A las órdenes del veterano entrenador bosnio Vahid Halilhodzic, Marruecos parece estar listo para causar sensación en la Copa Mundial de la FIFA Catar 2022™ los próximos meses de noviembre y diciembre.

Tras quedar encuadrados en el Grupo F junto a Bélgica, Croacia y Canadá, a los Leones del Atlas, que se han clasificado para el Mundial por segunda vez seguida (y sexta en su historia), les encantaría reeditar su éxito del Mundial de México 1986, donde sorprendieron a muchos expertos accediendo a los octavos de final a costa de Portugal, en la que fue una de las mejores actuaciones firmadas hasta la fecha por una nación árabe o africana. Con una hornada de jóvenes jugadores que exhibieron un gran potencial durante la fase de clasificación mundialista, Marruecos bien podría dar brillo a la fase final con varias caras nuevas que tienen un futuro espléndido ante sí. Hemos echado un vistazo a cinco de sus mayores promesas.

La cotización de Azzedine Ounahi ha subido mucho últimamente, después de que el joven centrocampista desatase la euforia en el Estadio Mohammed V de Casablanca el 29 de marzo, con un doblete contra la RD del Congo que sentenció la clasificación de Marruecos para el Mundial de este año.

El jugador nacido en Casablanca, que actualmente milita en el Angers francés, tiene tanta habilidad que Vahid Halilhodzic no pudo resistirse a convocarlo para la reciente Copa Africana de Naciones en Camerún. A Ounahi es muy difícil arrebatarle el balón, y constituye una verdadera amenaza con su precisión en el pase en los últimos metros. Si a eso le añadimos su talento con los disparos lejanos, resulta evidente por qué se han depositado tantas esperanzas en él de cara a Catar.

Ezzalzouli es uno de los más prominentes entre la hornada de jóvenes marroquíes que se espera que se labren un nombre en Catar. El prometedor extremo del Barcelona todavía no ha debutado oficialmente con la selección absoluta de Marruecos, pero fue incluido en la convocatoria para la eliminatoria mundialista a doble partido contra la RD del Congo del mes pasado.

Abde, un verdadero talento en bruto, es famoso por su velocidad por la banda y su habilidad para deshacerse de los rivales. Además, es fuerte físicamente, y rinde igual de bien por cualquier banda. Si sigue desarrollando su prometedor y precoz momento de forma con el conjunto azulgrana, no cabe duda de que se convertirá en una pieza clave de la selección marroquí.

Este defensa del FC Barcelona Juvenil A es uno de los jóvenes talentos más prometedores del fútbol europeo. Dadas sus notables aptitudes físicas y su técnica cada vez mejor, hay muchos motivos para pensar que podría estar listo para acudir a Catar 2022. Chadi Riad ya ha representado a Marruecos en categorías menores, y aguarda ansiosamente su oportunidad con la selección absoluta. Y aunque la zaga marroquí parece bien cubierta con Romain Saiss y Nayef Aguerd, el joven Riad podría dar a Halilhodzic otra opción interesante con vistas a Catar.

Imran Louza se ha afianzado rápidamente como una pieza clave de la plantilla de Vahid Halilhodzic. De hecho, el técnico bosnio conoce bien a Louza de su etapa juntos en el Nantes francés. Su versatilidad y su fuerza física lo convierten en un centrocampista completo capaz de desempeñar tareas tanto ofensivas como defensivas.

El jugador del Watford inglés goza de la plena confianza de su seleccionador, y ha correspondido a esa fe con un rendimiento excepcional en los últimos tiempos. Sería una sorpresa mayúscula que Louza no fuese un jugador fundamental para los Leones del Atlas en el próximo Mundial, tal vez incluso comandando el mediocampo.

Aboukhlal es uno de los jóvenes jugadores a los que ha venido recurriendo Halilhodzic de forma casi constante, incluida la Copa Africana de Naciones del pasado enero en Camerún. El punta del AZ Alkmaar holandés es un delantero talentoso que encara con serenidad la portería contraria y se mueve hábilmente en espacios reducidos. Dotado de una resistencia impresionante, trabaja incansablemente para echar una mano en defensa, y presiona continuamente arriba cuando el equipo no tiene la posesión. Sin duda, otro jugador impaciente por que llegue el Mundial de 2022 para exhibir sus credenciales ante los espectadores de todo el mundo.