“Cuando César se enteró de que iba a viajar a Italia para representar a Portugal, se sintió como Cristiano Ronaldo. Ya en el aeropuerto, recuerdo que lo miré y estaba rodeado por sus compañeros. Creo que nunca lo había visto tan feliz”.

Antonio Morais habló con FIFA.com acerca de su hijo, que jugó la edición inaugural del Campeonato Europeo de Futsal de la FIFDS (Federación Internacional de Futsal para personas con Síndrome de Down), organizado por la SUDS (Unión Deportiva para deportistas con Síndrome de Down).

Fue algo que Antonio no habría imaginado ni en sus mejores sueños, pero su hijo estaba aún más eufórico justo antes de embarcar en el avión de vuelta a casa. César, que entonces tenía 30 años, mostraba con cariño un par de recuerdos de sus días en Terni, Umbría —lugar de nacimiento de San Valentín—: una medalla de campeón y la bota de oro que premiaba al máximo goleador del torneo. “¡No se atrevió a guardarlas en la maleta por si se la perdían!”, recuerda su padre.

“Viajar a Italia para representar a Portugal fue la mejor experiencia de mi vida. Me gustó mucho conocer y pasar el tiempo con deportistas de otros países, además del compañerismo y la unión que había en nuestra selección”, cuenta César a FIFA.com.

“Me gusta el fútbol desde que tenía seis años. Mis ídolos son Cristiano Ronaldo y Ricardinho. Según las críticas, jugué muy bien. Mi estilo de juego es similar al de Ricardinho. Yo siempre juego para el equipo, defiendo y ataco y, siempre que puedo, marco goles. Fui el máximo goleador del torneo, pero reconozco que no habría sido posible sin la increíble ayuda de mis compañeros”.

Tiago Castro, Luis Gonçalves, Paulo Lino, Carlos Lobo, Daniel Maia, Helder Ornelas, Nelson Silva, Ricardo Pires, Norberto Santos y Rui Sousa, deportistas con edades comprendidas entre los 23 y los 44 años, conformaron el combinado portugués que envió al torneo la ANDDI (Asociación Nacional de Deportes para personas con Discapacidad Intelectual).

La selección de Portugal no era ni mucho menos favorita en la final, pero una tripleta de Silva —delantero del Guimarães— y un golazo de Morais dieron la victoria a los suyos sobre Italia, anfitriona y vigente campeona del mundo.

El presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, expresó así su admiración por el título obtenido:

“Estos deportistas portugueses han demostrado una vez más que están entre lo más granado. Mi enhorabuena a todos ellos, y mención especial para César Morais, que fue elegido el mejor jugador del torneo”.

Unos 200 aficionados recibieron a los futbolistas portugueses en el aeropuerto. Uno de ellos incluso portaba una pancarta en la que se podía leer: “¡César, regálame tu camiseta!”.

“Viajar a Italia para representar a Portugal fue la mejor experiencia de mi vida. Me gustó mucho conocer y pasar el tiempo con deportistas de otros países, además del compañerismo y la unión que había en nuestra selección”, cuenta César a FIFA.com.

“Me gusta el fútbol desde que tenía seis años. Mis ídolos son Cristiano Ronaldo y Ricardinho. Según las críticas, jugué muy bien. Mi estilo de juego es similar al de Ricardinho. Yo siempre juego para el equipo, defiendo y ataco y, siempre que puedo, marco goles. Fui el máximo goleador del torneo, pero reconozco que no habría sido posible sin la increíble ayuda de mis compañeros”.

Tiago Castro, Luis Gonçalves, Paulo Lino, Carlos Lobo, Daniel Maia, Helder Ornelas, Nelson Silva, Ricardo Pires, Norberto Santos y Rui Sousa, deportistas con edades comprendidas entre los 23 y los 44 años, conformaron el combinado portugués que envió al torneo la ANDDI (Asociación Nacional de Deportes para personas con Discapacidad Intelectual).

La selección de Portugal no era ni mucho menos favorita en la final, pero una tripleta de Silva —delantero del Guimarães— y un golazo de Morais dieron la victoria a los suyos sobre Italia, anfitriona y vigente campeona del mundo.

El presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, expresó así su admiración por el título obtenido:

“Estos deportistas portugueses han demostrado una vez más que están entre lo más granado. Mi enhorabuena a todos ellos, y mención especial para César Morais, que fue elegido el mejor jugador del torneo”.

Unos 200 aficionados recibieron a los futbolistas portugueses en el aeropuerto. Uno de ellos incluso portaba una pancarta en la que se podía leer: “¡César, regálame tu camiseta!”.

“Me sigue poniendo muy contento recordar el Campeonato Europeo, pero en lo único que pienso ahora es en el Campeonato Mundial [de la FIFDS] de Brasil”, señala César para concluir.

Dicho torneo se disputará en Ribeirão Preto entre el 28 de mayo y el 6 de junio.

Hoy, en el Día Mundial del Síndrome de Down, queremos conmemorar la admirable labor que realizan organizaciones como la SUDS y la ANDDI, así como los clubes que reciben con los brazos abiertos a las personas con Síndrome de Down.