Senegal venció a Uruguay por 6-1 en su primer compromiso en Rusia 2021
El portero y capitán Al Seiny N’Diaye volvió a brillar bajo palos una vez más
Ha sido 6 veces Guante de Oro africano, y ya mira de reojo al Guante de Oro de Rusia 2021
Fornido, inmenso (1,90 metros), un rubio platino que contrasta con la piel oscura, camiseta de un amarillo llamativo… El portero senegalés Al Seiny N’Diaye no pasa desapercibido sobre una cancha de fútbol playa.
Pero sobre todo, en Moscú se está haciendo notar por su repertorio de paradas de todo tipo. Este viernes contra Uruguay, fue sencillamente la gran figura del encuentro, pese al festival ofensivo de los suyos.
“¡No hay nada nuevo! Es la gran figura en cada encuentro”, confiesa a FIFA.com un sonriente Raoul Mendy. El número 9 senegalés, autor de un triplete, fue el otro héroe de un encuentro dominado técnicamente, físicamente y… tácticamente: “Entre nosotros, la táctica es simple: Al Seyni se luce atrás, ¡y nosotros hacemos el trabajo delante!”. “Yo solamente hago mi trabajo. Soy el guardameta y se espera de mí que haga paradas y que permanezca concentrado todo el partido. Y sencillamente, eso es lo que me he esforzado por hacer”, replica el interesado. “Siempre está bien empezar con una victoria, ¡y más cuando es bonita como esta! Va a permitirnos afrontar los demás encuentros con un poco más de serenidad”.
Buen portero, pero “mal jugador”
Sin embargo, fue Uruguay la que había empezado mejor en este primer encuentro del Grupo D. Los charrúas abrieron el marcador de penal y, poco después, provocaron otra pena máxima que, de haberla convertido, podría haber sido problemática para los africanos.
Pero N’Diaye, como un símbolo, estuvo enorme y la detuvo; y todos sus compañeros, de golpe, se sincronizaron de forma sensacional. “Sí, tal vez sirvió como detonante”, analiza Al Seiny N’Diaye. “Era importante no perder el hilo de este partido”.
Al Seyni N’Diaye ha hablado de “perder” y, según su amigo Raoul Mendy, es una palabra que el arquero senegalés detesta. “¿Su único defecto? Es un mal jugador. Las derrotas le ponen muy irritable”, señala en relación a su capitán.
“Conozco a Al Seiny desde hace 10 años”, añade Raoul. “Es mi amigo, mi compañero de habitación, y mi compañero de club. Es un líder, un pilar, un jefe. Tiene un carisma innato. No por nada lleva el brazalete”.
Un hermano como ningún otro
Al tiempo que alza la voz en los vestuarios, muestra el camino sobre la arena. A sus 32 años, N’Diaye suma ocho participaciones en la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA, y ha sido cuartofinalista en 3 ocasiones.
También ha ganado 6 Campeonatos de África de fútbol playa, y otros tantos Guantes de Oro en la competición continental. El pasado 29 de mayo volvió a apuntarse ese doblete; el mismo día en que otro guardameta senegalés (Edouard Mendy) se convirtió en el primer portero africano en ganar la Liga de Campeones de la UEFA.
“Fue un gran día para el deporte senegalés”, recuerda. “Evidentemente, me puse muy contento por Edouard, a quien considero como mi hermano. Por cierto, le he tenido al teléfono esta mañana. ¡Quería desearnos lo mejor para esta Copa Mundial!”.
Las circunstancias hicieron que la gesta de Mendy sobre el césped eclipsase un poco las hazañas de N’Diaye y los demás Leones sobre la arena.
“No sentí ninguna frustración. Fue grandioso lo que hizo Edouard. Solamente quiero cosas buenas para los Leones. Cada uno tiene su trabajo”, subraya antes de concluir: “Y nosotros tendremos otras ocasiones para brillar, ¡empezando por esta Copa Mundial de Beach Soccer!”.