lunes 15 noviembre 2021, 01:00

Womé: "Tenemos que pelear duro para clasificarnos para Catar"

  • Un penal errado por Womé en 2005 otorgó a Costa de Marfil la clasificación para el Mundial a expensas de Camerún

  • El exdefensa rememoró lo sucedido después, cuando una muchedumbre saqueó su casa

  • Ambos rivales se enfrentarán el martes para mantener vivas sus aspiraciones de viajar a Catar 2022

El fútbol camerunés vivió una especie de edad de oro entre 1990 y 2002, cuando su selección participó en cuatro ediciones seguidas de la Copa Mundial y ganó el título de la CAN de manera consecutiva en 2000 y 2002. Después de perderse Alemania 2006 al terminar segunda de grupo tras Costa de Marfil, los Leones Indomables regresaron a la gran cita planetaria en 2010 y 2014 para volver a quedar eliminados de camino a Rusia 2018.

Pierre Womé fue una figura clave de aquella generación. El lateral izquierdo destacaba en defensa y ataque y pasó la mayor parte de su carrera profesional en Italia y Alemania. De hecho, en el país del Calcio afinó sus habilidades defensivas, mientras que su paso por la Bundesliga le ayudó a dominar la disciplina táctica y las transiciones entre las distintas fases del juego.

El exinternacional habló con FIFA.com sobre las diferencias entre su selección y la actual, que parece conservar algo de aquella brillantez. "Existe una gran diferencia entre esta generación y la mía. Los tiempos han cambiado y todo lo demás también. El fútbol ya no es como antes. Han pasado veinte años y las generaciones han cambiado mucho", declaró.

FIFA African Cup of Nations 2000

Recuerdos amargos

Tras participar en cuatro ediciones consecutivas de la Copa Mundial (1990, 1994, 1998 y 2002), Camerún pugnó con Costa de Marfil por el liderato del grupo y por una plaza en Alemania 2006. Eran los comienzos de los años de gloria de los Elefantes, con estrellas en sus filas de la talla de Didier Drogba y Gervinho.

En el penúltimo encuentro, Camerún viajó a la capital marfileña, Abiyán, para disputar un choque decisivo. En uno de los duelos más memorables de la historia del fútbol africano, los Leones Indomables, con Samuel Eto'o a la cabeza, se llevaron los tres puntos al imponerse por 2-3.

Así las cosas, Camerún solo necesitaba ganar su último compromiso, en casa contra Egipto, para meterse en el bolsillo el billete para Alemania. Con un empate a 1-1 en el marcador, el árbitro pitó un penal a favor de los locales en el tiempo de descuento. Las gradas estallaron de júbilo. La estruendosa afición se preparaba ya para celebrar su quinta participación consecutiva en la gran fiesta del fútbol mundial.

Aunque Samuel Eto'o estaba en la cancha, la responsabilidad de ejecutar el crucial lanzamiento recayó en Womé. Pero su cañonazo se fue desviado a un lado del poste y el marcador quedó como estaba (1-1), un resultado que otorgó a Costa de Marfil su bautismo de fuego en la Copa Mundial. Entre las inolvidables escenas que se vivieron tras el pitido final destacó la de Samuel Eto'o llorando desconsoladamente.

Dieciséis años después de aquel infausto penal, el momento sigue muy vivo en la memoria de Womé. "Recuerdo muy bien aquel partido, ya que nos costó la plaza en la Copa Mundial en Alemania. Así es el fútbol. A veces las cosas salen a tu favor y a veces en tu contra", explicó.

A la pregunta de si volvería a hacer lo mismo si pudiera volver atrás en el tiempo, contestó: "No me arrepiento de haberlo lanzado. Y si tuviese que hacerlo otra vez, lo lanzaría y asumiría toda la responsabilidad".

Después del encuentro, la afición abandonó el estadio abatida y enfadada, incapaz de asumir que su selección no iba a estar en la Copa Mundial. Una muchedumbre incluso saqueó la casa de Womé, un hecho que le afectó muchísimo y que se lo hizo pasar muy mal.

"Es un mal recuerdo", afirmó nuestro protagonista, que ahora tiene 42 años. "A veces la vida no nos trata bien. Hay momentos malos. Pero cuando vives situaciones tan difíciles hay que pasar página y pensar en el futuro. Eso es algo que también deberíamos inculcar a los demás".

Cuando le preguntamos cómo sobrevivió a ese periodo, el exdefensa respondió: "Me decía a mí mismo que estas cosas pasan y que tenía que superarlo".

Pierre Wome with his teammates

La historia se repite

Dieciséis años después de aquel doloroso episodio, Camerún y Costa de Marfil están encuadradas en el mismo grupo en los preliminares de Catar 2022. Los Elefantes son ahora mismo líderes de la tabla con un punto de ventaja sobre los Leones Indomables, quienes ejercerán de anfitriones mañana en Duala en un duelo en el que están obligados a ganar. A los visitantes les bastaría un empate para consolidarse en lo más alto y conseguir una plaza en la tercera y última ronda clasificatoria.

Sobre las posibilidades de sus compatriotas mañana, Womé opinó: "Tenemos todas las papeletas para ir al Mundial. En especial porque este encuentro se disputa en casa. Saldremos con todo a ganar".

"Dicho esto, tenemos que tomarnos este partido muy en serio. Pero nada es imposible para nosotros", añadió.

También dijo confiar en que el estadio Japoma esté lleno hasta la bandera: "Nuestra afición desempeñará un papel fundamental en este partido, y el jugador número 12 tiene que apoyar al equipo".

Womé concluyó nuestra charla con un mensaje positivo para los jugadores: "Tienen que prepararse muy bien para el partido con Costa de Marfil. Para los cameruneses, lo imposible no existe. Tienen que pelear duro para clasificarse para la Copa Mundial".