El fútbol es su vida. O, mejor dicho, el fútbol playa. El suizo Angelo Schirinzi es, desde hace años, uno de los mayores expertos del mundo en esta variante del fútbol que se practica en la arena.

No en vano, Schirinzi escribió un libro de texto sobre esta disciplina y, además, ejerció durante un tiempo como instructor de la FIFA por todo el planeta: Mauricio, Costa de Marfil, Islas Salomón, RI de Irán, Tahití u Omán. El preparador, de 48 años, viaja constantemente por el mundo con el objetivo de mejorar el fútbol playa e impulsar su crecimiento. En estos momentos, dirige al gran BSC Kristall ruso, campeón de dos de las tres últimas ligas.

"Estamos a mitad de temporada y somos líderes. El año pasado ganamos la Euro Winners Cup", cuenta en su entrevista con FIFA.com durante el descanso de un entrenamiento en San Petersburgo.

"Aquí, en Rusia, las condiciones son perfectas, y en el equipo contamos con Dmitry Shishin y Kirill Romanov, las estrellas más destacadas de la selección nacional. Además, tenemos también a algunos de los mejores jugadores de Sudamérica y Europa".

"Estratégicamente, Rusia se posicionó de manera muy inteligente hace quince años. Detectó este nicho e invirtió directamente. Ya en la temporada 2005/2006 se organizó una liga profesional con los mejores futbolistas del planeta. Vio esta oportunidad y la ha aprovechado. Mi enhorabuena por ello".

La Copa Mundial que va a celebrarse en el país de los bicampeones del mundo de esta disciplina (2011 y 2013) "será sencillamente extraordinaria", asegura este padre de cuatro hijos. "El Mundial siempre es, por sí mismo, la cita más importante para cualquier jugador".

Schirinzi habla con conocimiento de causa, pues ha estado presente en todas las participaciones mundialistas de Suiza: en 2009 y 2011 (como entrenador-jugador), en 2015 (jugador) y en 2017 (entrenador).

Hace doce años guio a la selección suiza de fútbol playa, que debutaba en una Copa Mundial, hasta la final. Hoy en día sigue llevando la batuta del combinado alpino, y confía en dar un nuevo golpe en la fase final de la prueba reina que tendrá lugar en Rusia. En cualquier caso, el primer obstáculo que habrá de superar es la fase preliminar europea.

"Para Suiza, clasificarse para un Mundial sigue siendo un hito sorprendente. Ninguno de nosotros es profesional. Podemos competir más o menos con los grandes, pero no es lo normal. Siempre tenemos que ir al límite, lo cual se nos ha dado bien últimamente. Todo está muy reñido en la élite europea, porque hay varias selecciones excelentes, y siempre hay alguna de las grandes que no logra clasificarse para el torneo".

¿Su pronóstico para este clasificatorio europeo? "Con Suiza puede pasar cualquier cosa. Además, Portugal, España e Italia sellarán su billete para Rusia".

La Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA™ se jugará de 19 al 29 de agosto de 2021 en el Complejo Olímpico Luzhnikí. Las entradas estarán disponibles a partir del 8 de julio, una vez finalice el sorteo (hasta agotar existencias).

Esta será la undécima edición de la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA™, que celebró su primera edición en el año 2005 en Río de Janeiro. La última Copa Mundial de Beach Soccer tuvo lugar en 2019 en Asunción (Paraguay), donde Portugal conquistó su segundo título mundialista tras derrotar 6-4 a Italia en la final.

"El Mundial de Rusia será muy especial. Es un país donde el fútbol playa está bastante presente y se disputan torneos de primer nivel. Los anfitriones son, sin duda, unos de los favoritos, junto con Portugal, que defiende el trono, y Brasil, por supuesto. Nosotros, desde la selección suiza, lo daremos todo por poder participar también".

"En líneas generales, considero que las federaciones hacen muy poco por apoyar el fútbol playa. Hay muy pocas estructuras profesionales para poder jugar, y necesitamos que se actúe en este sentido. Mi mayor sueño es una Copa Mundial Femenina de Beach Soccer. Sería magnífico".