Karina LeBlanc es una enamorada del deporte, pero principalmente del movimiento olímpico. "Grandeza", dice que es la primera palabra que se le viene a la mente cuando le nombran los Juegos. Por eso, haber sido elegida como Athlete Role Model (ARM) durante los Torneos Olímpicos Juveniles de Fútsal Buenos Aires 2018 para la canadiense es "un honor y extremadamente especial".

La exarquera, hoy una de las FIFA Legends, fue designada como parte del programa que busca inspirar a los jóvenes deportistas a través de campeones. Durante la competencia, que para el fútsal se inicia el 7 de octubre, tendrá contacto con los jóvenes deportistas en diversas actividades para transmitir sus experiencias.

"Para mí, la mejor manera de conectarme con un joven atleta es ponerme en sus zapatos", le cuenta Karina a FIFA.com antes de viajar a Buenos Aires. "No será difícil. Cuando era más joven, teníamos en la región donde crecí los BC Summer games, una especie de mini Juegos Olímpicos. Y recuerdo esa emoción. ¡Y solo estaba representando a mi pueblo! Es una gran oportunidad para todos ellos, porque van a vivir uno de los más grandes honores a una edad tan temprana".

"Es importante ser una voz que les recuerde aprovechar el momento y divertirse porque, antes de que se den cuenta, los Juegos se van a terminar y si no están presentes van a perderse un momento increíble de sus vidas. ¿Cuál es el mejor mensaje para ellos? Como me dijeron antes de mi primer Juego Olímpico, respirar y divertirse ¡Es lo que voy a compartir con ellos!

Para ser una de las figuras icónicas del fútbol femenino canadiense -sumó 110 partidos internacionales en casi 18 años con la selección-, LeBlanc debió recorrer un largo camino de superación personal. Cuando llegó a Canadá a los 8 años procedente de la pequeña isla caribeña de Martinica "era una niña tímida, víctima de bullying y no encajaba para nada".

Pero encontró su manera de insertarse. Y de crecer: "El deporte cambió todo eso. Me sentí finalmente adaptada y encontré valor dentro mío. Siempre quise ser la mejor versión de mí misma".

Karina intentará en Buenos Aires transmitir a los jóvenes deportistas todas su vivencias. "El deporte para mí te da una de las mejores preparaciones para la vida", asegura.

Durante los Juegos, el fútsal masculino y femenino será gran protagonista. Y como promotora del desarrollo de la mujer en el fútbol, valora lo que también puede lograr el fútsal en las chicas.

"El fútbol fue mi plataforma, me ayudó a descubrirme a mí misma, entre muchas otras cosas. El fútsal puede ser lo mismo para otras mujeres. Hay zonas en las que el fútsal es la mejor opción. Yo solo quiero que las mujeres salgan y sean activas y jueguen el deporte que las conecta, porque te enseña mucho: a trabajar en equipo, a consensuar con diferentes emociones y gente, a superar rápidamente un fracaso, a establecer objetivos...".

Que por fin el deporte esté en la agenda olímpica no puede traer otra cosa que beneficios para las nuevas generaciones: "Cuando ves las cosas, crees que es posible. Cuando estas chicas vean las posibilidades, empezarán a pensar que un día ellas podrán hacerlo".