Información general
El fútbol femenino ha crecido de manera exponencial en la última década y cada vez se exige más a las futbolistas, tanto dentro como fuera del campo, y resulta esencial que cambie el apoyo que se ofrece a las jugadoras. Por este motivo, la FIFA se ha embarcado en el Proyecto de Salud Femenina, un análisis amplio de las deportistas, el entorno y el apoyo que necesitan para rendir al máximo. Las investigaciones actuales se han revisado y recopilado con el objetivo de elaborar recursos didácticos para ayudar a las federaciones miembro, las futbolistas, los entrenadores y los equipos multidisciplinares (compuestos por especialistas en ciencia del deporte, nutricionistas, preparadores físicos, psicólogos, médicos, etc.).
Cómo entrenar y preparar a las deportistas, y ofrecerles el apoyo integral que necesitan
FUERZA Y ACONDICIONAMIENTO
A medida que las exigencias físicas del deporte femenino evolucionan, corresponde a la comunidad científica aceptar y entender en su totalidad sus matices y ofrecer recomendaciones válidas y fiables a toda la comunidad del fútbol.
RECUPERACIÓN
Con la creciente exigencia física e intensidad de los partidos de fútbol femenino, la recuperación es de una importancia vital. Hay pruebas que indican que las mujeres tienen más resistencia a la fatiga y una capacidad superior de recuperarse de forma metabólica que los hombres durante sesiones de esprint intermitentes, repetidas y de intensidad máxima, así como entre sesiones de alta intensidad repetidas.
ALIMENTACIÓN E HIDRATACIÓN
El rendimiento y las adaptaciones del entrenamiento de las jugadoras están vinculados con una ingesta adecuada y periódica de energía y macronutrientes. El énfasis debería estar, en primer lugar, en la cantidad y la calidad de los nutrientes, las proteínas y las grasas para sustentar los entrenamiento y partidos y recuperarse de ellos.
SUEÑO
Es importante identificar a aquellas jugadoras que padecen alteraciones del sueño y ofrecerles la posibilidad de desarrollar rutinas personalizadas en un intento por mejorar la calidad del descanso y, en definitiva, facilitar la recuperación con el objetivo de aumentar el rendimiento.
REDUCCIÓN DE LAS LESIONES Y MOTRICIDAD
Conforme crece el fútbol femenino, es fundamental tener en cuenta los factores psicológicos y sociológicos que se encuentran y abordan las mujeres. Es igualmente importante analizar cómo interactúan estos factores con el desarrollo físico y las exigencias del deporte, que afectan al desarrollo de las habilidades y al riesgo de lesión.
BIENESTAR PARA UN BUEN RENDIMIENTO
Un ecosistema centrado en el bienestar de las futbolistas que fomente la sostenibilidad del deporte y amplíe las aptitudes para la vida de las jugadoras es crucial para su equilibrio personal, la duración de sus carreras y su rendimiento.
Caso práctico
A continuación, se muestra un caso práctico de una selección nacional femenina que tiene en cuenta la salud, el bienestar y el rendimiento de las jugadoras en el programa de la selección nacional. Se han eliminado todos los datos identificativos.
- Programa de la selección nacional femenina absoluta: la mayoría de las jugadoras no tenían formación sobre salud, bienestar ni rendimiento femeninos.
- Equipo multidisciplinar: médico, entrenador, segundo entrenador, fisioterapeuta, especialista en ciencia del deporte, etc.
- Se dispone de artículos de higiene íntima, la eliminación de residuos es adecuada, no hay financiación para analíticas ni supervisión del sueño y hay un presupuesto limitado para la nutrición.
- Se eligió a una especialista en ciencia del deporte para que se responsabilizara de la salud, el bienestar y el rendimiento femeninos.
- Comenzó a revisar los recursos de que se disponía para la salud, el bienestar y el rendimiento femeninos y trazó un itinerario para formar a todos los miembros del equipo (jugadoras y todo el personal).
- La responsable de salud, bienestar y rendimiento femeninos personalizó el material para satisfacer las necesidades de su entorno.
- La responsable de salud, bienestar y rendimiento femeninos impartió formación al resto del equipo multidisciplinar y a las jugadoras.
- Se compartieron recursos de seguimiento con el equipo multidisciplinar y las jugadoras.
- Formación continua y apoyo para el equipo multidisciplinar y las jugadoras.
- Las jugadoras completaron un cuestionario breve (que incluía preguntas relacionadas con los antecedentes y el estado actual de la salud mental, los anticonceptivos hormonales y los síntomas).
- Se comentaron con el médico un par de posibles problemas clínicos para su seguimiento y este colaboró con las jugadoras y volvió a consultar al equipo multidisciplinar cuando fue necesario.
