sábado 10 julio 2021, 07:00

Un gol para la eternidad: "¿Abby? ¿Dónde está Abby?"

  • #UnDíaComoHoy en 2011, Estados Unidos y Brasil protagonizaron un duelo vibrante en cuartos de final

  • Un cabezazo de Abby Wambach en el 120+2’ llevó el encuentro a los penales

  • "El balón volaba, pareció durar una eternidad, y entonces vi a Abby"

"En la banda izquierda vi a Megan Rapinoe, que levantó la cabeza y centró el balón al área. ‘¿Dónde está Abby? ¿Dónde está Abby?’, pensé. Y allí estaba, dentro del área, justo donde debía estar. El balón volaba, pareció durar una eternidad, y entonces vi a Abby, que saltó más que nadie y envió el balón al fondo de la red. Fue fantástico. Aquel gol me cambió la vida", recuerda Pia Sundhage sobre un momento muy especial que nunca olvidará.

Un instante que se produjo hace exactamente diez años en Dresde y que pasó automáticamente a los libros de historia. En los cuartos de final de la Copa Mundial Femenina de la FIFATM, las Barras y Estrellas se adelantaron en el marcador en su duelo contra Brasil. Sin embargo, en el ecuador de la segunda mitad, el partido cambió por completo: Rachel Buehler vio la cartulina roja tras derribar a Marta dentro del área. Hope Solo detuvo el penal posterior de Cristiane, pero la árbitra ordenó repetir el lanzamiento.

Esta vez, Marta, con su sangre fría habitual, fue la encargada de ejecutarlo y subir el 1-1 al electrónico. Cuando la estrella brasileña adelantó a las suyas en el segundo minuto de la prórroga, el combinado de Sundhage —que este año buscará ganar una medalla en el Torneo Olímpico de Fútbol Femenino con Brasil— veía su eliminación cada vez más cerca. Pero entonces llegó el momento de Abby Wambach...

Las estadounidenses también son magníficas a la hora de jugar bajo presión. Y sus expectativas siempre son altas, puesto que ganaron la primera Copa Mundial. Nunca se rinden. Podría decirse que es la actitud estadounidense. Si crees en algo, que sea ...
Pia Sundhage

Corría el minuto 121 de partido. La prórroga se acababa y cada vez faltaban menos segundos para el pitido final. Estados Unidos lanzó un último ataque ante los 25 598 espectadores que se habían dado cita en el Estadio Rudolf Harbig de Dresde. La centrocampista Megan Rapinoe recibió el balón en la banda izquierda, avanzó unos metros y vio a Wambach, que corría hacia el segundo palo.

Rapinoe centró con la zurda y Wambach se situó justo en el borde del área pequeña. El balón voló hasta la delantera, que se elevó por encima de la arquera brasileña Andreia y cabeceó con fuerza al fondo de la red en el minuto 122.

El resto es historia. El encuentro tuvo que decidirse en la tanda de penales. Allí brilló Hope Solo, que detuvo el lanzamiento de Daiane. Estados Unidos, por su parte, convirtió sus cinco penas máximas y venció 5-3.


A pesar de que su selección cayó en la final ante Japón, el gol de Wambach contra Brasil —elegido el mejor tanto en la historia de la Copa Mundial Femenina en una encuesta de 2015— es uno de los mejores recuerdos mundialistas que guarda su autora.

Podríamos haber tirado la toalla perfectamente. Sabía que iba a entrar si conectaba bien el cabezazo. Fue mi gran momento. No sé por qué, pero tuve la sensación de haber estado toda mi vida preparándome para eso. No ganamos el Mundial, pero aquel ins...
Abby Wambach