jueves 12 septiembre 2019, 11:02

Lituania

Lituania albergará por primera vez en la historia un torneo oficial de la FIFA.

Lituania es un país de alrededor de 2,8 millones de habitantes. La capital, y su ciudad más poblada, es Vilna, mientras que Kaunas, Klaipėda y Šiauliai son otras tres ciudades importantes.

El idioma oficial es el lituano. Con una superficie de 65.300 km², Lituania ocupa el 124º puesto en la clasificación de países más extensos del mundo. De hecho, puede cruzarse en coche tanto de norte a sur como de este a oeste en poco más de tres horas.

La historia de Lituania es dramática: las guerras y las ocupaciones han predominado en 700 de sus 1.000 años de existencia. Sus inmensas ganas de libertad le reportaron la independencia en dos ocasiones: primero, en 1918; después, en 1990, durante la denominada Revolución Cantada. Desde el año 2015, Lituania es un país miembro de la Unión Europea, y su moneda oficial es el euro.

Los lituanos se sienten orgullosos de haber crecido en un país con un pasado tan rico, con una historia tan fascinante. Por eso les gusta realzar su legado nacional dando lo mejor de sí, ya sea subiéndose a un escenario o en un recinto deportivo, con grandes pintores y escritores, abriendo su corazón ante miles de personas y haciéndose notar con su bandera tricolor.

Clima y geografía

Este verde país del norte de Europa se encuentra a orillas del mar Báltico. Limita al norte con Letonia, otro país báltico; al este, con Bielorrusia; al sur, con Polonia; al sureste, con la región rusa de Kaliningrado y, al oeste, cruzando el mar Báltico, con los países escandinavos.

Si uno sobrevuela Lituania comprobará que su territorio está repleto de lagos azulados, unidos entre sí por sinuosos ríos cuyas aguas desembocan en el mar Báltico. Podría decirse que Lituania es un país de agua dulce: un sinfín de manantiales subterráneos lo nutren generosamente de agua mineral.

Gracias a sus playas de arena blanca y a sus bosques de pinos, así como a sus ciudades y pueblos pintorescos, la región más costera del país atrae cada verano a multitud de turistas nacionales e internacionales.

En el año 2000, la laguna de Curlandia —que goza del estatus de parque nacional y de la protección del gobierno— fue declarada patrimonio cultural de la humanidad por la UNESCO. De 98 kilómetros de longitud, es una formación de dunas única en Europa. La parte septentrional pertenece a Lituania, mientras que la meridional es territorio ruso.

En Lituania, los inviernos son fríos y los veranos son cálidos. Las temperaturas estivales pueden alcanzar o incluso superar los 30 grados centígrados, mientras que, en invierno, se desploman hasta los 25 bajo cero. El otoño cautiva con sus intensos colores, y la primavera es sencillamente mágica gracias a sus días cada vez más largos y a los olores propios de la floración.

Gastronomía

Comer bien es muy importante para los lituanos, por lo que el visitante encontrará buenos restaurantes no solo en las grandes ciudades, sino también a orillas del mar, junto a las autopistas, en los núcleos rurales más hermosos o incluso en mitad de un bosque.

Aquí, comer se convierte siempre en una aventura: además de los excelentes productos de los agricultores lituanos, sus platos contienen también la esencia de la primavera, el verano, el otoño y el invierno.

Quienes visiten Lituania no pueden irse sin probar su tradicional pan negro. Y uno de los mejores regalos que puede llevarse de su viaje a Lituania es la tarta šakotis, presente en cualquier celebración que se precie. La forma de prepararla es muy particular: una masa densa hecha a base de huevos, mantequilla, nata y harina se vierte poco a poco sobre un molde alargado que gira sobre una llama. El resultado es un postre exquisito con forma de abeto.

Fútbol

Desde que recuperó la independencia en el año 1990, Lituania no ha conseguido clasificarse para ningún gran torneo. Ahora, la selección nacional de futsal participará por primera vez en una Copa Mundial de Futsal de la FIFA en calidad de anfitriona.

Por su parte, el combinado masculino de fútbol ocupa actualmente la 130ª posición en la Clasificación Mundial FIFA/Coca-Cola, muy lejos de sus mejores registros: a mediados de los años noventa, Lituania se movía entre los puestos 43 y 50.

Eso sí, en un país en el que el baloncesto es el deporte rey, el fútbol también ha gozado de protagonismo: en marzo de 2003, la selección lituana empató 1-1 en su visita a Alemania, a la sazón subcampeona del mundo; en septiembre de 2006, obtuvo el mismo resultado en casa de Italia, que acababa de proclamarse campeona del mundo. Ambos partidos correspondían a la fase de clasificación para la Eurocopa. Además, Lituania se quedó a apenas un punto de alcanzar la repesca para la Copa Mundial de la FIFA Francia 1998™.

Ahora, son los jugadores de futsal del país quienes piden paso para saltar a las portadas.