viernes 26 noviembre 2021, 16:00

Weverton: "Los hinchas del Palmeiras son muy apasionados, unos fanáticos del equipo"

  • Weverton detalla su relación especial con los aficionados del Palmeiras

  • Se explaya sobre la final de la Copa Libertadores, este sábado contra el Flamengo

  • El portero de Brasil habla de Taffarel, Marcos, Alisson, Ederson y Catar 2022

Un brasileño de 28 años afrontaba su primer viaje laboral en su nuevo empleo secundario. Finalmente, acabó de trabajar a las 1:40 de la madrugada. Estaba en plena selva amazónica, y necesitaba llegar hasta las playas tropicales de Florianópolis –a 4.300 kilómetros de distancia– alrededor de las 16:00 de ese mismo día para afrontar otro trabajo asignado.

Un colega al que había conocido en otro cometido anterior escuchó su problema y le ofreció su ayuda para llegar a tiempo al trabajo. No se trataba de unos simples pluriempleados, sino de dos famosos. Sin embargo, no era ningún episodio de Carpool Karaoke, la popular sección de la cadena estadounidense CBS en la que James Corden pide ayuda a Adele, Justin Bieber, Lady Gaga u otra superestrella musical para llegar al trabajo. Era la secuencia inicial de la historia de amor entre Weverton y el Palmeiras, en la que Gabriel Jesús hizo de Cupido sin saberlo.

El entonces presidente del Palmeiras, Paulo Nobre, envió su jet privado para llevarse corriendo a su joven delantero desde aquel Brasil-Colombia, para que pudiese jugar el derbi contra el São Paulo. Después de que un agradecido Weverton subiese también a bordo, el portero fue presentado a los directivos del club paulista.

Alexandre Mattos, entonces director de fútbol del Palmeiras, bromeó diciendo que iba a llevarse con él a Weverton para jugar en el Allianz Parque. Weverton, muy serio, respondió que si algún día lo hacía, no se arrepentiría. Ambos mantuvieron el contacto y, 14 meses después, Weverton fichó por O Verdão. Desde entonces, ha ayudado al Palmeiras a conquistar la liga brasileña, el Campeonato Paulista, la Copa de Brasil y la Copa Libertadores, y se ha convertido en un ídolo para casi 13 millones de seguidores.

A mediados de 2016, otro avión privado al que a priori ni siquiera debía subirse le dio licencia para convertirse en un héroe para más de 200 millones de almas. Unos días antes del comienzo del Torneo Olímpico de Fútbol Masculino, Fernando Prass causó baja y Weverton se fue pitando para Río de Janeiro como su recambio. El de Rio Branco se hizo con la titularidad bajo palos y mantuvo su portería a cero durante cinco partidos consecutivos para llevar a la Seleção a la final, donde rechazó el último lanzamiento de Alemania en la tanda de penales para permitir que Neymar pusiese fin a los 64 años de espera de Brasil con su primer oro olímpico en fútbol.

Weverton conversó con la FIFA sobre su sueño de jugar la Copa Mundial de la FIFA Catar 2022™ y sobre la final de la Copa Libertadores de este sábado contra el Flamengo, entre otros temas.

Weverton of Brazil celebrates winning Olympic gold

FIFA.com: ¿Qué puede contarnos sobre los aficionados del Palmeiras y su relación con ellos?

Weverton: Los hinchas del Palmeiras son muy apasionados; unos fanáticos del equipo. Son el alma del club. Un club sin aficionados es un club sin vida. Para nosotros los jugadores, la felicidad consiste en ver a tus seguidores eufóricos, celebrando. Pasamos por un periodo difícil sin aficionados en nuestros partidos, y es genial tenerlos ahora de vuelta. Gracias a Dios, tengo una relación increíble con los aficionados. Llegué aquí un poco tímidamente en cuanto a confianza, porque el club tenía dos ídolos [bajo palos]: Jailson y [Fernando] Prass. Quizás los aficionados no veían necesario tener otro guardameta en aquel entonces. Pero yo trabajé muy duro, luché por mi puesto e intenté comprender cómo funcionaba el club y su afición. Creo que la relación que tengo hoy con los hinchas es el fruto de lo que he hecho en el campo y lo que hemos ganado como equipo. El cariño que me muestran es realmente agradable, porque sé lo duro que he trabajado y la dedicación que le he puesto. Los seguidores del Palmeiras me dan mucha felicidad y motivación.

¿Cómo se siente el Palmeiras de cara a la final de la Copa Libertadores?

El Palmeiras es enormemente respetado en toda Sudamérica y en el mundo; por su historia, por todos los grandes jugadores que han deslumbrado vistiendo esta camiseta, por todos los títulos importantes que ha ganado. Nosotros estamos escribiendo otro hermoso capítulo en la historia del club. Hemos ganado la liga brasileña, el Campeonato Paulista y la Copa de Brasil recientemente, y estamos en nuestra segunda final seguida de la Libertadores. El fútbol brasileño y el fútbol sudamericano son muy competitivos. Conseguir lo que hemos logrado demuestra que tenemos un equipo muy bueno, con una mentalidad fuerte. Ahora queremos realzar nuestro historial conquistando más títulos. Tenemos mucha confianza de cara a la final.

¿Qué le parece su rival, el Flamengo?

