuso el torneo, superándolos con distintos aportes individuales. La demostración más clara fue la semifinal con Suiza, la que ganó a pesar de jugar sin tres futbolistas claves y viéndose superada durante buen parte del duelo. Si faltaba algo para rubricar su excelente torneo, era ganar la final con la autoridad con la que lo hizo.

La evolución de Japón no tiene techo. Dos años después de ser cuarto, alcanzó la final gracias a su disciplina táctica, que nace en el nuevo rol casi exclusivo defensivo de Ozu Moreira y en un variado poder de ataque, cuya punta de fue a Takuya Akaguma. 

Suiza fue, quizás, quien jugó el fútbol playa más puro, pero pagó caro sus distracciones en la semifinal con la RFU. Su fluido armado de juego a partir de Eliott Mounoud y Noel Ott, le permitió brillar a sus pívots Glenn Hodel y Dejan Stankovic (21 goles entre ellos).

Senegal lidera el grupo de selecciones que han logrado reconocer sus recursos y explotarlos al máximo. En su caso, su notable poderío físico le permitió aprovechar a la nueva regla del portero, practicando un juego de presión en defensa y vertical en ataque, muy entretenido para los aficionados.

Con distintos estilos, pueden incluirse aquí también a selecciones como Paraguay, El Salvador, Emiratos Árabes Unidos y Uruguay, aunque las 16 participantes estuvieron a la altura del torneo. Los uruguayos llegaron a cuartos de final tras eliminar al campeón Portugal, colándose entre los ocho mejores por segunda edición consecutiva. 

Portugal atraviesa un proceso de renovación natural, pero también hicieron su parte ciertas lesiones inoportunas y el nivel de los rivales. Brasil sufrió más que nadie este último punto, aunque está claro que sigue siendo potencia y volverá por sus fueros.

Además, resulta refrescante ver otra vez a España y a Tahití entre los animadores de la competencia. 

1. RFU; 2. Japón; 3. Suiza; 4. Senegal; 5. Brasil; 6. Tahití; 7. España; 8. Uruguay; 9. Paraguay; 10. Portugal; 11. Mozambique; 12. Omán; 13. Emiratos Árabes Unidos; 14. Bielorrusia; 15. El Salvador; 16. EEUU.

Balón de Oro adidas: Noel Ott (Suiza) Balón de Plata adidas: Artur Paporotnyi (RFU) Balón de Bronce adidas: Raoul Mendy (Senegal)

Goleador de Oro adidas: Glenn Hodel, 12 goles (Suiza) Goleador de Plata adidas: Dejan Stankovic, 10 goles (Suiza)  Goleador de Bronce adidas: Takuya Akaguma, 10 goles (Japón)

Guante de Oro adidas: Eliott Mounoud (Suiza)

FIFA Fair Play Trophy: Brasil

53.149. Es la cantidad de personas que asistieron en total a los 32 partidos de a la 11ª edición del evento, lo que da un promedio de 1.661 espectadores por encuentro. 

302. Es el número de goles que se anotaron en Rusia 2021, convirtiéndose así en la edición más prolifera en la historia. La anterior marca eran los 286 de Río de Janeiro 2006 y Paraguay 2019. En promedio, se marcaron 9,43 tantos por partido.  

100. Es el porcentaje de efectividad que tiene la RFU en finales: ganó las tres que disputó. Las anteriores fueron en 2011 (a Brasil) y en 2013 (a España). 

47. Con sus 10 goles, el Goleador de Plata Dejan Stankovic alcanzó los 47 y ya es el segundo máximo artillero histórico del evento. Sin embargo, todavía lejos de los 87 del portugués Madjer. 

20. El Tahití – España (12-8) por la fase de grupos igualó la marca como el segundo partido con más goles en la historia de la competición (los rusos vencieron a Brasil por ese resultado en la final de 2011). El récord es 21 (Portugal superó a Uruguay por 14-7 en el duelo por el tercer puesto de 2009).

1. Japón es la primera nación de Asia en alcanzar la final de la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA, por lo que su segundo puesto es la mejor actuación de una selección asiática, superando el tercer puesto de la RI de Irán en 2017. Además, Senegal es la primera nación africana en alcanzar las semifinales de la competición. La mejor actuación de un país africano hasta aquí había sido el quinto puesto de la propia Senegal en 2007.

Lee aquí los análisis de Claude Barrabé, Matteo Marrucci y Pascal Zuberbühler, miembros del Grupo de Estudios Técnicos de la FIFA presentes en Rusia 2021.