En el primer examen importante que afrontaban en ‘su’ Copa Mundial Femenina de la FIFA (un choque de octavos de final que prometía mucho contra Brasil), la selección de Francia sufrió lo indecible para deshacerse de una combativa Seleção liderada por sus leyendas, Cristiane y Marta. Finalmente, en la prórroga, la capitana Amandine Henry dio la victoria a sus compatriotas.

23 de junio de 2019, Stade Océane, Le Havre (Francia)

Francia: Gauvin (52’), Henry (107’) / Brasil: Thaisa (63’)

Las francesas partían como favoritas. En primer lugar, porque jugaban en Le Havre, en un Estadio Océane donde siempre habían ganado, y donde venían de imponerse por 3-1 a Estados Unidos en un amistoso a comienzos de año. Las anfitrionas habían quedado, además, primeras de su grupo con pleno de puntos, 7 goles a favor y 1 en contra.

Brasil se había metido más ajustadamente como una de las mejores terceras de grupo, tras haber vencido a Italia y a Jamaica y haber perdido de forma dolorosa contra Australia. No en vano, las brasileñas empezaron ganando 2-0 antes de venirse abajo y encajar tres goles…

Ambas selecciones ya se habían enfrentado una vez en un Mundial, en la primera fase de Estados Unidos 2003, con un 1-1 en Washington. Con ese resultado, Brasil pasó a cuartos de final y las Bleues cayeron eliminadas.

El buen trabajo de Bouhaddi La guardameta francesa Sarah Bouhaddi había vivido una fase de grupos relativamente tranquila en la que estuvo muy poco solicitada. Este partido fue diferente. La portera del Olympique de Lyon (que solamente cedió una vez ante Thaisa en el minuto 63) tuvo que intervenir varias veces frente a las delanteras brasileñas; especialmente en un cabezazo de Cristiane que desvió al larguero en el minuto 55.

Marta y Cristiane, dominantes pero... Marta, con 33 años y 21 partidos mundialistas a sus espaldas, y Cristiane, con 34 años y 19 partidos en Mundiales, eran las dos jugadoras más experimentadas sobre el campo. Y ambas lo demostraron a cada instante, con pases precisos, carreras veloces y una intensa presión... hasta que el físico aguantó. Al cabo de 70 minutos, las Canarinhas bajaron el ritmo y las Bleues recuperaron el control, sobre todo con la entrada al campo de Gaëtane Thiney.

De Henry a Henry En 2006 ya había ocurrido que alguien apellidado Henry rescatase a Francia contra Brasil en un partido de la segunda fase de un Mundial gracias a un gol venido de un libre indirecto desde la banda. Entonces, Zinédine Zidane envió el balón hacia el pie de Thierry Henry. Aquí, el libre indirecto lo lanzó Amel Majri y fue Amandine Henry quien marcó, pero el resultado fue el mismo: Francia pudo jugar la siguiente ronda de un Mundial.

Si bien Valérie Gauvin y Henry acapararon todo el protagonismo con sus goles, Griedge Mbock se mostró especialmente decisiva en defensa. En el minuto 105, cuando las Bleues dominaban, Debinha estuvo muy cerca de hacer callar al estadio Océane. La extremo brasileña desbordó por su banda izquierda, se vino hacia el centro y remató. Con su disparo superó a Sarah Bouhaddi, pero Mbock reculó a toda velocidad y se lanzó para impedir que el balón entrase en la portería desguarnecida.

“Ha sido una magnífica clasificación; difícil como en todos los partidos internacionales y extraordinaria de vivir por las muchas emociones, el gran apoyo del público, lo mucho compartido, un calor sofocante, una presión infernal… partidos que gustan y que hacen que nuestra historia se vuelva aún más bonita”. Gaëtane Thiney, centrocampista de Francia.

“Es un momento especial, hay que disfrutarlo. Lo digo en el sentido de que hay que apreciar este resultado en su justa medida. Reclamamos apoyo, pero hay que saborear lo que hemos hecho. Hoy sonreímos y creo que eso es primordial: hay que llorar al principio para sonreír al final”. Marta, capitana de Brasil

“El público ha estado a la altura; nos han animado hasta el último minuto, en los momentos en que no estábamos bien. Va también por ellos. Ahora hay que recuperar; nos hemos dejado muchas energías”. Wendie Renard, defensa de Francia.

Una vez superado el escollo brasileño, Francia se enfrentó a Estados Unidos, defensora del título, en una especie de final anticipada. Un doblete de Megan Rapinoe encaminó a las Barras y Estrellas hacia la conquista de un nuevo título mundial, mientras que las Bleues se despidieron de ‘su’ campeonato en la misma ronda que cuatro años antes.