miércoles 15 julio 2009, 08:00

Kleiton, un tipo tranquilo

Kleiton Lima es un hombre tranquilo. En la sala de prensa del Estadio de la Copa Mundial de la FIFA de Fráncfort, el brasileño observa impasible los rostros de los periodistas. Su equipo acaba de empatar a 1-1 con Alemania, vigente campeona del mundo, ante 44.825 espectadores, una entrada nunca antes registrada en Europa en un partido de fútbol femenino. El técnico de 35 años de edad responde a las preguntas con voz suave pero firme, mientras pasea la mirada por las paredes de la estancia.

Tras un momento de reflexión, el joven entrenador se decide a comentar: "Sería estupendo jugar siempre en un escenario como el de hoy. Ojalá estos dos equipos vuelvan a encontrarse aquí dentro de dos años", dice en un imprevisible arranque de entusiasmo y con un brillo fugaz en los ojos.

Varias de las nuevas estrellas del fútbol femenino vivieron aquel 22 de abril de 2009 su primer gran partido internacional, a pesar de que el encuentro era tan sólo amistoso. Sin embargo, el choque revestía un significado muy especial para Kleiton Lima. El actual técnico de la selección brasileña femenina sólo persigue una meta: conquistar la Copa Mundial Femenina de la FIFA Alemania 2011, cuya gran final se disputará precisamente en Fráncfort. Lima y sus chicas regresarán al estadio con la intención de tomarlo al asalto.

Del Santos al fútbol internacional "Queremos desplegar un fútbol de ataque, altamente ofensivo", declaró Lima aquella misma noche a FIFA.com. Al seleccionador del país que ocupa actualmente la segunda posición de la Clasificación Mundial Femenina le sobran razones para defender esta estrategia, como la certeza de contar con la magia de Marta y Cristiane, la misma que ha conferido un brillo especial al fútbol femenino en los últimos años. No obstante, por lo menos hasta la fecha, tamaña maestría no se ha traducido en títulos para Brasil. Tanto en la final de la Copa Mundial de 2007, celebrada en Shanghai, como en la final del Torneo Olímpico de Fútbol Pekín 2008, la verdeamarela regresó a casa con la derrota por equipaje. Por eso, su único objetivo es poner fin a la racha.

El mencionado partido contra Alemania fue el primero de Lima al frente de la absoluta femenina de Brasil. "El amistoso de Fráncfort marcó el inicio de una nueva etapa, que queremos coronar en ese mismo estadio con el título de la Copa Mundial de la FIFA 2011", explica este ambicioso técnico, ex entrenador del Santos. En su localidad natal entrenó durante diez años al equipo femenino del club en el que Pelé dio sus primeros pasos, con el que Lima conquistó más de 15 títulos regionales, nacionales e internacionales. Pero aún no ha saciado su sed de triunfo.

Tal vez Lima quiera lograr ahora todo lo que no pudo alcanzar como jugador. Formado en la cantera del Santos, el brasileño se convirtió pronto en profesional y emigró a Estados Unidos, pero se vio obligado a colgar las botas a la edad de 22 años. El joven estratega colaboró en la Copa Mundial de la FIFA Estados Unidos 1994 como ojeador del seleccionador nacional Carlos Alberto Parreira, por lo que también aportó su granito de arena al triunfo de la Seleção en aquel certamen. "Una experiencia maravillosa", recuerda.

En la cima del fútbol femenino mundial Lo que ocurrió después podría calificarse de "romanticismo futbolístico". Lima regresó al Santos para trabajar como preparador físico en el club de sus amores, en el que destacaban por entonces futuras estrellas de la talla de Diego, Robinho o Alex. Fue en esa etapa cuando el técnico brasileño tomó conciencia de su pasión por el fútbol femenino, que había conocido en Estados Unidos y lo había atrapado al instante. Lima se marcó el objetivo de promocionar en su país esta modalidad del deporte rey, aunque conocía bien la complejidad de su empeño.

"Es muy importante que acabemos en el grupo de los primeros si deseamos consolidar el trabajo que se está haciendo en Brasil por este deporte. Además, queremos mantenernos en la cima del fútbol femenino mundial", explicó Lima durante una entrevista concedida en exclusiva a FIFA.com en Chile 2008. En tierras chilenas, el técnico metió a la selección brasileña sub-20 en cuartos de final de la prueba reina de la categoría. Hoy en día, Lima puede asegurar sin miedo a equivocarse que conoce el fútbol femenino brasileño como la palma de la mano.

En sus primeros años como entrenador, Lima había trabajado con 16 de las componentes de la selección que llevó su antecesor, Jorge Luiz Barcellos, a la Copa Mundial Femenina de la FIFA China 2007. Aquella experiencia le permite afirmar sin género de duda que las jugadoras brasileñas sólo triunfarán si consiguen cuajar una sólida actuación colectiva, por mucha excelencia técnica que posean y por mucho que tengan a Marta en sus filas.

Desde que se ha hecho cargo de la selección nacional, Lima se ha impuesto este ideal, que combina con una pizca de refrescante tranquilidad y con una buena dosis de sueños de gloria. Podría ser la receta del éxito que permita al brasileño regresar a Fráncfort para, tal vez, levantar en el trofeo de la Copa Mundial de la FIFA en 2011.