“El motivo por el que lo oculté tanto tiempo fue simplemente que no quería que nadie lo utilizara como una excusa. Ni siquiera yo misma quería emplearlo como excusa”, afirmó la centrocampista estadounidense Shannon Boxx sobre el trastorno autoinmune que le diagnosticaron hace ya una década.

La veterana jugadora de la selección estadounidense, que en Londres 2012, comparecerá en sus terceros Juegos Olímpicos, reveló hace poco su batalla con el lupus (una enfermedad autoinmune crónica en la que el sistema inmunitario ataca por causas desconocidas tejidos sanos del cuerpo, en vez de protegerlos. Dolor en las articulaciones, hinchazón y fatiga extrema son sólo algunos de los síntomas asociados con la enfermedad; lo cual, tras haber salido ahora a la luz, suscita la siguiente pregunta: ¿Cómo ha podido Boxx seguir rindiendo al máximo nivel como internacional en semejantes circunstancias?

Tras aclarar que la enfermedad tiene diferentes grados, y que ella está en el espectro “de leve a moderado”, Boxx explicó a FIFA.com que tener lupus ha afectado a su vida diaria. “Todavía hay ‘cosas’ que tengo que tener presentes cada día, sin excepción”, explicó. “El lupus tiene brotes. Cuando no tienes un brote, te sientes bastante normal”.

“En mi caso, tengo algunos síntomas que reconozco porque ya han ocurrido anteriormente cuando un brote puede empezar a manifestar. Tendré dolor de muñecas y empezarán a dolerme un poco más lass articulaciones. Si soy consciente de ello, tal vez los dos próximos días intente descansar un poquito más. Obviamente, cuando estoy concentrada (con la selección), no puedes tomártelo con más calma, pero puedo dormir cuando no estoy en el entrenamiento, y puedo hacer cosas en las que no tenga que estar de pie”, detalló.

Al preguntarle si le preocupaba el hecho de hacer público su diagnóstico antes de una gran competición, Boxx señaló que consideraba que era el momento adecuado, y que ya no le preocupaba que eso pudiera utilizarse para negarle sus oportunidades. “Según me voy acercando al final de mi carrera, he ido viendo claro lo importante que es hablar sin reservas sobre el tema. Siento que tengo voz para hacerlo, al estar en la posición que tengo como deportista profesional”.

“Ahora vienen los Juegos Olímpicos, pero creo que lo he hecho con la suficiente antelación como para que no sea el principal centro de atención en el torneo”, continuó Boxx. “¿Quiero que la gente lo sepa? Sí. Quiero que la gente se dé cuenta de la situación y piense: ‘olé, se está superando ante esto, y eso es una fuente de inspiración’”.

Unidas en las aspiraciones doradas A sus 34 años, Boxx ha gozado de una carrera increíble como internacional e incluso en el fútbol de clubes. Este nuevo dato sobre su estado de salud sin duda da una nueva dimensión a sus esfuerzos deportivos. El triunfo en Londres 2012 resultaría mucho más dulce. Un tercer oro olímpico consecutivo para EEUU no parece algo descabellado dado el potencial del equipo.  Boxx aseguró que la selección no se duerme en los laureles, y que aspira a dejar un gran propio legado.

“Estados Unidos siempre se ve sometida a presión cuando encara estos grandes campeonatos, porque todo el mundo espera de nosotras que lo hagamos bien. Creo que lo que hace tan especial a este equipo ahora es que tenemos una relación muy estrecha, y ya empezó a verse el año pasado con la Copa Mundial . Tanto dentro como fuera del campo, formamos una piña unida y eso nos convierte en un equipo difícil de batir”, resaltó Boxx.

“Este año, con la defensa del oro olímpico, sabemos que todas tenemos que subir el listón para ganar. No puede haber una sola persona llevando la voz cantante; es necesaria la aportación de todas las jugadoras”, añadió.

A las Barras y Estrellas les aguarda un complicado choque inicial en la competición olímpica, frente a una Francia a la que derrotaron en las semifinales de la Copa Mundial Femenina de la FIFA Alemania 2011. Después de tener muchos problemas para crear ocasiones contra las francesas, Estados Unidos se impuso por 3-1 merced a una reacción en el tramo final del segundo periodo, sellando así el pase a la final contra Japón.

Boxx espera que las norteamericanas puedan arrancar con buen pie en la cita londinense, y cree que una victoria ante Francia podría colocarlas en una buena posición a la hora de encarar sus otros encuentros del grupo, contra Colombia y la RDP de Corea.

A Boxx no parece asustarle la magnitud de la empresa, y aún podría tener más cosas que decir después de la cita olímpica. “Simplemente estoy disfrutando todo lo que puedo del momento. Creo que mi cuerpo sigue sintiéndose muy bien”.

“Había una época en la que pensaba: ‘Vale, después de los Juegos Olímpicos voy a estar hecha polvo’; pero según ha ido avanzando este año, estoy divirtiéndome muchísimo jugando a este nivel. Al llevar en el fútbol todo este tiempo, he tenido muchísimas experiencias memorables e increíbles”, concluyó con una mirada que delata que quiere seguir experimentando.