viernes 16 noviembre 2018, 23:54

Tres razones del resurgir de la RDP de Corea

Las futbolistas de la RDP de Corea abandonaron el estadio de Colonia del Sacramento con una sonrisa. Sus ojos transmitían confianza. La clasificación en el Grupo C tras su victoria por 3-0 sobre Estados Unidos está muy abierta y sus opciones por alcanzar los cuartos de final, intactas.

Hace tres días, sin embargo, los rostros de estas mismas jugadoras —y en este mismo estadio— reflejaban sentimientos muy distintos: decepción, abatimiento y dudas. Las asiáticas llegaban al torneo como defensoras del título y perdieron 1-4 ante Alemania en su estreno. La presión previa al partido frente a Estados Unidos era lógica dado que una derrota habría significado prácticamente la eliminación.

Pero, en su choque contra las norteamericanas, la RDP de Corea se mostró muy sólida desde el inicio y fue superior a su rival en todos los aspectos. ¿Cómo consiguió el equipo enderezar el rumbo y completar una actuación tan convincente? FIFA.com te trae tres razones:

Aplacar los nervios

Ante Alemania, a las jugadoras norcoreanas se las vio nerviosas desde el principio. Al parecer, la presión de llegar al certamen como vigentes campeonas les pasó factura. "Mis futbolistas estaban demasiado nerviosas, y por eso no pudimos jugar como queríamos. Debemos trabajar en ese sentido. Tenemos que apoyarlas", declaró su seleccionador, Song Sung Gwon, al término del encuentro.

Tal vez, un vistazo al pasado les sirviera de ayuda. En la edición de 2010, la RDP de Corea también llegó al torneo como defensora del título y perdió su primer partido contra Nigeria (3-2). No obstante, ganó sus dos siguientes partidos de la fase de grupos y alcanzó las semifinales.

En el duelo bajo la lluvia contra las estadounidenses, la RDP de Corea templó los nervios y firmó un gran partido. La retaguardia también se mostró segura y no permitió que sus rivales desplegaran su juego ofensivo.

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Jugadas a balón parado y efectividad

El resultado final contra Alemania no reflejó la igualdad que hubo en el terreno de juego durante buena parte del encuentro. La diferencia estuvo en la efectividad: mientras que las alemanas materializaron sus oportunidades en la primera mitad y se marcharon 0-2 al descanso, las asiáticas no fueron capaces de culminar con éxito sus ocasiones. Esa desventaja les impidió reengancharse a un partido en el que Alemania se mostró superior.

Pero el equipo pareció recobrar su efectividad ante Estados Unidos. ¿La razón? Las jugadas a balón parado. El segundo y tercer gol, obra de Kim Yun Ok y Kim Kyong Yong, respectivamente, llegaron a la salida de un córner. Estas acciones fueron el mejor camino para desarbolar la defensa norteamericana y traducir en goles su superioridad.

Alternativas en ataque

La RDP de Corea hizo gala contra Estados Unidos de sus múltiples alternativas ofensivas. Kim Yun Ok manejó los hilos en el centro del campo y dirigió el juego de las suyas. Distribuyó la pelota, cayó a la banda izquierda, a la derecha, y llegó con peligro al área rival. Su gol, el que puso el 0-2 en el marcador, fue la recompensa a tanto compromiso.

La banda izquierda de las norcoreanas también sobresalió. Choe Kum Ok corrió muchos metros arriba y abajo y centró numerosos balones. Aprovechó los espacios que dejaron las estadounidenses y generó peligro constantemente.