lunes 02 enero 2017, 18:14

Webb: "Se trata de hacer las cosas bien"

La labor de los colegiados consiste en decidir qué es justo y qué no es justo. Howard Webb era, por tanto, un candidato idóneo para formar parte del jurado que elige el Premio Fair Play de la FIFA. El inglés, que colgó el silbato después de arbitrar en la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™, dirigió algunos de los partidos más importantes que existen en el planeta fútbol a lo largo de sus 20 años de carrera. El que más fama le reportó fue la final del Mundial de 2010 entre España y Países Bajos.

“Formar parte del jurado que elige el Premio Fair Play de la FIFA es fantástico”, asegura Webb en su entrevista exclusiva con FIFA.com. “Estoy en un jurado con personas muy famosas y respetadas que han protagonizado carreras sobresalientes en el fútbol, gente que entiende el significado del juego limpio. Haber sido elegido para decidir qué acción de juego limpio es la mejor del año supone un gran honor para mí. Es fantástico estar involucrado en algo así”.

Y es que Webb está muy bien acompañado en el jurado. El excolegiado compartirá honor con figuras del balompié de la talla de Gabriel Batistuta, Marta y Vladimir Petkovic, así como Adolf Ogi, expresidente de Suiza y consejero especial de Deporte para el Desarrollo y la Paz en las Naciones Unidas. Todos ellos tienen su particular visión de lo que constituye el juego limpio desde el punto de vista del jugador, del entrenador y del espectador. ¿Cómo lo describiría Webb?

“Se trata de hacer las cosas bien”, señala. “Ganar de una manera que no es justa no reporta mucha satisfacción. Ése no es el espíritu del fútbol. Cuando pienso en el juego limpio, pienso en situaciones en las que los futbolistas han tomado la decisión de hacer algo que muestra respeto. No es simplemente cuestión de ganar a toda costa”.

Después de retirarse, Webb ha trabajado como experto en televisión e instructor de arbitraje de la FIFA, entre otros, pero también es hincha del Rotherham United, de la segunda división inglesa. La presente edición de los The Best FIFA Football Awards™ ha ofrecido a los aficionados de todo el mundo la oportunidad de votar en distintas categorías, incluidas las del Premio Puskás y los premios a los mejores jugadores y entrenadores (junto a seleccionadores, capitanes y medios de comunicación), una medida que cuenta con el apoyo del propio Webb.

La importancia de los seguidores en el fútbol “Creo que el hecho de que la FIFA haya dado la oportunidad a los aficionados de votar quién es el mejor refleja la importancia que otorga la FIFA a los seguidores”, afirma Webb. “El fútbol es de los jugadores que generan espectáculo en la cancha, pero también de los hinchas que van al estadio y crean el ambiente, así como de los que lo siguen por televisión desde casa. Supongo que a los aficionados les gustará tener voz y voto en la elección de los Premios The Best, junto a seleccionadores, jugadores y medios de comunicación. Así tienen la oportunidad de contribuir también. Por tanto, quienes reciban el galardón sabrán que son los mejores a ojos de todos los que componen la familia del fútbol”.

Pese a haber arbitrado durante más de dos décadas, a Webb le cuesta contenerse a veces cuando ve a sus equipos favoritos, el Rotherham y la selección inglesa.

“Cuando veo un partido, como cualquier aficionado, a veces le grito al árbitro o a la televisión”, reconoce con una sonrisa. “No de manera agresiva ni ofensiva, sino más bien visceral. En algunas ocasiones, incluso reacciono cuando considero que el árbitro se ha equivocado. Luego veo la repetición de la jugada y me doy cuenta de que quien estaba equivocado era yo y no él. ¡Es bastante habitual! Me parece bien que los aficionados muestren sus sentimientos y reaccionen, siempre y cuando no lo hagan de manera ofensiva”.

El excolegiado reconoce que él también cometió errores. Pero hay uno que se produjo en un momento cumbre que tardará en olvidar, al igual que todos los aficionados que lo vieron. Haciendo gala de su espíritu de juego limpio, Webb admite su fallo.

“El más importante fue el de la final de la Copa Mundial de la FIFA en Sudáfrica”, apunta. “La decisión de no expulsar a Nigel De Jong en la primera mitad. Hizo una entrada con el pie muy elevado. Un árbitro siempre busca la mejor posición posible y toma las decisiones en base a lo que ve y lo que sabe. También consulta a su equipo, pero la información de la que yo disponía no era suficiente para expulsarlo. No tenía el mejor ángulo y tomé la decisión que yo creía correcta en aquel momento, pero, repasando la jugada, está claro que era roja directa. Es una acción que nunca olvidaré”.

De lo que no hay duda es de que, con todos sus años de experiencia y después de haber vivido tantas acciones de juego limpio a lo largo de su carrera, Webb —junto con sus estimados compañeros del jurado— tomará la decisión correcta en la elección del ganador del Premio Fair Play de la FIFA de este año.

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