- Se puso en marcha un plan para un cribado y un perfeccionamiento continuado de la gestión de los síntomas de las jugadoras.
- Se formó a las jugadoras sobre la importancia de las razones para mantener un seguimiento de sus ciclos, tanto endógenos como exógenos, y la forma de hacerlo.
- Algunas jugadoras tardaron unos meses en adquirir el hábito, pero se consiguió una buena respuesta gracias a la supervisión que llevó a cabo la responsable de salud, bienestar y rendimiento femeninos.
- La responsable de salud, bienestar y rendimiento femeninos actualizó con frecuencia al equipo multidisciplinar sobre los patrones y problemas apreciables (p. ej. cambios significativos en los ciclos) y detectó cuándo una jugadora podría estar entrando en una fase tradicionalmente problemática.
- La responsable de salud, bienestar y rendimiento femeninos trabaja con el equipo multidisciplinar para apoyar a las jugadoras de forma personalizada, gestionar activamente los síntomas y trabajar con sus ciclos.
- En este proceso se implica a las jugadoras, quienes reciben capacitación para tomar la iniciativa a la hora de gestionar sus ciclos e implementar esta forma de trabajar en su club y selección nacional.
13 consejos a tener en cuenta
Se debería concienciar a todo aquel involucrado en el fútbol femenino sobre la salud y el rendimiento de las mujeres, en lugar de limitarse a las jugadoras o al personal médico o femenino.
A través de la concienciación, se debería animar a las jugadoras a asumir la responsabilidad de su salud, rendimiento y bienestar.
No se debería contemplar la salud femenina como una barrera para el ejercicio, ni debería ser un tema sobre el que no se pueda debatir. Se debe crear un espacio seguro para la comunicación en torno a la salud femenina. Hay que normalizar que se hable de estos temas.
Se debe animar a las jugadoras a hacer un seguimiento de sus ciclos y a entender mejor sus cuerpos y se les debe concienciar sobre lo que es normal y cuándo algo puede ser perjudicial.
Un programa de fuerza y acondicionamiento óptimo debe tener un enfoque personalizado y específico para el deporte, así como tener en cuenta la edad de formación de la deportista, el estado de maduración, el nivel de habilidades, el nivel actual de juego, los desequilibrios o debilidades en la fuerza, el ciclo menstrual y el historial de lesiones.
La concienciación es fundamental para ayudar a las jugadoras a entender el proceso de recuperación y tiene un efecto sobre el cambio de comportamiento para tomar las decisiones adecuadas en el momento oportuno.
Es necesario que se conciencie a las jugadoras sobre los fundamentos de la recuperación: nutrición, hidratación y sueño.
Se debe animar a las jugadoras a ser constantes y desarrollar rutinas para dormir, como desconectar las pantallas, asegurarse de que la habitación esté en condiciones óptimas para el descanso (como la temperatura, cortinas opacas, cama cómoda, colchón, almohada y ropa de cama cómodas, aroma/ aceite de lavanda, no tener luces/TV/teléfonos con brillo), evitar la cafeína y relajar la mente.
Se debe ofrecer a las jugadoras una educación básica sobre la alimentación, la recuperación, el entrenamiento y los partidos. Es oportuno señalar que las necesidades de nutrición e hidratación pueden variar debido a las fluctuaciones en los niveles de estrógenos y progesterona, ya sean naturales o sintéticos.
Pasar por la pubertad puede ser un desafío para las jugadoras y su equipo técnico: se trata de una parte fundamental del desarrollo y se necesita apoyo y concienciación específicos, sobre todo debido a que es más frecuente que las personas abandonen el deporte durante esta etapa.
Se debe normalizar la planificación familiar, el embarazo y la paternidad. Las organizaciones deportivas, los entrenadores, el personal y las jugadoras tienen que trabajar conjuntamente para crear un entorno en el que el embarazo y tener un hijo se valore, se celebre y se apoye de forma adecuada.
La menopausia no es una enfermedad y no precisa tratamiento, salvo que los síntomas afecten a la calidad de vida.
Se deben tener en cuenta los requisitos específicos de las mujeres, como tener acceso a un inodoro, recursos higiénicos (p. ej. papeleras y lavamanos), acceso a productos de higiene femenina, prendas para las posibles fugas y acceso a sujetadores deportivos de la talla correspondiente.
El objetivo de la FIFA es mejorar la salud, el bienestar y el rendimiento de todas las futbolistas, así como incrementar el conocimiento sobre las mujeres y niñas que practican el fútbol en todas todas las categorías.
Sarai Bareman, directora de la División de Fútbol Femenino