La capital rusa es una ciudad que nunca duerme. La vida en esta enorme metrópolis bulle las 24 horas del día, los siete días de la semana, y sus pobladores son capaces de trabajar y relajarse hasta bien entrada la madrugada.
Los aficionados que estén planeando visitar Rusia durante la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA 2021 solo tienen que acercarse hasta aquí para sentir el frenético ritmo de esta urbe de 12 millones de habitantes, donde encontrarán una mezcla incomparable de historia, cultura y actividades lúdicas.
Aquí, los modernos rascacielos se alzan junto a grandiosos edificios de la era estalinista, arquitectura clásica del siglo XIX e incluso vestigios de antiguas chozas de madera.
En Moscú hay muchas maneras de viajar a través del tiempo. Por ejemplo, se puede visitar el famosísimo Museo del Kremlin para descubrir los tesoros de la Rusia Imperial y de los Zares, subir hasta lo más alto de uno de los siete rascacielos estalinistas que dominan la ciudad, descender al subsuelo para ver un búnker de la Guerra Fría o contemplar la panorámica del famoso campo de batalla de Borodino, donde Rusia y Francia se enfrentaron en 1812.
Muchas de las antiguas fábricas construidas en la época de la Unión Soviética son ahora centros de exposiciones y espectáculos. Incluso los renovados parques municipales conservan todo el sabor del siglo XX.
Por ejemplo, el recientemente modernizado Centro de Exposiciones VDNKh mantiene los pabellones de las antiguas repúblicas soviéticas, y en el centro del recinto hay una copia del cohete Vostok, con el que Yuri Gagarin se convirtió en el primer hombre en viajar al espacio.
La capital verde Generaciones de moscovitas han acudido a relajarse de sus quehaceres diarios y a practicar deporte al enorme parque Gorky, situado a orillas del río Moscova. Hoy en día es uno de los parques de ocio más modernos del mundo, aunque ha sabido preservar ese aire que le dan sus casi 100 años de historia. De hecho, Moscú está considerada como una de las ciudades más ecológicas de Europa debido a la gran cantidad de zonas verdes que posee.
El metro es indispensable para moverse por Moscú y para acudir a los estadios de Rusia 2018. No obstante, no se trata solamente de evitar los atascos de tráfico. Prácticamente todas las estaciones del Metro de Moscú son auténticas obras de arte. Incluso los propios trenes son dignos de verse. Por ejemplo, a menudo encontramos vagones decorados especialmente con arte o poemas.
Grandes cantidades de gente podrán disfrutar de estos trenes dado que por el metro, la principal arteria de transporte de Moscú, pasan cada año casi 2.500 millones de personas. Con todo, es aconsejable no planear excursiones durante las horas punta.
Actividades para todos los gustos
Lo que no será un problema en Moscú es encontrar un lugar donde celebrar la victoria de su equipo. La capital rusa posee una amplia variedad de bares, pubs, restaurantes y clubes nocturnos. Aquí, la vida nocturna no acaba nunca.
"En Moscú encontrarán todo lo que quieran: restaurantes, vida nocturna, fútbol o museos", declaró Pontus Wernbloom, ex defensa del CSKA de Moscú y de Suecia, en una entrevista concedida a FIFA.com. "Es una ciudad que nunca duerme".
De noche, también puede pasear por esta siempre dinámica ciudad o recorrer la orilla del río Moscova en tranvía.
En los últimos tiempos han empezado a surgir en Moscú actividades de ocio novedosas y poco corrientes. Entre los moscovitas se han hecho muy populares los centros de realidad virtual, laberintos del miedo, clubes de ocio subterráneos, galerías de tiro, museos de juegos recreativos (arcade) soviéticos y los llamados juegos de escape, en los que el participante queda encerrado en una habitación durante una hora y tiene que encontrar la salida.
Como en un videojuego, pero real.
Desde luego, es imposible abarcar todo lo que esta ciudad tiene que ofrecer. Eso sí, ¡no olvide visitar la Plaza Roja!