martes 24 agosto 2021, 09:30

Shishin: "No podemos defraudar a los aficionados"

  • La RFU encabezó el Grupo A tras vapulear a Japón por 7-1

  • El jueves en cuartos, afrontará contra España una reedición de la final de Tahití 2013

  • Dmitrii Shishin, máximo goleador en esa edición, cree que los rusos pueden ganar un tercer título

Hace ocho años, en la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA Tahití 2013, Rusia doblegó a España por 5-1 para ceñirse su segunda corona mundial. Y aquí en Rusia, la Roja volverá a interponerse en el camino de los hombres de Mikhail Likhachev, esta vez en cuartos de final.

Tahití 2013 fue un momento culminante en la carrera de Dmitrii Shishin. El delantero nacido en Saratov marcó en todos los encuentros y obtuvo el premio al Goleador de Oro adidas gracias a sus 11 tantos. Esta vez, sin embargo, el mítico artillero todavía no ha logrado ver puerta.

"¡Me estoy haciendo mayor, ya sabe!", exclama sonriendo el ruso de 35 años. En realidad, el máximo realizador de siempre de la RFU aporta actualmente más asistencias que goles. En su último encuentro de la liguilla contra Japón, la selección anfitriona por fin se reencontró con su ritmo, y Shishin contribuyó con dos asistencias.  

"Tengo recuerdos magníficos de Tahití 2013; fue genial proclamarnos campeones mundiales. Desde entonces, mi visión del juego tal vez ha cambiado. He redefinido mi papel en el equipo; puede que ahora no marque tantos goles, pero intento pasar más. Es agradable figurar en la hoja de goleadores, pero lo principal es que el equipo gane", subraya.

Más experiencia, menos velocidad

Entre los puntos fuertes de la selección anfitriona figuran la capacidad de sacrificio y la adhesión a los ideales del equipo. Al preguntarle quién será el máximo artillero de la RFU en esta edición, Shishin responde:

"Para nosotros, eso no es importante. Tenemos un objetivo: proclamarnos campeones mundiales por tercera vez. Estaré feliz por quienquiera que se erija en el máximo goleador. Pero créame, es algo sin mucha trascendencia", asegura.

Shishin es uno de los cinco miembros de la actual plantilla que jugaron en aquella final de 2013 contra España, y sabe cómo batirla. Puede que los jóvenes les estén pidiendo paso, pero la experimentada columna vertebral del equipo sigue cumpliendo con creces.

"En 2013 éramos más jóvenes. Teníamos la forma física y la inteligencia táctica. Ahora probablemente no seamos tan rápidos, pero ese saber táctico, así como nuestra habilidad técnica, no te abandonan; siguen formando parte de nuestro arsenal. Además, tenemos más experiencia. Los muchachos más jóvenes han traído savia nueva al equipo, pero yo no diría que somos más débiles", señala Shishin.

Solo los mejores subsisten

Tras no lograr vencer en el tiempo reglamentado ni a Estados Unidos ni a Paraguay en sus dos primeros partidos, los anfitriones sabían que solamente les bastaría con la victoria en su último encuentro del grupo contra Japón. Y el equipo por fin sacó a relucir su mejor juego, no dando ninguna opción a su rival con un contundente 7-1.

"Veníamos buscando recuperar nuestra mejor forma. Japón tuvo problemas para sobrellevar nuestro ritmo, y marcamos algunos goles preciosos. La arena aquí es inusual: es profunda y los pies se te hunden en ella, por lo que, tras un par de minutos, estás bastante cansado. Por lo tanto, movimos el balón rápidamente para poder mantener un ritmo elevado", explica el delantero, autor de 230 goles con su selección.

En el choque de cuartos contra España, el combinado local querrá repetir su táctica y mantener el nivel de energía e intensidad que fue clave para vencer a Japón.

"España es muy fuerte. Pero seamos sinceros: no hay selecciones débiles en un Mundial, y somos conscientes de ello. Así que no importa contra quién juguemos. Asimismo, no podemos defraudar a los aficionados, porque su apoyo está siendo increíble. El apoyo desde las gradas nos está impulsando. Y también hay una sensación de que todo va a seguir mejorando", concluye.