La RP China llega al Torneo Olímpico de Fútbol femenino Río 2016 habiendo realzado su reputación. Gran parte de las esperanzas del equipo recaen ahora sobre Wang Shanshan, de 26 años. La delantera del Tianjin ya ha sacado a las Rosas de Acero de más de un apuro, como pudo verse especialmente en la Copa Mundial Femenina de la FIFA Canadá 2015™, cuando anotó el segundo gol de las suyas en el empate a 2-2 ante Nueva Zelanda que certificó su pase a la segunda ronda, para luego ser la artífice del triunfo sobre Camerún, al anotar el tanto del 1-0 definitivo.

Shanshan siguió labrándose su imagen de autora de goles decisivos en el Torneo Clasificatorio Olímpico Femenino de la AFC, celebrado en marzo, al firmar la diana que resolvió el choque frente a la República de Corea y permitió a la RP China sellar su pasaporte para Río 2016. Hace poco, abrió el marcador en un amistoso preparatorio para el torneo ante Zimbabue, que las asiáticas ganaron 3-0. Huelga decir pues que los aficionados esperan mucho de ella para poder empezar con buen pie este miércoles, ante la selección anfitriona, Brasil.

No obstante, Shanshan se fija como objetivo algo más que perforar la meta contraria. “Después de los clasificatorios del Mundial Femenino y la fase previa asiática para las Olimpiadas, tengo más confianza”, dice Shanshan a FIFA.com. “Pero debo correr más y pelear por el balón. También me hace falta ampliar mi visión de juego y mejorar en los pases”.

“Estamos orgullosas de disputar los Juegos Olímpicos”, añade Shanshan, cuya contribución fue decisiva para que China volviese al certamen ocho años más tarde. “Y queremos conseguir buenos resultados, reivindicarnos. Pero también debemos ser conscientes de la distancia que nos separa de las selecciones más potentes. Tenemos que esforzarnos por mejorar nuestro juego cuando nos enfrentemos a las mejores del mundo”.

Vuelta a la punta de ataque Shanshan actuó como única delantera del combinado chino que alcanzó los cuartos de final de Canadá 2015 en su regreso al Mundial Femenino. Y ha mantenido la titularidad a las órdenes del nuevo seleccionador, el francés Bruno Bini. Con todo, su desempeño resulta más sorprendente si cabe por haber sido antes defensa central con la selección, hasta que a falta de un mes para Canadá 2015 el técnico de entonces, Hao Wei, decidió alinearla en punta.

Shanshan ha sabido adaptarse perfectamente a su nuevo puesto. Y no tardó en despuntar como atacante, al marcar un gol tras otro con los colores de su país. El cambio de demarcación no convencía a muchos al principio, pero quienes la conocían ya sabían de su olfato anotador. De hecho, Shanshan se había distinguido en el ataque del Tianjin en 2014, al proclamarse máxima goleadora de la liga con la increíble cifra de 38 realizaciones.

En cierto modo, ha regresado a su posición de siempre, en la que tantos éxitos había cosechado. “Mi principal virtud es la velocidad”, analiza. “Y también el salto, para marcar de cabeza. Mis jugadores preferidos son Messi y Suárez. Siempre mantienen la calma y casi nunca perdonan. Los admiro por su capacidad de finalización, es fantástica. Messi tampoco es nada egoísta, y muchas veces asiste a sus compañeros para que marquen ellos”.

La etapa de Bini al frente de la selección china no pudo empezar mejor, ya que el equipo consiguió regresar a la cita olímpica. Shanshan explica que el entrenador francés ha introducido numerosos cambios. “Desde que ha llegado, tenemos cada vez más confianza”, reconoce. “Todos los días nos dice algo nuevo. Suele animarnos con una consigna o un poema. Y en la selección tenemos una nueva canción para este torneo. el equipo está cada vez más unido, y la moral es cada vez más alta”.

Bini ha manifestado claramente que aspira a una medalla en Río 2016. Shanshan, por su parte, opta por concentrarse en acumular experiencia internacional. “Este plantel es bastante joven. Al principio del último Mundial Femenino nos sentíamos mucho más tensas, pero con los entrenamientos y los partidos fuimos relajándonos y nos asentamos. Queremos conseguir resultados satisfactorios, pero todavía nos falta experiencia. Debemos aprender y mejorar”, concluye.