Han pasado casi 30 años desde la última vez que Bulgaria causó un verdadero revuelo en la escena mundial, cuando estrellas de la talla de Yordan Letchkov, Hristo Stoichkov y Krasimir Balakov la auparon a las semifinales de la Copa Mundial de la FIFA EE UU 1994™. Alemania, defensora del título, fue uno de los adversarios a los que los Leones despacharon en su camino hacia una emocionante semifinal en la que perderían 2-1 ante Italia, a la postre campeona.

En los años posteriores, la selección búlgara no logró acercarse a emular aquel éxito. Solo obtendría el pase para un Mundial más, el de 1998, y para dos Eurocopas, las de 1996 y 2004, y en los tres torneos dijo adiós tras la fase de grupos.

"En aquella época Bulgaria tenía futbolistas famosos en todo el mundo, que jugaban en los clubes más importantes del planeta, pero ahora la situación es completamente diferente", explica el actual seleccionador nacional, Yasen Petrov, en una entrevista con FIFA.com. "Han pasado 23 años desde la última vez que Bulgaria jugó un Mundial, y todos sabemos que ya hace mucho que deberíamos haber conseguido la clasificación", reconoce.

"Ahora mismo hay un jugador nuestro en la primera división italiana y un par más en la Serie B. Por lo demás, no tenemos a nadie en las ligas de Inglaterra, España, Alemania o Francia. El plantel está formado principalmente por jugadores de la liga nacional. Una chispa de esperanza es que algunos de nuestros jóvenes han encontrado buenos clubes en el extranjero tras hacer varios partidos decentes en los últimos meses, y no tengo ninguna duda de que pueden llegar a las grandes ligas si siguen progresando, a su vez eso hará más fuerte a la selección".

Y es precisamente la Squadra Azzurra la que espera ahora a Bulgaria en la competición preliminar de la Copa Mundial de la FIFA Catar 2022™. "¡Estamos hablando de un rival que lleva 34 partidos sin perder! Se proclamó campeón de Europa un par de meses después de que perdiéramos 2-0 contra él en Sofía, y lo que me impresionó de verdad fue el fantástico espíritu de equipo que mostró aquel día. Combinado con la increíble calidad individual de todos sus jugadores, eso hace que Italia sea un equipo de primer orden, si no el mejor del mundo en estos momentos", afirma Petrov.

"Hay que observar a los italianos y aprender de ellos. Nuestro principal objetivo es formar un buen equipo, que no dependa de jugadores individuales, y para eso habrá que echar mano de la célebre garra búlgara. Que la gente se prepare para ver un equipo muy motivado y sin nada que perder contra la campeona de Europa. Los equipos como el nuestro no pueden más que beneficiarse de la experiencia y la confianza que aportan este tipo de partidos".

Bulgaria jugará contra Lituania en casa apenas tres días después de su encuentro con los italianos, en un choque que no tiene más remedio que ganar si quiere continuar con opciones en el Grupo C. Transcurridos tres partidos, los Leones todavía no conocen la victoria y solo tienen un punto en su casillero, mientras que sus siguientes rivales son Irlanda del Norte y Suiza. "Afrontamos todos los partidos con el objetivo de ganar. Aún nos quedan cinco por disputar, así que puede pasar cualquier cosa. Ya sé que parece difícil, pero todo va a depender de cómo juguemos".

Bulgaria no ha dejado de descender en la Clasificación Mundial FIFA/Coca-Cola en los últimos años, y actualmente ocupa el puesto 75, su peor posición desde 2013. "Lo único que necesita el equipo es empezar a ganar", señala Petrov, quien sustituyó como seleccionador a Georgi Dermendzhiev hace unos pocos meses. "Somos conscientes de que este periodo de transición va a ser un proceso largo y difícil, pero estoy convencido de que vamos por el buen camino y de que no nos hacen falta más que un par de buenos resultados para que las cosas comiencen a funcionar".

Y la afición no ha dejado de volcarse con su selección en los partidos de casa. "El fútbol es un fenómeno social. Aquí, en Bulgaria, todo el mundo tiene su propia opinión sobre el fútbol, igual que sobre la política. Los búlgaros son gente fogosa, con una enorme pasión por el deporte, y el fútbol en particular, por eso tenemos que hacer todo lo posible para que vuelvan a ser felices después de tanto tiempo", concluye el técnico.