La Copa Mundial de Clubes de la FIFA™ ofrece todos los años una oportunidad única para que los aficionados vean a los mejores clubes del planeta competir por proclamarse campeones del mundo. El elenco de esta edición de 2020 está formado por Al Duhail SC (representante del país organizador), Al Ahly SC (CAF), FC Bayern de Múnich (UEFA), Palmeiras (CONMEBOL), Tigres de la UANL (Concacaf) y Ulsan Hyundai FC (AFC).

Es la segunda vez que el torneo se celebra en Catar, que ya organizó con éxito la prueba de 2019, en la que el Liverpool alzó el trofeo. El certamen de este año se jugará en dos sedes de la Copa Mundial de la FIFA Catar 2022™: el Estadio de la Ciudad de la Educación y el flamante Estadio Áhmad bin Ali.

En vísperas de que empiece a rodar el balón, hablamos con las leyendas del fútbol y embajadores del Comité Supremo para la Organización y el Legado (CS) Cafu, Samuel Eto’o, Wael Gomaa y Xavi Hernández, que recuerdan cómo fue para ellos competir en el torneo durante su época de jugadores en activo.

“Una de las competiciones de clubes más importantes que gané como futbolista fue la Liga de Campeones de la UEFA, con el Milan en 2007, lo que significó que también tuve la oportunidad de competir en la Copa Mundial de Clubes de la FIFA. Para mí fue un gran honor ganar el Mundial de Clubes como jugador, ya que no son muchos los que tienen esta oportunidad. El equipo que había en el Milan en aquel momento era impresionante, con muchos grandes jugadores, como Kaká, Clarence Seedorf y Andrea Pirlo”.

“Competir en la Copa Mundial de Clubes de la FIFA aporta un mayor reconocimiento y valor al trabajo que se ha hecho en la temporada anterior y es otra oportunidad de medirse con otros grandes equipos y ganar más títulos”.

“En la final de 2007 jugamos contra un rival complicadísimo, Boca Juniors. Jugar contra Boca nunca es fácil, pero en el Milan nos habíamos preparado muy bien para el partido y conseguimos ganar 4-2, fue un choque muy emocionante”.

“Ya sé que Catar está deseando volver a organizar este fantástico torneo. Los jugadores llegarán a un país anfitrión preparadísimo y que ha implantado todos los protocolos necesarios para que todo transcurra sin contratiempos y de forma segura. He tenido la suerte de ver muchas de sus asombrosas canchas, así que estoy convencido de que para los futbolistas será un honor jugar en el Estadio Áhmad bin Ali y en el Estadio de la Ciudad de la Educación antes de la Copa Mundial de la FIFA en 2022”.

“Mis recuerdos de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA son inmejorables, porque gané la final con el Inter de Milán en 2010. Por primera vez, tuve el placer de jugar en una final contra un equipo africano muy lindo, el TP Mazembe”.

“Sentí muchas emociones en ese partido, por mi continente, África, y mi obligación de lograr la victoria con el Inter de Milán. Fue un honor ganar el torneo con el Inter por primera vez en la historia del club y compartir esa victoria con mis hermanos del TP Mazembe”.

“Después del partido fui a su vestuario, me quedé allí un rato y compartí el momento con los jugadores del TP Mazembe. Para mí son grandes recuerdos, sobre todo porque también gané el Balón de Oro al mejor jugador del torneo. Recibir ese premio fue una sorpresa, pero me hizo muy feliz. Era la primera vez que un jugador africano recibía esa distinción en el torneo, así que representó un gran honor”.

“Por mi papel de embajador del CS, sé que Catar está preparado para organizar la Copa Mundial de la FIFA, y entusiasmado. Por mi experiencia como futbolista sé que va a ser un momento privilegiado para los jugadores que compitan en el torneo, les dejará muchos recuerdos felices que rememorar”.

“La Copa Mundial de Clubes de la FIFA es un torneo muy importante, en mi opinión el más prestigioso de los de clubes, por la participación de los campeones de los seis continentes. Es una oportunidad que permite a los jugadores poner el broche a sus esfuerzos de la temporada anterior en sus respectivos clubes. La Liga de Campeones de la CAF, en el continente africano, siempre es un torneo complicado de ganar, sobre todo teniendo en cuenta los largos desplazamientos que hay que hacer de un país a otro”.

“La Copa Mundial de Clubes de la FIFA supone una gran recompensa para los jugadores que hicieron tantísimos esfuerzos por alcanzar el torneo, ya que les da la oportunidad de jugar en un nivel muy destacado y en un nuevo entorno”.

“Para mí es un orgullo haber jugado once partidos en cinco ediciones de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA con el Al Ahly, esas experiencias están repletas de recuerdos felices e inolvidables”.

“La primera vez que actué en el torneo fue en Japón, en 2005. Para nosotros fue una experiencia dura, ya que tuvimos que jugar en unas circunstancias peculiares y perdimos los dos partidos. Acabamos siendo sextos, pero aprendimos muchas lecciones positivas que nos ayudaron en 2006, cuando estuvimos muy cerca de alcanzar la final, hasta que el Internacional brasileño aprovechó un error nuestro y nos ganó en semifinales. Terminamos terceros, después de vencer al Club América en esa eliminatoria. Ese es mi mejor recuerdo del torneo, sobre todo porque quedamos a las puertas de la final. Fue un partido muy especial para nosotros y permanece grabado en el recuerdo de todos los aficionados del Al Ahly”.

“Ya tengo muchas ganas ver participar al Al Ahly en la Copa Mundial de Clubes de la FIFA de este año en Catar. Va a ser una oportunidad única y muy especial para los jugadores, competir en un torneo internacional tan importante que se celebra en tierras árabes. Espero que el Al Ahly haga un buen papel en el torneo, por los hinchas del club en Egipto y por los muchos hinchas del Al Ahly que viven en Catar”.

“Tuve el honor de jugar la Copa Mundial de Clubes de la FIFA tres veces con el Barcelona y de ganarla dos. En 2009, recuerdo que la final fue un partido muy reñido contra Estudiantes. Se llegó a la prórroga después de que nosotros empatásemos en el minuto 90 y Messi marcaría luego el gol de la victoria al final del partido”.

“En 2011 superamos al Santos en la final, ganamos 4-0. Conservo muy buenos recuerdos de aquel partido, no solo por el gol que marqué y por el resultado, sino por el juego en equipo que desplegamos, fue una actuación muy potente. El Santos tenía un equipo buenísimo, con hombres como Ganso y Neymar, pero nosotros contábamos con una generación fantástica de jugadores en aquel Barcelona, que entrenaba Pep Guardiola. Jugar aquella final fue algo especial y es un gran recuerdo”.

“También he tenido el privilegio de participar como entrenador en una Copa Mundial de Clubes de la FIFA con mi actual club, el Al Sadd, cuando Catar organizó la edición de 2019. Tuvimos el orgullo de representar al fútbol catarí y poder mostrar el país durante este prestigioso torneo. También hicimos un buen papel, ganamos el primer partido, contra el Hienghène Sport, y luego obligamos al Monterrey a emplearse a fondo en la segunda ronda. Para los jugadores fue una gran experiencia competir en un torneo mundialista”.

“Sé que Catar tiene muchísimas ganas de volver a ser el escenario de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA y de ofrecer otro anticipo de lo que pueden esperar los hinchas cuando se celebre la Copa Mundial de la FIFA en el país dentro de menos de dos años”.