No hay muchas adolescentes en el mundo que puedan presumir de haber marcado el gol que llevó a su país a un Mundial. Pero Andersen Williams es una de esas pocas elegidas. Su diana en el minuto 89 del partido por el tercer puesto en el Campeonato Femenino Sub-17 de la CONCACAF 2018 contra Haití certificó la sexta participación consecutiva de la selección canadiense en una Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA.

“Todo empezó con un córner que sacamos en los últimos instantes del encuentro”, rememora Williams para FIFA.com. “Julianne Vallerand, nuestra lateral, puso un balón buenísimo al segundo palo. Jordyn Huitema lo cabeceó y lo envió hacia el centro de la portería. Yo solamente tuve que adelantarme para empujarlo al fondo de la red”. La humildad se refleja en las palabras de Williams, que hizo mucho más que empujar la pelota.

“Cuando vi que el balón venía hacia mí, lo primero que pensé fue: ‘tienes que darle de cabeza o con el pie’. Eso es todo lo que pensé”, cuenta esta futbolista de 16 años. “El balón entró y fue increíble. Todas las chicas corrieron hacia a mí para celebrarlo y los dos últimos minutos del partido se nos hicieron eternos. ¡Menos mal que aguantamos y lo conseguimos!”.

La emoción se desataba con el pitido final de la árbitra. “A continuación, hubo algunas lágrimas de felicidad. Bueno, ¡fue más bien un mar de lágrimas [ríe]! No sé cómo describirlo. Fue fantástico. Nuestra mentalidad y nuestra química fueron sobresalientes”.

¿Y cuántas veces ha visto el gol desde entonces? “¡Unas pocas [ríe]! Y mi familia otras tantas, también. Al verlo de nuevo es como revivir el momento”, asegura.

La jugadora creció junto al borde de una piscina. Proviene de una familia de deportistas: su madre, Trina, es jugadora y entrenadora de waterpolo, mientras que Andrew, su padre, y Nigel, su tío, fueron jugadores de fútbol americano. Ella empezó a jugar al fútbol a los ocho años en Calgary y, seis años después, se estrenó en el programa juvenil de la selección canadiense.

¿Cómo está viviendo estos meses previos a su primera Copa Mundial? “Es como un sueño. Una locura. Tengo la gran suerte de entrenar a diario con jugadoras internacionales en el Vancouver Whitecaps, en un entorno muy exigente y muy competitivo. Todas las integrantes del equipo están viviendo situaciones similares y nos estamos preparando para esta grandísima oportunidad. Nos esforzamos al máximo cada día, sin dar nada por sentado”.

Encuadrada en el Grupo D con República de Corea, España y Colombia, Canadá debutará en Uruguay 2018 contra el combinado colombiano en el estadio Charrúa de Montevideo.

“Seguiremos plasmando la identidad canadiense”, afirma Williams. “Nos mantendremos fieles a nuestro estilo de juego, un fútbol basado en la posesión del balón, y continuaremos jugando como hasta ahora. Todas las chicas se están poniendo a punto. Hablamos a través de las redes sociales. Estamos todas entusiasmadas, con muchas ganas”.

“Nuestro estilo se basa en la posesión, pero también atacamos. Nos encantar jugar al ataque. Creo que las canadienses somos muy aguerridas. Hay que tener calidad, pero también sabemos apretar los dientes cuando atacamos. Lo mismo ocurre en defensa. Somos un grupo muy unido y queremos ir todas a una, tanto al atacar como al defender. Ahí radica precisamente la identidad canadiense”.

Ahora, Canadá confía en que Williams también saque a relucir su toque ganador en su aventura uruguaya.