miércoles 25 abril 2018, 07:03

Bailey Wright apuesta por los Socceroos 

  • Wright es uno de los jugadores más experimentados de Australia

  • No llegó a actuar en 2014 y está ansioso por jugar en Rusia

  • "Ahora me siento mucho más preparado para afrontar un Mundial"

Es indudable que la carrera de Bailey Wright ha experimentado muchos cambios en los últimos cuatro años. Muy poca gente conocía a este defensor cuando fue incluido en el plantel de los Socceroos para la Copa Mundial de la FIFA 2014™.

Ahora acumula más de 20 internacionalidades, y fue una figura habitual en el largo y duro trayecto de Australia hacia Rusia 2018. También ha progresado mucho en el fútbol de clubes, al ser capitán del Bristol City, de la segunda división inglesa, durante una campaña notable, con dos épicos duelos de semifinales de la Copa de la Liga contra el Manchester City como punto culminante.

Wright, no obstante, tiene algo de lo que desquitarse. No consiguió entrar en juego en Brasil 2014, y no fue convocado para la Copa Asiática 2015 que ganaron los Socceroos. Ahora, tras la experiencia que supuso conocer ya Rusia el año pasado en la Copa FIFA Confederaciones, está deseando hacer realidad un sueño de la infancia y participar en el próximo Mundial.

“Una experiencia mundialista es algo que no se puede describir verdaderamente con palabras”, explica Wright a FIFA.com. “Después de descubrirla en Brasil, ahora quiero ir un paso más allá”.

“Aspiro a jugar en un Mundial y ganar. Tengo el objetivo de mantenerme en forma y preparado y poder estar en el equipo que vaya a Rusia”.

Wright, nacido en Melbourne, se desempeña principalmente como central con los Socceroos, aunque también atesora una experiencia importante en la demarcación de lateral en los clubes por los que ha pasado. Disputó doce encuentros de clasificación del Mundial con su país, incluidos los dos de la tensa repesca intercontinental ante Honduras.

Ahora es uno de los integrantes más veteranos de un combinado australiano relativamente joven, y sus conocimientos y cualidades podrían resultar de gran valor para el nuevo seleccionador, Bert van Marwijk.

“Volviendo la vista atrás, soy consciente de lo mucho que he progresado tanto en mis equipos como en la selección”, afirma Wright, refiriéndose a su carrera desde vísperas de Brasil 2014. “Ahora me siento mucho más preparado para afrontar un Mundial en comparación con cómo estaba entonces. Creo que mi experiencia de Brasil y los clasificatorios me será provechosa”.

Recuerdos mundialistas Wright habla con cierta dosis de emoción cuando recuerda sus experiencias en el último Mundial. “Uno de mis mejores recuerdos de Brasil fue el partido inaugural, y ver que las calles estaban totalmente desiertas cuando jugaba Brasil. Parecía que todo el país estaba viendo el partido. Cuando marcaban un gol, se desataba la locura entre todo el mundo, había fuegos artificiales y la gente corría por las calles. Yo pensé ‘esto es un Mundial’, y fue en ese momento cuando sentí que era algo real”.

En cuanto a su país, Wright apenas tenía 13 años cuando Australia puso fin a una sequía de 32 sin viajar a la gran cita del deporte rey, al obtener el pase a Alemania 2006. Y explica que la generación que compitió en aquel torneo dejó una impresión duradera, que tratará de emular la actual.

“Recuerdo muy bien la clasificación [de Australia], fue algo muy emotivo. Todos mis amigos y familiares estaban viéndolo, y recuerdo como salté por la sala cuando [John] Aloisi transformó aquel penal. Para el fútbol australiano representó un punto de inflexión”.

Australia se medirá ahora con oponentes de estilos muy diversos en Rusia, ya que figura en la misma liguilla que Francia, Perú y Dinamarca. “Ojalá logremos crear algo especial y memorable [en Rusia], que todos puedan recordar con cariño y decir que fue el siguiente paso que dio el fútbol australiano”.

Van Marwijk: "La mentalidad de Australia es especial. La cultura deportiva es especial".

Los jugadores australianos se encontraron con un obstáculo inesperado después de la clasificación: la dimisión de Ange Postecoglou. Su relevo ha sido el astuto y veterano neerlandés Van Marwijk, quien condujo a los Países Bajos a la final de la Copa Mundial de la FIFA 2010, y que ya lleva dos partidos al frente de los Socceroos.

“Los futbolistas tenemos que adaptarnos y aprender rápido”, afirma Wright. “Y pudo verse lo mucho que avanzamos en unos pocos días, entre los partidos de Noruega y Colombia . Eso demuestra lo que somos capaces de hacer con el nuevo cuerpo técnico”, concluye.