Costa Rica defendió con éxito su título en el Campeonato de Fútsal de la CONCACAF y se clasificó con total autoridad para la Copa Mundial de Fútsal de la FIFA Colombia 2016. También representarán a la región Panamá, Guatemala y Cuba, que regresa a la máxima cita de la categoría tras ocho años de ausencia.

De esta forma, sólo México no pudo revalidar la plaza que había conseguido para Tailandia 2012. El torneo se desarrolló enteramente en el BN Arena de San José de Costa Rica, y marcó la tercera corona de los Ticos, quienes ya habían ganado este torneo como anfitriones en 2000. Así pasaron a ser el país más ganador del área, superando en la tabla a histórica a Estados Unidos, bicampeona del torneo.

FIFA.com destaca lo más importante de la sexta edición del clasificatorio, competencia que puso fin al proceso clasificatorio para Colombia 2016 en la antesala del Sorteo Final, que se realizará el jueves 19 de mayo en Medellín.

El campeón Costa Rica es un campeón incuestionable: ganó sus cinco partidos, tuvo la mejor delantera (26 goles) y la valla menos vencida (apenas 6 en contra). Es más, derrotó a los otros tres clasificados al Mundial por un margen de 17-1: 6-0 a Cuba, 7-1 a Guatemala en semifinales y 4-0 a Panamá en la final.

"Hemos cumplidos todos los objetivos", dijo tras la consagración Diego Solís, participante ahora de las cuatro clasificaciones mundialistas de Costa Rica, las dos primeras como jugador. "Los muchachos hicieron un torneo excelente. Supieron plasmar el trabajo en la cancha, pero también fueron disciplinados fuera de ella. Estoy contento porque el proceso desde el último Mundial valió la pena, hoy tengo seis muchachos nuevos en gran nivel".

Además Costa Rica obtuvo el Premio Fair Play y el cierre Edwin Cubillo se convirtió en el tercer futbolista tico en lograr el Balón de Oro, reconocimiento al mejor jugador del torneo, tras los éxitos del mismo Solís en 2000 y de su actual compañero Jorge Arias en 2012.

Los otros clasificadosLa progresión de Panamá en la región es evidente: resultó cuarto en el Campeonato de la CONCACAF en 2008,tercero en 2012 y subcampeón en 2016, probando así que aquella clasificación para Tailandia no fue casualidad. En Costa Rica ganó cuatro de sus cinco partidos, cayendo sólo en la final ante los dueños de casa (0-4).

"Fue un partido más parejo de lo que refleja el marcador", aseguró el capitán Edgar Rivas. "Básicamente, ellos sí concretaron las que nosotros fallamos. Igual, logramos la clasificación al Mundial sin contratiempos. Debemos estar contentos", agregó Rivas. El arquero Daniel Atencio, dueño de la segunda valla menos vencida con 16 dianas, recibió el Guante de Oro.

Guatemala completó el podio, el tercero consecutivo tras ser campeón en 2004 y subcampeón en 2008. Lo que parece un retroceso en sus resultados es, en realidad, parte del proceso natural de recambio. Pese a esto, el equipo mostró personalidad para levantarse tras el debut con Panamá (1-4), y sumó ajustados triunfos sobre México y Honduras para reservar su boleto mundialista.

Lo mismo sucedió tras el golpazo ante Costa Rica en semifinales (1-7), tropiezo que no le impidió vencer a Cuba 3-2 en la final de consolación. "Estábamos obligados a ganar el juego y lo hicimos. Nos toca sufrir y celebrar un tercer lugar, que no era lo que esperábamos. Nosotros veníamos por el torneo", explicó el veterano cierre Miguel Santizo.

En cuanto a Cuba, nadie mejor que uno de sus futbolistas para poner el cuarto puesto en contexto. "Nuestro objetivo era clasificar al Mundial como fuere. Después de lograrlo, dijimos que íbamos a darlo todo por ser campeones o por una medalla, pero no se pudo. Igual, estamos contentos", explicó el pívot Ricardo Castillo.

Cuba perdió tres de sus cinco partidos, pero sólo Costa Rica le ganó cómodamente. Aún así supo reagruparse para vencer a Canadá y asegurarse un lugar en semis. Sus posteriores derrotas con Panamá y en el duelo por el tercer puesto con Guatemala fueron por la mínima. Vale destacar, además, que el ala de 18 años Diego Ramírez recibió el premio Futuro Brillante, un reconocimiento al jugador joven más destacado.