Lo conocemos bien; conocemos bien a todos sus jugadores. A algunos los conozco personalmente de la Seleção. Tiene un equipo magnífico lleno de grandes jugadores. Muchos de sus jugadores han tenido una buena trayectoria en Europa y han regresado a Brasil jugando todavía a un buen nivel. Sabemos que nos enfrentamos a un equipo muy bueno, pero el Flamengo también se enfrenta a un equipo muy bueno. Es una batalla entre dos grandes del fútbol brasileño y sudamericano. No creo que se pueda predecir nada fuera de que va a ser un partidazo. Para mí no hay un favorito.

Si pudiera llevarse a un jugador de la plantilla del Flamengo, ¿quién sería?

Eso es difícil de responder con un equipo como el Flamengo. Tiene muchos jugadores muy buenos: Bruno Henrique, De Arrascaeta, Everton Ribeiro, ‘Gabigol’… así como los nuevos. Pero por su capacidad para meter goles, me quedaría con Gabigol.

En la Copa Mundial de Clubes de la FIFA 2020 del pasado febrero, el Palmeiras perdió contra Tigres en las semifinales y contra Al Ahly en el partido por el tercer puesto. ¿Cómo se sintió en el viaje de vuelta desde Catar?

No fue la actuación que queríamos ni esperábamos. Sin embargo, no tuvimos tiempo para prepararnos para el Mundial de Clubes ni para adaptarnos a la diferencia horaria y al clima del país. Los equipos suelen tener de 15 a 20 días para adaptarse. Nosotros habíamos encadenado una serie demencial de partidos; uno cada dos o tres días. Si no me equivoco, jugamos la final [de la Copa Libertadores] el sábado, jugamos en la liga brasileña el martes, volamos a Catar y jugamos nuestro primer encuentro del Mundial de Clubes el domingo. Es muy difícil ir a la otra punta del mundo y adaptarse a todo en ese tiempo. Pero aprendimos mucho de ello. A veces, las derrotas son las que más te enseñan. Volvimos de allí ansiosos por regresar al Mundial de Clubes, y ahora tenemos la oportunidad de hacerlo. Puedo prometer que [ahora] sería muy diferente de la primera vez.

Weverton and Palmeiras celebrate winning the Copa Libertadores 2020

¿Qué opinión le merece el Chelsea?

El Chelsea es un equipo excelente. No se proclamó campeón de Europa porque sí… Venció a un extraordinario Manchester City en la final. Tiene grandes jugadores. Thiago Silva, mi amigo, sigue jugando a un nivel excelente. Lukaku es muy imponente, un magnífico delantero. Mendy es uno de los mejores porteros del mundo. El Chelsea es muy completo y está en una forma magnífica. Pero tendríamos que dar otro paso para llegar a la final del Mundial de Clubes. Sabemos que no podemos dar por hecha la final. Ya lo vimos en la pasada edición, y otros grandes equipos lo comprobaron antes que nosotros. El nivel de los equipos del Mundial de Clubes ha mejorado mucho, y cualquier semifinal sería muy complicada.

¿Tiene como objetivo acudir al Mundial o ser el portero titular de Brasil en Catar 2022?

Mi objetivo es ir al Mundial, sentir la sensación de estar en un Mundial, vivir el ambiente. No sé cómo sería; sólo puedo suponerlo, pero me lo imagino espectacular, increíble, único. Y estaría todavía mejor sabiendo que estoy representando a mi país; eso me produciría un orgullo tremendo. Si juego o no, eso depende de Tite, y siempre tengo el máximo respeto a sus decisiones. Yo intentaré abrirme paso en el equipo, pero mi principal meta es estar entre los 23 convocados. Para ser sincero, cuando era más joven mi sueño era simplemente jugar con la Seleção una vez; saber durante el resto de mi vida que había vestido su camiseta. Luego gané una medalla de oro en los Juegos Olímpicos, lo cual fue indescriptible. Y ahora, deseo con todas mis fuerzas estar en un Mundial. Es el no va más para cualquier jugador. He visto todos los Mundiales, y estar en uno como jugador sería extraordinario, un sueño grandioso.

¿Cuáles son sus recuerdos preferidos de Mundiales anteriores?

Mi principal recuerdo es lo que hizo Taffarel en el 94. Fue inolvidable. Yo era muy pequeño y estaba en casa de mi tío, con toda mi familia allí viendo la tanda de penales. Me acuerdo de Galvão [Bueno] comentando: “¡Vamos que es tuya, Taffarel! ¡Se acabó! ¡Se acabó! ¡Se acabó!”. Todo el mundo estaba celebrándolo, dando saltos aquí y allá, gritando en las calles. Brasil era campeón... Lo tengo muy fresco en la memoria. Y luego, el otro recuerdo fue ver a Marcos, uno de mis mayores ídolos, jugando magníficamente para ayudar a Brasil a proclamarse campeón en 2002. Taffarel fue mi inspiración de niño, y Marcos fue mi principal inspiración cuando empecé a jugar [más en serio]. Jamás imaginé, ni en mis sueños más delirantes, que estaría vistiendo la camiseta del Palmeiras con la que Marcos deslumbró y ganó tanto. Es un honor inmenso que me produce un orgullo tremendo.

¿Quiénes cree que son los tres mejores arqueros del mundo?

Lo digo con total respeto hacia los demás, porque hay muchos porteros magníficos en el mundo, pero para mí, Brasil tiene a los dos mejores: Alisson y Ederson. Están jugando a un nivel increíble. Después, me decantaría por [Jan] Oblak. Es un magnífico guardameta, y lo demuestra temporada tras temporada.