Hay pocas cosas que la delantera de la selección inglesa Kelly Smith no haya conseguido a lo largo de una carrera internacional de más de dos décadas. Sin embargo, todo lo bueno llega a su fin, y Smith, que recibió la Orden del Imperio Británico en 2008, dio por terminada este 3 de febrero su trayectoria con las Tres Leonas. FIFA.com repasa algunos de los logros** **de una figura emblemática del fútbol femenino.

Un reconocimiento global Es posible que su increíble carrera alcanzase su apogeo en 2009, cuando la entonces futbolista del Boston Beakers fue incluida entre las tres candidatas a Jugadora Mundial de la FIFA. Aunque terminó por detrás de las dos grandes estrellas de aquella época —la brasileña Marta y la alemana Birgit Prinz—, Smith consiguió con su candidatura algo que no ha logrado ninguna otra jugadora inglesa. No es extrañar que el actual seleccionador de Inglaterra, Mark Sampson, se deshaga en elogios hacia ella: “Suele abusarse del término ‘categoría mundial’, pero si examinamos la carrera internacional de Kelly vemos que no ha dejado de demostrar en los mayores escenarios que ha sido, sin duda alguna, una de las más grandes futbolistas de todos los tiempos”.

Hitos y récords Muy pocas jugadoras, o ninguna, serán capaces de igualar el historial de Smith a lo largo de 18 años con el combinado nacional. Disputó cuatro Eurocopas femeninas (2001, 2005, 2009 y 2013) y dos Copas Mundiales Femeninas de la FIFA™ (2007 y 2011). También formó parte del equipo británico en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Y, a pesar de sufrir varias lesiones prolongadas, se convirtió en la tercera inglesa en alcanzar las 100 internacionalidades, por detrás de Gillian Coulthard y Rachel Yankey, culminando su carrera con un total de 117. El récord actual del conjunto inglés pertenece a la centrocampista Fara Williams, aún en activo.

Un momento memorable Aunque no llega a igualar la celebración de Brandi Chastain quitándose la camiseta cuando conquistó el Mundial femenino con Estados Unidos en 1999, Smith también nos dejó una imagen especial ocho años más tarde, en China 2007. Tras firmar un doblete en los instantes finales del partido de su estreno, contra Japón, Smith lo festejó quitándose una bota y dándole un beso. El 2-2 definitivo de aquel encuentro fue decisivo para que Inglaterra pudiese alcanzar las fases de eliminatoria, a expensas de las Nadeshiko. Aun así, Hope Powell, entonces seleccionadora de Inglaterra, le prohibió repetirlo, temerosa de que las defensoras contrarias la identificasen mejor y le prestasen una mayor atención.

La máxima artillera del país Al marcar el segundo gol contra Suiza en la repesca del Mundial femenino de 2011, Smith superó el registro de 40 tantos con la selección de Karen Walker, pasando a ser así la máxima realizadora de la historia de Inglaterra. Sus 46 dianas siguen representando un récord, a una gran distancia de cualquier integrante de la actual selección.

La primera inglesa en Estados Unidos Smith pasó varias etapas provechosas en Estados Unidos. Primero jugó en el sistema universitario y luego dio el salto a la WUSA, una competición pionera, y más tarde a la WPS. De hecho, fue la primera jugadora inglesa que actuó en las ligas profesionales del país norteamericano, logrando así su gran meta de alcanzar el profesionalismo. Una exitosa película de 2002, Bend it like Beckham, contaría una historia similar a la protagonizada por Smith.

El orgullo del norte de Londres La carrera de Smith en Inglaterra ha estado siempre ligada al Arsenal, unas Gunners que posiblemente hayan ejercido el mayor dominio de un equipo en la historia del fútbol femenino del país. Smith, que seguirá jugando en el equipo pesar de su retirada internacional, acumula más de cien goles en el cuadro londinense, con el que ha conquistado más de una docena de trofeos.