viernes 11 septiembre 2009, 08:47

Grandiosa Alemania

Se podría decir que, en cierta manera, en la Eurocopa Femenina de la UEFA se vio más de lo mismo. Aparte de algún que otro susto sin demasiada importancia, Alemania conservó en todo momento el dominio que ejerce en la competición continental y sus opciones a revalidar el título.

Si bien era previsible que las campeonas del mundo se ciñeran por quinta vez la corona europea, la competición ofreció pruebas alentadoras de que el fútbol femenino en general está alcanzando altas cotas de calidad y espectáculo, camino de la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2011. La final, una contienda apasionante y mucho más igualada de lo que indica el resultado (6-2), se desarrolló exactamente como prometía el programa. Los aficionados congregados en Finlandia para asistir a la fiesta del fútbol disfrutaron de un recital de magia individual y goles sobresalientes.

También la Inglaterra de Hope Powell mereció su presencia en la gran final. Las inglesas habían manifestado con su actuación contra equipos de la talla de Italia u Holanda que actualmente representan una amenaza para la supremacía de Alemania tan importante como la que a lo largo de la historia han presentado las naciones nórdicas. Pero sólo podía haber un ganador. Con el estilo del que se valió para conquistar el título, la Alemania de Sylvia Neid dejó claro que será el equipo a batir dentro de dos años en la Copa Mundial Femenina de la FIFA.

Grings regresa a lo grande La selección alemana confió para esta competición en sus jugadoras de más experiencia, un grupo que suma un total 1.400 convocatorias para el combinado nacional, desde Nadine Angerer en la portería, hasta la veterana Birgit Prinz en ataque, pasando por Kerstin Garefrekes en el centro del campo. Hay que destacar, sin embargo, que Prinz llegó a la gran final sin haber visto puerta ni una sola vez en las rondas previas y todavía dolida por las críticas que ha recibido de la prensa alemana, que apuntan a que, como jugadora, ya está acabada.

Nos ha ido de maravilla, a mí y al equipo. El partido ha sido increíble, un sueño hecho realidad después de todos los problemas personales que he tenido estos años. Hemos jugado como sólo lo hacen las campeonas del mundo.

La capitana silenció a sus detractores con la contundencia que acostumbra y dos goles en toda una exhibición de talento y poderío, de la que se ha servido esta veterana de cuatro Copas Mundiales Femeninas de la FIFA para demostrar que sigue en plena forma y dispuesta a participar en su quinta fase final. Sin embargo, incluso Prinz tendrá que admitir que su contribución en Finlandia se ha visto eclipsada por la de su pareja en ataque. Nunca nadie ha puesto en tela de juicio el talento de Inka Grings (basta recordar que se proclamó máxima goleadora de la pasada edición de la EURO), pero turbios asuntos extradeportivos la han mantenido apartada del fútbol internacional durante estos años.

Ahora, con 30 años cumplidos, Grings ha regresado, y al parecer mejor que nunca. La delantera del Duisburg anotó dos goles en la gran final, incluidos ya en los seis tantos que la hicieron de nuevo acreedora de la bota de oro de la competición. "Nos ha ido de maravilla, a mí y al equipo", declaró extasiada tras la final de ayer. "El partido ha sido increíble, un sueño hecho realidad después de todos los problemas personales que he tenido estos años. Hemos jugado como sólo lo hacen las campeonas del mundo".

Pero Grings no ha sido la única que ha brillado con luz propia en el equipo alemán, cuya amplitud de banquillo queda patente en el hecho de que sus suplentes han anotado ocho de los 18 goles marcados de camino a la final. Sin duda, la seleccionadora Neid se habrá alegrado de que Fatmire Bajramaj haya acertado tres de dichas dianas. La fantástica futbolista alemana está lista para desprenderse de una vez de la etiqueta de "gran promesa" que suele acompañar su nombre, y para convertirse en una pieza clave del equipo durante la defensa del título mundial. Todavía más alentadores parecen los recitales de Kim Kulig. Con ellos, la muchacha ha demostrado por qué a sus 19 años se ha convertido en la medio centro titular de la selección alemana. No habrá que perder de vista sus pasos en el gran certamen de 2011.

Creo que este título nos servirá para promocionar el certamen de 2011. Todo el mundo ha podido comprobar hoy que nuestro equipo es capaz de ganar la Copa Mundial. Nuestras ambiciones apuntan alto, y nuestra selección acaba de justificarlas.

Precisamente el Presidente de la Asociación Alemana de Fútbol, Theo Zwanziger, admitió que, en estos momentos, Alemania 2011 acapara la atención del fútbol femenino del país. "Creo que este título nos servirá para promocionar el certamen de 2011", comentó. "Todo el mundo ha podido comprobar hoy que nuestro equipo es capaz de ganar la Copa Mundial. Nuestras ambiciones apuntan alto, y nuestra selección acaba de justificarlas".

Holanda celebra y Suecia se desmorona Inglaterra sobresalió como el mejor equipo, muy por encima del resto, a pesar de la sorprendente derrota que sufrió ante Italia (3-2) en su primer partido. La energía y creatividad de Karen Carney, quien se apuntó más pases de gol que nadie en Finlandia, destacaron como las mejores bazas de su juego. La revelación de la veloz Eniola Aluko, junto con Kelly Smith, es una prueba más de que el combinado de Hope Powell llegará a Alemania 2011 con el cartel de serio aspirante al título.

Noruega causó sensación, también tras recuperarse de un tropiezo en sus primeros pasos, y se metió en semifinales gracias a una soberbia victoria por 3-1 sobre Suecia en cuartos. Pero con la clausura del torneo llegó también el final de la era Bjarne Berntsen. El seleccionador ha abandonado el puesto, que a partir de ahora ocupará Eli Landsem.

Italia ha dado cuenta de los estupendos progresos que viene realizando con jugadoras de la talla de la impresionante Melania Gabbiadini. Holanda, por su parte, destacó como la gran sorpresa del campeonato. Las holandesas eliminaron a Francia de camino a las semifinales, donde cayeron a manos de Inglaterra en la prórroga.

Lo dicho: esta edición de la EURO ha dado espectáculo, diversión y muchos ánimos, y ha abierto el apetito para el gran banquete de fútbol femenino del que podremos disfrutar dentro de dos años.