La Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™ está cada vez más cerca... ¡Solo faltan 85 días! Cada día, y hasta que comience la Copa Mundial, destacaremos un número relevante en la historia del torneo.

85 Corría el minuto 85 de la final de la Copa Mundial de 1990 en Roma. El alemán Rudi Voeller cayó dentro del área y el colegiado mexicano Edgardo Codesal Méndez señaló rápidamente el punto fatídico.

"Enseguida supe que debía tirarlo yo. Siempre estipulábamos tres lanzadores para cada partido: Rudi Voeller, pero le habían hecho falta, y ya se sabe que nunca debe lanzarlo ese jugador, y Lothar Matthaeus, que no se encontraba muy bien. Para nosotros era importante que el que lanzara tuviera plena confianza en convertir el penal. Así que lo hice yo", cuenta Andreas Brehme, recordando aquel momento.

"Voeller se me acercó y me dijo: 'Vamos, mételo y así seremos campeones del mundo'. 'Vaya, muchas gracias', le contesté. 'Me lo tomaré muy en serio'".

Y así fue. El reloj marcaba exactamente las 21:40 cuando el tiempo se detuvo por un instante, justo cuando Brehme se situó junto al punto fatídico. El arquero Sergio Goycochea, un especialista en detener penales, se lanzó hacia el lado correcto, pero nada pudo hacer para detener un disparo que iba muy bien colocado.

"Lo que pasó a continuación fue indescriptible. Todo el mundo ha visto las imágenes de la celebración del gol. Fue ahí cuando todos supimos que éramos campeones del mundo. En un abrir y cerrar de ojos, tenía a siete u ocho compañeros encima de mí, pero en ese momento no te das cuenta", explica el autor del gol decisivo. Aquella fue, además, la primera final mundialista que se decidió desde los once metros.

Lógicamente, y después de todos estos años, el otro protagonista de la acción guarda unos recuerdos totalmente distintos. "Sigo teniendo esa espina clavada. El hecho de no haber podido atajar aquel penal me afectó más que los cinco goles que recibí contra Colombia en la fase de clasificación en 1993", recordó Goycochea a FIFA.com.