Cuando hay una final en juego y los nervios están a flor de piel, normalmente son los jugadores más experimentados los que salen a la palestra. La semifinal de infarto que depararon la RFU y Suiza en la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA Rusia 2021™ no fue diferente, ya que los ex campeones mundiales de la selección anfitriona asumieron el protagonismo.

El capitán Anton Shkarin logró el empate al final del tiempo reglamentado y el defensa Yury Krasheninnikov convirtió el penal decisivo, tras haber abierto el marcador de un encuentro de lo más apasionante.  

Sin embargo, el penal que lanzó el jugador de 36 años distó mucho de ser convincente… 

“¿Qué puedo decir? No le pegué bien al balón. Tuve suerte de que el balón saliera rebotado hacia arriba tras tocar en la arena. Pero como decimos en Rusia: la fortuna favorece a los valientes”, señala un radiante Krasheninnikov a FIFA.com.

“Hubo una época en la que el seleccionador no confiaba realmente en mí para lanzar un penal, pero creo que solamente he fallado uno durante toda mi carrera. Últimamente he sido uno de los cinco lanzadores de penales designados, ¡y el seleccionador ha acertado!”. 

Mikhail Likhachev también tomó la decisión correcta en lo que respecta al portero durante la tanda de penales. Denis Parkhomenko no ha jugado ni un solo minuto en el campeonato. Sin embargo, se encontró situado bajo palos en el momento más crucial. 

“No estaba planeado”, admite Krasheninnikov, a quien sus compañeros conocen como ‘Krash’ para evitar que se les trabe la lengua con su largo apellido. “El seleccionador dio en el blanco. Suele acertar con esas decisiones”. 

Krash es uno de los jugadores más experimentados de la RFU, y tanto los aficionados como sus compañeros lo adoran: “¡Krash, eres el mejor!”, le grita Boris Nikonorov mientras Yury interactúa con los hinchas rusos tras el partido. 

“Los aficionados han jugado un papel importante en nuestra victoria; quiero darles las gracias por su apoyo”, afirma Krasheninnikov.

“Fue un partido complicado. Los suizos tienen un portero magnífico. Ott también es un jugador de una habilidad excepcional y muy rápido. No puedes concederle ningún hueco porque simplemente correrá hacia ese espacio; es dificilísimo de marcar. Había visto todos los partidos de Suiza y me impresionó de veras su victoria sobre Brasil. Ambas selecciones estuvieron muy igualadas”. 

Uno de los momentos clave del encuentro se produjo cuando Stankovic falló un remate a puerta vacía en la prórroga.

“Mi corazón se paró”, recuerda Krash. “Stankovic normalmente no desaprovecha esas oportunidades. Pero nosotros creímos hasta el final que podíamos ganar”. 

Pese al dramatismo que caracterizó a la semifinal, Yury es la calma personificada: “No siento ninguna emoción. Hicimos un gran trabajo esta noche, pero tenemos una final que jugar. Ahí es cuando las emociones empezarán a hacer efecto”. 

Los anfitriones no tenían ninguna preferencia respecto al rival: “Sea Senegal o Japón, estaremos preparados. Solo una selección puede proclamarse campeona, y tenemos que asegurarnos de ser nosotros; no hay premios para el segundo puesto”, concluye Krash.