jueves 12 diciembre 2013, 01:53

Erceg: "Hemos llegado muy lejos"

A poco que uno examine en detalle la plantilla del FF USV Jena, puede llevarse la impresión de que este club de la Bundesliga alemana siente especial debilidad por las jugadoras neozelandesas. Tras los fichajes de Ria Percival y Amber Hearn, con Abby Erceg son ya tres las integrantes de la selección nacional de Nueva Zelanda que defienden los colores del club del este de Alemania.

"Lo cierto es que me viene muy bien contar con un par de Kiwis en el equipo. Me hacen las cosas más fáciles", revela Erceg entre risas en la entrevista que concedió en exclusiva a FIFA.com. "En Nueva Zelanda no hay demasiado dinero para el fútbol, pero es un deporte que nos apasiona. Por eso, cuando venimos aquí , trabajamos muy duro. Valoramos el fútbol y no lo tomamos a la ligera. Es algo con lo que disfrutamos, y todas trabajamos por las demás”, afirma para subrayar las particularidades de sus compatriotas.

Erceg fichó con el Jena en agosto, y pese a su juventud acumula ya una considerable experiencia. A sus 24 años, el fútbol la ha llevado de Nueva Zelanda, a Australia, España y ahora a Alemania. "Aquí se presta especial atención a la habilidad técnica de la jugadora y a lo que es capaz de hacer con el balón. En Nueva Zelanda y en Australia quizá no tengamos tanto talento. Allí nos concentramos más en el aspecto físico del juego", así resume Erceg las diferencias entre el fútbol de estos países.

"Aquí se juega al fútbol de otra manera. En Australia la superioridad es física; en Alemania, técnica. A mí, desde el punto de vista profesional, me ha venido muy bien adaptarme a este estilo: siempre es bueno comprender esta faceta del juego y ampliar el repertorio futbolístico", continúa.

No duda cuando se le pregunta por sus objetivos en Jena. "Me disgusta mucho que la temporada pasada no diésemos la talla. Ahora ocupamos la quinta posición de la tabla y, si conseguimos situarnos entre las tres primeras, será un logro importante. Pero si al final mantenemos este puesto, también será como para sentirse orgullosas".

El duro camino hacia el éxito Pero la zaguera nacida en Whangarei no suma sólo partidos en competiciones de clubes: Erceg es hoy una de las jugadoras más veteranas de la selección neozelandesa. Desde que debutó con el combinado nacional el 14 de noviembre de 2006, son ya 89 los partidos que Erceg ha disputado con Nueva Zelanda. Asimismo, es una de las jugadoras más jóvenes de su país que ha superado los 50 partidos internacionales.

"Al principio nos faltaba estructura: se jugaban muy pocos partidos, y los entrenadores iban y venían", recuerda Erceg. "Cuando llegué yo se designó también a un nuevo entrenador , que intentó implantar un sistema de juego desconocido hasta entonces para nosotras. Jugamos contra equipos buenos frente a los que no teníamos posibilidades, pero él creyó en nosotras y nos transmitió seguridad. Y ahora triunfamos con ese mismo estilo de juego. Hemos llegado muy lejos, y estoy orgullosa de haber contribuido a ese éxito".

Erceg está convencida de que el fútbol femenino va por el camino adecuado en Nueva Zelanda, y los últimos resultados parecen darle la razón. En octubre, las Football Ferns arañaron un empate (1-1) con Estados Unidos, que encabeza actualmente la clasificación femenina de la FIFA. Anteriormente se habían impuesto ya por un ajustado 1-0 a Brasil, y las pupilas del seleccionador Tony Reading también causaron muy buena impresión frente a la vigente campeona mundial, Japón (1-1 en junio).

La jugadora tampoco alberga la menor duda de que Nueva Zelanda llegará a contarse entre las grandes potencias del fútbol femenino. "Si seguimos por este camino, es algo que llegará. Pero eso será cuando yo ya me haya retirado. Para granjearse una reputación así hace falta tiempo. Pero en eso estamos, y espero que la próxima generación alcance el objetivo".

Una Copa Mundial termina y otra empieza Las Football Ferns volverán a tener oportunidad de demostrar su clase en torneos internacionales si el próximo septiembre obtienen la clasificación para la Copa Mundial Femenina de la FIFA Canadá 2015.

"En cuanto una Copa Mundial termina, te pones a pensar en la siguiente. Te planteas siempre cuál es la mejor manera de prepararse para el campeonato y qué se puede hacer para ayudar al equipo. La espero con mucha ilusión", reconoce Erceg, que ha participado ya en dos fases finales del Mundial y en dos Juegos Olímpicos.

"La principal diferencia entre las Copas Mundiales de 2007 y 2011 estuvo en que en Alemania fuimos competitivas. En China éramos muy jóvenes e inexpertas, y no sabíamos qué nos esperaba. Es bueno formar parte de un equipo que ha pasado por ambas situaciones. De ese modo se valora realmente lo que significa llegar hasta allí. Tuvimos que abrirnos paso desde muy abajo y pelear muy duro para llegar hasta donde estamos ahora", concluye.