jueves 28 noviembre 2019, 22:23

Romanov repite la hazaña rusa de 2015

  • Kirill Romanov marcó el tanto en la victoria de Rusia 4-3 sobre Brasil en cuartos

  • El jugador también había anotado en el triunfo ruso ante Brasil en cuartos en 2015

  • "Nuestro mayor objetivo era no regalarles ni un centímetro"

Para hacerse una idea acerca de Kirill Romanov, basta conocer su pedido final a FIFA.com, poco después de marcar el gol con el que su equipo destronó Brasil por 4-3 en cuartos: "Si publican algo sobre este partido, que no sea sobre mí, sino sobre el equipo".

Y en el equipo ruso los ánimos estaban por el cielo. Del lado de afuera del vestuario, dos jugadores intentaban traducir la entrevista con Romanov. Primero, el golero Pavel Bazhenov convirtió una chinela en micrófono para interrogar a Romanov. Luego, Fedor Zemskov dio lo mejor de sí para intentar traducir a su compañero, hasta que un integrante del equipo de prensa vino al rescate.

"Estoy muy emocionado", dice Romanov, cuyas manos aún están temblorosas. "Fue un gran encuentro. Estoy más satisfecho con nuestro juego que con el resultado. Fue un partido brillante".

Para Romanov, que cumplirá 30 años a principios del año entrante, el impactante triunfo fue el escenario de sus dos primeros goles en la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA Paraguay 2019.

"Nuestro mayor objetivo fue jugar lo más cerca posible de los brasileños y no regalarles ni un centímetro".

Rusia había enfrentado a Brasil el mes pasado en la final de los Juegos Mundiales de Playa ANOC Qatar 2019, donde fueron derrotados 9-3, un resultado que magnifica el sorprendente triunfo de hoy.

"Luego de perder ante Brasil, pudimos analizar su estrategia con atención", afirma Romanov. "Todavía recordamos esa derrota en Qatar ante los actuales campeones del mundo. Es un gran paso para nosotros y tenemos que seguir avanzando".

También hubo un momento que se vivió como un déjà vu. Además de formar parte del equipo campeón de la Copa Mundial de Beach Soccer de 2015, Romanov también marcó un gol el encuentro de cuartos de final que Rusia le ganó a Brasil en el alargue.

Sus dos goles en Asunción fueron muy especiales. En el primero, definió una brillante jugada colectiva mediante un remate de chilena. El segundo fue un mágico taco que desacomodó al golero brasileño Rafa Padilha.

“[En el gol del triunfo] hubo una cuota de suerte luego del tiro de Dmitry Shishin. No tuve mucha opción, solo había que cambiar un poco la trayectoria del balón".

Nuevamente, una versión humilde de lo que en realidad fue un maravilloso acto de improvisación. Por si fuera poco, Romanov dijo que nunca antes había anotado un gol así.

Y ante la pregunta de si su preparación para esta Copa del Mundo fue diferente a las anteriores, su respuesta es contundente.

"No, nada especial. Y no deberías mencionarme solamente a mí. Todos han aportado algo para conseguir esto".