sábado 16 abril 2016, 15:21

Dunn: "Los torneos juveniles me han hecho sentirme cómoda hoy"

Crystal Dunn está acostumbrada a zafarse de todas las defensas que le salen al paso gracias a su vertiginoso ritmo y excelente toque de balón. Es más, ahora mismo esta máquina de marcar goles se antoja imparable. Con ocho realizaciones en su haber en lo que llevamos de 2016, ha superado a delanteras mucho más consolidadas que ella en la selección nacional. La cifra impresiona de por sí, pero resulta aún más chocante si tenemos en cuenta que durante su paso por los combinados juveniles, Dunn desempeñó su oficio en la zaga.

Sin embargo, no pudo saborear la gloria en Canadá 2015. Nuestra protagonista, de 23 años de edad, no superó el corte de las elegidas por Jill Ellis para la Copa Mundial Femenina de la FIFA™ dado que en los tres años anteriores no consiguió hacerse un hueco definitivo en las filas de la absoluta. El revés, no obstante, no le hizo mella.

Mientras las Barras y Estrellas alzaban el trofeo planetario en Vancouver, Dunn campaba a sus anchas en la tabla de máximas anotadoras de la NWSL. Así las cosas, Ellis no tardó en volver a contar con ella para los preliminares del Torneo Olímpico de Fútbol Femenino de Río 2016. Y aunque se perdió el triunfo de su país en la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2015, posee una dilatada trayectoria en competiciones internacionales en categoría juvenil que seguramente le vendrá muy bien si finalmente viaja a Río 2016.

"Jugar en esos estadios, en ese ambiente, me ha hecho sentirme cómoda y segura hoy", declaró Dunn a FIFA.com sobre su participación en la Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA Nueva Zelanda 2008 y la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA Japón 2012. "Sentir esa presión a una edad temprana sin duda te prepara para el futuro. Siempre llevaré esas vivencias en mi corazón. A los 17 disputé la final (contra la RDP de Corea). Miré a mi alrededor y pensé: '¡Hala, es alucinante!'. Obviamente, perder fue una gran decepción, pero la experiencia sigue ahí. Y claro, en Japón, con el equipo de 2012, volvimos a casa con la copa. Derrotar a Alemania en la final es algo que nunca olvidaré".

Los beneficios de competir al más alto nivel a edades tempranas no pasan inadvertidos para algunas de las figuras de más renombre del fútbol femenino. "Recuerdo hablar con Abby (Wambach) sobre el hecho de que ella nunca vivió la experiencia de ganar un torneo internacional juvenil", rememoró Dunn. "Estaba incluso un poco molesta al respecto. Solía decir: '¡Vaya, yo nunca disfruté de esa experiencia tan joven!'. Por supuesto, eso no le impidió alcanzar logros más grandes y más importantes…".

Dunn la DJ A la neoyorquina, todas esas vivencias (la segunda plaza en la edición inaugural del certamen sub-17 y el título sub-20 en Japón 2012) le han permitido imponerse en la selección absoluta. Es más, ahora que ya está plenamente consolidada en el combinado, ha asumido un difícil papel solo apto para personas valientes, con cierta veteranía y conscientes de las consecuencias que acarrea el fracaso.

"Normalmente me encargo de la música", explicó con una nota de ansiedad en la voz. "Nadie quiere ese trabajo, ¡entraña mucha presión!. Si pones una canción mala, la gente empieza a gritar '¡Fuera la DJ!'. Pero es una buena manera de poner a todo el mundo en marcha. Me enorgullece ser la payasa de la clase, siempre bailoteando. Me hacen vídeos, desafortunadamente. Jugar con futbolistas de élite genera un ambiente muy estresante. Por eso me gusta divertirme todo lo posible".

Está claro que Dunn disfruta rebajando la tensión en el vestuario, aunque también sabe que se está convirtiendo a pasos agigantados en una de las integrantes del n��cleo que liderará a la formación de camino a Francia 2019 y más allá. Ella, por su parte, confía plenamente en las que fueron sus compañeras en categoría juvenil, como Morgan Brian, Julie Johnston y Sam Mewis, con las que se ha vuelto a encontrar en la absoluta. "Tengo mucha confianza en las integrantes del grupo con las que ya he jugado en categoría juvenil. Creo que, colectivamente, tenemos la cabeza sobre los hombros. Todas somos jugadoras de equipo y pienso que nos aguarda un futuro muy brillante".