martes 04 septiembre 2018, 07:09

Nueva Zelanda busca su techo 

  • Jugó todos los Mundiales y nunca llegó a cuartos

  • Sus rivales de grupo: Finlandia, Uruguay y Ghana

  • Su seleccionador Leon Birnie quiere romper esa barrera

La última vez que Nueva Zelanda pisó un terreno de juego en la Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA estableció un récord nacional con su victoria por 5-0 ante la anfitriona, Jordania. De hecho, este certamen siembre ha sido especial para ella, dado que hace 10 años albergó su edición inaugural.

Nueva Zelanda ha participado en todas las ediciones del torneo hasta la fecha, pero nunca ha pasado a la fase de grupos. Sin embargo, cuando cruce el Pacífico dentro de dos meses para tomar parte en Uruguay 2018, lo hará con grandes esperanzas de ir un paso más allá.

Tras el sorteo, celebrado en mayo, su seleccionador, Leon Birnie, declaró: "Aunque [la clasificación] será complicada de lograr, aspiramos a convertirnos en la primera selección en hacer historia".

La suerte colocó a las campeonas de Oceanía en un grupo fascinante en el que también están encuadradas Ghana, perenne representante de África; Finlandia, la debutante europea; y Uruguay, la anfitriona, que se ha preparado a conciencia.

"Como colectivo, somos conscientes de que Nueva Zelanda no ha pasado de la fase de grupos a nivel sub-17 hasta la fecha", declaró Birnie a FIFA.com.

"Y pese a que reconocemos las cualidades de las tres rivales en nuestro grupo y comprendemos los desafíos que cada una representa, creemos que tenemos posibilidades de superarlo. Tenemos ganas de medirnos a las tres, especialmente a la anfitriona, Uruguay, frente a lo que estoy seguro será una afición local apasionada que la animará y le prestará todo su apoyo".

Experiencia juvenil Nueva Zelanda se clasificó con facilidad, registrando incluso un 6-0 contra Nueva Caledonia en la final. Pero eso fue hace más de un año, y para las Kiwis, las ocasiones de disputar partidos internacionales son limitadas.

Birnie afirmó que confiará en las jugadoras que estuvieron en la reciente Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA, celebrada en Francia, Maggie Jenkins, Gabi Rennie, Aneka Mittendorff y Anna Leat, "para liderar el combinado durante el torneo".

"Estamos muy contentos con el equipo que ya está decidido y creemos que contamos con jugadoras interesantes que han demostrado sus cualidades y su capacidad para ser más que competitivas en la Copa Mundial de este año".

Birnie dejó muy buen sabor de boca en su experiencia previa en un torneo de la FIFA, hace dos años en Papúa Nueva Guinea. En aquella ocasión, su fogueado combinado sub-20 derrotó a Ghana, a la que se volverá a enfrentar en Uruguay 2018, y plantó cara hasta el final a dos pesos pesados como Francia y Estados Unidos.

"Hemos aprendido mucho en los dos ciclos", añadió el seleccionador, que la semana pasada fue padre por segunda vez. "Ahora tengo la oportunidad de ponerlo en práctica y ayudar a este grupo de jugadoras y cuerpo técnico a lograr algo potencialmente especial".

Independientemente de lo que suceda en Uruguay 2018, Birnie sabe que el desarrollo deportivo y personal de sus pupilas también forma parte de sus atribuciones. "La finalidad de esta categoría ha sido ayudar a las jugadoras en su desarrollo en diversas áreas, tanto dentro como fuera de la cancha", aseguró el exmediocampista de la liga nacional de Nueva Zelanda, de 36 años de edad.

"Hemos intentado educar, expandir y desafiar a las jugadoras dentro de nuestros entornos exponiéndolas a varias oportunidades de aprendizaje".

"Aunque la Copa Mundial es una competición cumbre, la consideramos como otra oportunidad más para seguir contribuyendo al desarrollo de las jugadoras en la escena mundial. A través de estas experiencias queremos ayudar a las jugadoras a que su transición hacia otras categorías futuras sea fluida, en las selecciones juveniles y después en la absoluta".