sábado 24 octubre 2009, 18:20

Dos días de urgencias

Nadie quiere ver a un jugador lesionado sobre un terreno de juego, pero los incidentes en los que la vida está en juego son los que más preocupan a los preparadores físicos. A partir de ahí, tratarlos bien, con urgencia, es algo vital. Por eso, la FIFA y su Centro de Evaluación e Investigación Médica (F-MARC) impartieron en Abuja un curso sobre las urgencias médicas e incidencias graves en el fútbol los días 20 y 21 de octubre de 2009.

Dicho curso, ante todo práctico, estaba dirigido a los servicios médicos de las sedes de Nigeria 2009, fisioterapeutas, médicos de los equipos y todo el personal médico de la primera y segunda división del fútbol de Nigeria. Su finalidad era aprender las actuaciones capaces de salvar vidas en caso de lesiones graves sobre un terreno de juego, las tribunas o los salones VIP; todo en apenas dos jornadas. "Hemos podido enseñarles mucho sobre cómo actuar y cómo reaccionar en caso de urgencia sobre un campo de fútbol. A partir de ahora, sabrán hacer frente a situaciones de malestar relacionadas con los golpes en la cabeza, en el cuello, la columna vertebral; en caso de fallo cardiaco; de lesiones en las rodillas, los pies, etc. Cubrimos casi todos los tipos de lesiones del fútbol", resumió el profesor Demitri Constantinou, Director del Centro Médico de Excelencia de Johannesburgo, que dirigió el curso junto al profesor Efraim Kramer, del departamento de urgencias de la Universidad de Witwatersrand, en Johannesburgo.

Pero concretamente, ¿qué se aprende en dos días y en unas cuantas horas de ejercicios? "Les hemos inculcado principios. Por ejemplo, cómo mover o inmovilizar un cuerpo en caso de lesión cervical; pero también cómo realizar una reanimación cardiaca", detalló Constantinou.

Hemos podido enseñarles mucho sobre cómo actuar y cómo reaccionar en caso de urgencia sobre un campo de fútbol. A partir de ahora, sabrán hacer frente a situaciones de malestar relacionadas con los golpes en la cabeza, en el cuello, la columna vertebral; en caso de fallo cardiaco, de lesiones en las rodillas o los pies

En lo que respecta a Kramer, su método es casi lúdico. "Bueno, están ahí en el estadio; imaginen que hay 300 millones de personas delante de sus pantallas. Deben realizar la acción adecuada. ¡Pero no se olviden de sonreír a la cámara al salir!", bromeó Kramer. La treintena de médicos presentes se partía de risa, pero todos se tomaron muy en serio las instrucciones. "He aprendido cómo hay que ocuparse de los jugadores lesionados, particularmente en la columna vertebral. Ahora al menos sé cómo limitar el impacto de una lesión en un jugador. Lo importante es proteger la movilidad y evitar la mortalidad", explicó, por ejemplo, el doctor Babatunde Olayinka.

"Estos médicos nos están enseñando técnicas adaptadas al terreno estadio y a las circunstancias; es innovador. Nos hemos cruzado por el camino con gente de diferentes culturas y de distintos países. Es muy enriquecedor. Como país anfitrión de un campeonato de este calibre, nos estamos beneficiando de este legado. Numerosos médicos están presentes aquí, y regresarán con más conocimientos y más equipación", reveló el doctor Isa Abubakar Sadeeq, que será el jefe de los servicios médicos en Kano.

"Son médicos, por lo que lógicamente conocen la teoría. Nosotros les enseñamos cómo llevarla a la práctica en un terreno de juego o en casos de incidencias graves", confirmó Constantinou. "Les proporcionamos asimismo un manual que profundiza más en los detalles. Estos principios son útiles para los jugadores, pero también para toda la gente presente en el estadio".

El mensaje que pretendían transmitir ante todo Kramer y Constantinou es sencillo: "La prevención es primordial. Si no fuese posible, entonces hay que estar preparado; ser proactivo y proteger a los jugadores y a cualquier persona dentro del estadio".

Un mensaje que caló bien hondo, ya que todos los médicos aseguraron haber ganado en confianza y estar listos para hacer frente a cualquier eventualidad, ya se trate de futbolistas o de otras personas. "Todos estos principios no sólo son útiles para los jugadores, sino también para los espectadores, el cuerpo técnico o quienquiera que esté en el estadio", abundó Olayinka. "En unas ocho horas, ¡hemos tratado temas que dan para un año! Pero merecía la pena. He aprendido ejercicios prácticos sumamente útiles", se congratuló el doctor Sam Opara.

Son ejercicios útiles y salvadores que deberían propagarse. Ésa es precisamente la utilidad de tener este tipo de seminarios en las competiciones.

Para el doctor Rachid Boukhalfa, médico de la FIFA en Kano, este curso ha sido muy eficaz. "Lo que nos ha enseñado es, simple y llanamente, a preocuparnos por la salud de los jugadores. Estos ejercicios inteligentes nos permiten saber actuar en equipo en caso de fallo respiratorio, con los masajes o el desfibrilador, así como saber levantar del suelo y desplazar a un lesionado que pudiera haber visto afectada su columna cervical. Lo esencial, al final, es llevar vivo al herido al hospital".

Son gestos que se han aprendido, que se quedarán en Nigeria y que se transmitirán a otros médicos... "Es también un legado para África: nosotros nos marchamos, pero ellos conservan estos conocimientos y podrán a su vez transmitirlos", resaltó Constantinou. Por su parte, Boukhalfa fue incluso más lejos, al considerar lo siguiente: "Deberíamos divulgar estos conocimientos prácticos, que los conozca cuanta más gente sea posible. Sé que los médicos de clubes, por ejemplo, los están demandando. Son ejercicios útiles y salvadores que deberían propagarse. Esa es precisamente la utilidad de tener este tipo de seminarios en las competiciones".