jueves 07 marzo 2024, 21:45

Las referentes de Casey Reibelt en su camino hasta lo más alto

  • En su camino hasta la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023™, Casey Reibelt tuvo de referente a una leyenda local

  • La árbitra australiana ofició en el Mundial femenino de Australia y Nueva Zelanda

  • En el Día Internacional de la Mujer, Reibelt expresa su esperanza de servir de ejemplo a las árbitras jóvenes

Casey Reibelt guarda un "grato recuerdo" de la Copa Mundial Femenina celebrada en su país natal el año pasado, por lo que nada le haría más ilusión que servir de inspiración a una nueva generación de árbitras locales. La árbitra australiana sabe muy bien lo estimulante que puede resultar contar con un referente del mismo país.

Tammy Ogston, que dirigió la final de la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2007™, vivía en un barrio cercano al suyo en Brisbane, su ciudad natal. Aunque Reibelt daba todavía sus primeros pasos como árbitra, el hecho de ver a una compañera de la zona en el mayor acontecimiento deportivo del mundo le hizo darse cuenta de que podía abrirse camino en el fútbol internacional de primer nivel.

En este caso, resulta muy oportuno el dicho de que difícilmente puedes llegar a ser algo que no sabes que existe.

Con motivo del Día Internacional de la Mujer de 2024, Reibelt nos habla de su trayectoria, desde sus humildes comienzos hasta su participación en dos ediciones de la Copa Mundial Femenina de la FIFA™, sus referentes tanto nacionales como internacionales, y los ejemplos actuales que pueden servir de inspiración a la nueva generación de árbitras.

China v England: Group D - FIFA Women's World Cup Australia & New Zealand 2023

Referentes locales

Siendo todavía una adolescente, Reibelt comenzó a ejercer de árbitra "por pura afición al fútbol" y para sacarse un dinero extra. Poco después, y antes de iniciar su trayectoria profesional en la primera división del país en 2008, Reibelt pudo contemplar con sus propios ojos la dedicación de Ogston.

"A lo largo de mi juventud, tuve la enorme fortuna de que varias árbitras FIFA vivieran en Brisbane. Jacqui Hurford, Krystyna Szokolai y Tammy Ogston habían participado en competiciones de la FIFA y en los Juegos Olímpicos", afirmó Reibelt.

"En uno de los primeros entrenamientos a los que fui, vi a Tammy Ogston hacer la prueba Course-Navette. Recuerdo perfectamente que Tammy fue una de las que más aguantó, incluso más que algunos hombres. Al verla, pensé que quería ser como ella, quería romper barreras y demostrarle a todo el mundo de lo que era capaz. Tuve mucha suerte de contar con esas referentes al inicio de mi carrera".

"Para mí, ver a una australiana dirigir la final de la Copa Mundial Femenina [de 2007] fue algo maravilloso. Sin duda, fue toda una inspiración en mis comienzos y me marcó el camino que quería seguir".

Hambre de éxito

Década y media después, el currículo de Reibelt difícilmente podría ser más extenso. Además de ser la segunda australiana en oficiar en un partido profesional masculino, el año pasado se convirtió en la primera árbitra de su país en dirigir un encuentro de la Liga de Campeones de la AFC.

Gracias a su afán de mejora, en 2014 Reibelt fue nombrada árbitra FIFA. Desde entonces, la australiana ha dirigido encuentros en numerosos países. Esta trayectoria vivió su punto álgido el año pasado con motivo del Mundial celebrado en su país natal, donde también ofició Kate Jacewicz, oriunda del estado de Queensland al igual que Reibelt. "Tuve la suerte de iniciar mi carrera cuando muchas de estas pioneras [del arbitraje femenino] estaban todavía en activo. No paraba de preguntarles cómo era la experiencia, si se sentían aceptadas y cómo habían llegado hasta allí. Esto último me interesaba especialmente, porque era algo que yo también quería conseguir".

La nueva normalidad

El panorama de las árbitras y del fútbol femenino en general ha cambiado a lo largo de un periodo relativamente corto en apariencia.

"Me encantó ver un trío arbitral íntegramente femenino en uno de los encuentros de Australia en la última Copa Asiática —afirmó Reibelt—. Me produce una enorme satisfacción que ya haya niños y niñas a los que les parezca completamente normal ver a árbitras oficiando».

El pasado fin de semana, a sus 36 años, Reibelt, quien también ejerce de árbitra de vídeo, alcanzó el hito de 100 partidos dirigidos en primera división. Aunque todavía se ve obligada a compaginar los entrenamientos con su trabajo diario como profesora, la ocasión sirvió para recordar lo mucho que se ha avanzado en este tema.

"Mi partido número 50 coincidió también con el derbi de Sídney, pero entonces se jugó en un pequeño campo de barrio frente a unos pocos cientos de espectadores. No me enteré de que era mi partido número 50 hasta después. Esta vez, el derbi femenino se disputaba en un gran estadio y, para cuando finalizó, había alrededor de 10 000 espectadores. Hoy en día, el arbitraje tiene el protagonismo que merece y se reconoce ya como una parte más de este deporte. [Es visible] en el fútbol femenino, en cómo ha crecido y en cómo se han ido reconociendo los logros [de las árbitras]".

Oceanía, epicentro del fútbol mundial

Reibelt afirma que raro es el día en que no le preguntan o piensa sobre lo especial que fue vivir la Copa Mundial Femenina de la FIFA Australia & Nueva Zelanda 2023™.

"Estoy segura de que hubo muchos niños y niñas que, al ver los estadios llenos, la calidad de los partidos y el entusiasmo general, soñaron con arbitrar un día un partido a ese nivel. Uno de los mejores aspectos de ser árbitra es la oportunidad de participar en partidos apasionantes en los que se ve un gran fútbol, y el reto es mayúsculo.

El arbitraje [durante la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023™] fue de un nivel muy alto. Quedó patente la mejora de la condición física y la calidad de las árbitras. En este sentido, recibimos un apoyo inestimable de la FIFA".

"Es una experiencia que guardaré para siempre en mis recuerdos".

"Espero de verdad que nuestros jóvenes árbitros, y en particular las chicas, al vernos a mí y a otras compañeras, sientan el deseo de ponerse a prueba, de romper barreras y de no rendirse ante la adversidad".

Arbitraje