lunes 27 marzo 2017, 09:04

Sundhage: "Fue un año de locura"

A la pregunta de cuál es la mejor cualidad de la selección sueca a la que dirige, Pia Sundhage no lo duda ni un instante: "Sacan lo mejor de sí mismas". La entrenadora nacida en Suecia, tomó las riendas del combinado nacional femenino de su país en diciembre de 2012, y el año pasado celebró con él su mayor éxito hasta la fecha.

"Fue un año de locura para la selección sueca. Terminado el Mundial, tuvimos que clasificarnos para los Juegos Olímpicos. Sacamos nuestro billete en Países Bajos. Fueron tres partidos muy complicados, y es verdad que no marcamos muchos goles, pero encontramos la senda de la victoria. Después, pasamos por algunos altibajos", explica Sundhage en su charla con FIFA.com.

Entre los momentos cumbre se encuentra, sin ninguna duda, la actuación de Suecia en el Torneo Olímpico de Fútbol Femenino de Río. Las escandinavas acabaron colgándose la medalla de plata, un resultado histórico.

"¿Los Juegos Olímpicos? ¡Fantásticos! Creo que empezamos bastante bien contra Sudáfrica y, a continuación, nos enfrentamos en Río a la Brasil de Marta. Nos ganaron 5-1, pero supimos reponernos. Eso es algo de lo que me siento realmente orgullosa. Nos conjuramos, jugamos como un equipo contra China y, después, eliminamos a Brasil y Estados Unidos en penales. Llegar a la final fue algo especial. No basta con firmar un buen arranque, no basta con un entrenador solo... Teníamos que conseguirlo todas juntas".

El hecho de que las suecas se midieran en cuartos de final a las Barras y Estrellas, conjunto al que había dirigido Sundhage y con el que fue dos veces campeona olímpica, otorgó al encuentro un aroma especial. "Al término del partido contra China, nos juntamos y les dije: 'Tengo tres buenas noticias. La primera es que estamos en cuartos. La segunda, que nos quedamos aquí y no nos toca viajar.' Las jugadoras se miraron entre sí y exclamaron: '¡Vaya, eso es genial!'. 'Y la tercera es que nos enfrentaremos a Estados Unidos'. Todas coincidieron: 'Sí, es el momento'. Esa reacción fue muy importante para nosotras, porque nos dio la fuerza necesaria. Sabíamos que teníamos posibilidades. Aquella noche me sentía muy bien, cargada de energía, y sabía que íbamos a tener opciones".

Ilusión por el reencuentro Como es sabido, la intuición no le falló a Sundhage. Suecia derrotó a Estados Unidos en cuartos y a Brasil en semifinales, pero mordió el polvo en la final ante Alemania. Y la preparadora tiene muy claro quién marcó la pequeña, pero decisiva diferencia entre ambos contendientes. " Marozsán. Tienen una estrella que diferencia a Alemania de Suecia. Son dos buenas selecciones que trabajan bien en equipo, pero cuando veo cómo colocó el balón en la escuadra... Ella fue la responsable. Nosotras no disponíamos de una futbolista así".

A pesar de haber perdido la final, Sundhage, de 57 años, considera aquella plata el mayor hito de la selección sueca desde que asumió el cargo. Además, está orgullosa del camino que recorrieron desde el primer partido ante Sudáfrica hasta el enfrentamiento contra Alemania. Un camino al que ahora deben darle continuidad.

Apenas un mes después de los Juegos Olímpicos, Suecia selló su clasificación para la Eurocopa Femenina de la UEFA, que tendrá lugar en Países Bajos a mediados de este año. En la fase de grupos, las suecas se reencontrarán con Alemania. Sus otros dos rivales en la liguilla serán Italia y Rusia.

"En primer lugar, trataremos de abrir nuevos caminos, jugar de manera distinta y traer jugadoras nuevas. Esperamos grandes cosas de esta combinación de juventud y veteranía. Ganar la medalla de plata nos dio confianza. Nos llevaremos esas buenas sensaciones, intentaremos armar una buena defensa y mejorar en ataque. Me ilusiona mucho la Eurocopa", concluye.