Durante la pretemporada pasada, el Wolfsburgo fue noticia por realizar varios fichajes de relumbrón que le permitieron reafirmar su voluntad de consolidarse como uno de los grandes del fútbol alemán. Entre otros, el club verdiblanco contrató los servicios del internacional brasileño Dante, que llegó procedente del Bayern Múnich; del internacional alemán Max Kruse, que vino del Borussia Moenchengladbach; y del campeón del mundo Julian Draxler, que cambió el Schalke 04 por la entidad de la Baja Sajonia. Sin embargo, uno de los fichajes del conjunto germano dejó sin palabras a los expertos: su nombre es Benedikt Saltzer.

A sus 23 años, Saltzer no llegó al Wolfsburgo para reforzar la defensa o el ataque, sino, nunca mejor dicho, para tomar el mando del conjunto del equipo. Y es que este joven alemán juega profesionalmente al FIFA 16 de EA Sports con los colores de los actuales subcampeones de la Bundesliga. El club verdiblanco se convierte así en un pionero, ya que es la primera vez que un equipo de fútbol profesional contrata a un jugador de videojuegos.

En cualquier caso, la decisión no se tomó de manera improvisada, como explicó "Salz0r", que es el nombre de guerra de nuestro protagonista, a FIFA.com: "Hacía tiempo que el Wolfsburgo venía mostrando un gran interés por el tema de los videojuegos deportivos. Estoy muy contento de haber alcanzado este acuerdo y de tener la oportunidad de representar a este club".

Otra muestra del gran potencial que posee el mundo de los videojuegos es el enorme interés que ha suscitado la competición preliminar de la FIFA Interactive World Cup 2016, en la que han participado más de dos millones de jugadores de todo el mundo. El Wolfsburgo se ha percatado de ello y ha decidido dar un paso adelante, al igual que hizo Saltzer hace unos 9 años, cuando se lanzó al mundo de los videojuegos deportivos tras darse cuenta de que sus amigos se habían cansado de perder contra él. "La comunidad de los amantes de los videojuegos deportivos es enorme. En Alemania todavía no somos demasiado conscientes del gran potencial que tiene este ámbito. Mercados como Asia y América, donde este tipo de videojuegos se consideran ya un deporte, están mucho más avanzados. De hecho, en estos continentes, millones de aficionados siguen los torneos desde sus casas a través de internet".

Un trato con el que todos salen ganando ¿En qué consiste entonces el acuerdo de colaboración que han alcanzado Saltzer y el Wolfsburgo? "Recibo apoyo en todos los aspectos, ya sea en lo que a equipamiento se refiere o para que las condiciones de entrenamiento en mi casa sean ideales. Por ejemplo, me facilitan un mando o una silla nuevos, de forma que cuando juegue me encuentre lo más cómodo posible".

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"Un millón de gracias a @NEEDforSEAT y el Wolfsburgo por este increíble asiento. Ahora sí estoy preparado para ponerlo en marcha ;-) "

A su vez, el joven estudiante de magisterio compite en la Bundesliga virtual con la camiseta y con el equipo del Wolfsburgo. De este modo, ambas partes salen ganando con el acuerdo. "El FIFA es un juego que tiene cada vez más realismo y que goza de una gran popularidad entre nuestros seguidores", explica a FIFA.com Klaus Alofs, director deportivo del Wolfsburgo, en relación con las ventajas que el trato supone para el club. "Los videojuegos deportivos nos permiten llegar sobre todo a los aficionados jóvenes, y eso supone una enorme alegría para nosotros. Queremos que nuestra creciente implicación en este ámbito nos permita en el futuro acercar estos dos mundos en un grado mucho mayor", añade el dirigente.

Sin embargo, el rango de posibilidades es mucho más amplio. En este sentido, Saltzer, que en el fútbol real juega de delantero en un equipo de la séptima categoría del balompié alemán, cree que la variante virtual de este deporte puede servir por ejemplo para aprender y mejorar en el aspecto táctico. "Si la utilizas adecuadamente, la inteligencia artificial del ordenador apenas comete errores. Los movimientos de la defensa son perfectos y los zagueros apenas dejan espacios. Así, en el fútbol real se podría analizar un partido del FIFA para ilustrar cómo se deben mover los defensas", explica.

La gran final es el objetivo Más allá de su colaboración con el Wolfsburgo, "SaLz0r", que compara su estilo de juego sobre el césped con el de Mario Gómez, se ha marcado grandes metas. Tras proclamarse campeón de Alemania cuatro veces y de Europa en una ocasión, nuestro protagonista persigue ahora un objetivo que todavía no ha conquistado: participar en la FIWC. "Se trata del torneo más importante y prestigioso en el mundo del FIFA. Estoy intentando clasificarme, pero la competición preliminar a través de internet, en la que participan jugadores de todo el planeta, es un tanto difícil", confiesa el joven jugador. "Yo prefiero los torneos de clasificación presenciales", añade.

Precisamente en una de esas competiciones presenciales fue donde Daniel Butenko logró el año pasado el billete para la FIWC que se celebró en Múnich. Los dos jóvenes jugadores son buenos amigos, así que Saltzer siguió de cerca la participación de su paisano Butenko. "Es muy bueno técnicamente y en lo que al manejo del balón se refiere, pero se trata de un chico muy joven y su estilo de juego reveló que le faltaba algo de experiencia en cuanto a lo que supone disputar una FIWC".

Según nuestro estudiante de magisterio, Butenko alcanzará "un gran nivel en un futuro próximo" y podría incluso ser el próximo en firmar un contrato con un club de la Bundesliga. No en vano, Saltzer está convencido de que "en Alemania, el FIFA va a seguir creciendo a pasos agigantados y no me sorprendería que otros dos o tres clubes siguiesen el ejemplo del Wolfsburgo en 2016".

Así, dentro de poco, los clubes de fútbol podrían encontrarse compitiendo por los títulos no sólo sobre el césped, sino también a los mandos de la consola. La carrera ya ha comenzado y el Wolfsburgo ha tomado la delantera. De hecho, el club de la Baja Sajonia anunció la semana pasada la contratación de David "DaveBtw" Bytheway, subcampeón de la FIWC que se celebró en Río de Janeiro en 2014, con lo que se asegura otro gran fichaje que pone ahora la pelota en el tejado de los demás clubes profesionales de Alemania.