lunes 24 junio 2019, 07:54

Linari: "Estamos haciendo que Italia se sienta orgullosa"

  • Es la única jugadora de Italia que milita en el extranjero

  • Habla de sus emotivas experiencias con el Atleti y su país

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Por Sonja Nikcevic con 🇮🇹

Tras terminar primeras de un grupo donde figuraban Australia y Brasil, y haber accedido por primera vez a una segunda fase de la Copa Mundial Femenina de la FIFA desde 1991, Italia tiene sólidos argumentos para ser considerada el equipo revelación de Francia 2019.

Le Azzurre han cautivado a los telespectadores mundiales, y su delantera tremendamente rápida y eficaz, formada por Bonansea, Girelli y Giacinti, ha acaparado la mayor parte de la atención. Pero para lograr el primer puesto en un cuarteto donde tres selecciones sumaron 6 puntos resultó clave su diferencia de goles y, en última instancia, su defensa.

La pareja de centrales de la zaga italiana la integran la capitana Sara Gama y la jugadora del Atlético de Madrid Elena Linari, que sonríe orgullosa al mencionarle que su equipo solo ha encajado 2 goles hasta ahora; y ambos como consecuencia de una pena máxima.

“Me prometí a mí misma que haría todo lo posible para que no encajásemos goles”, afirma Linari. “Sabíamos que la diferencia de goles podía marcar de veras la diferencia. Sin embargo, no he sido solo yo. Hemos vuelto a ver nuestros partidos y observamos cómo nuestras delanteras corrían hasta 50 metros para echar una mano a la defensa. Eso refleja el verdadero espíritu de nuestra selección”.

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Linari es la única integrante de la plantilla que no juega en un club de Italia. “Quería marcharme de casa y retarme a mí misma en cuanto pudiera, pero mi familia insistió en que tenía que terminar mis estudios primero. En todo caso, pude también vivir mi sueño en casa ganando la liga con el Brescia, antes de hacer realidad una fantasía de la niñez y jugar en la Fiorentina”, recuerda.

“Mi sangre fluye de color morado”, afirma sonriendo, “y sinceramente, pensé que no podía haber nada mejor que jugar con la camiseta Viola ante 8.000 personas en el Artemio Franchi”.

Luego el Atlético de Madrid llamó a su puerta, y el sueño de jugar en el extranjero se hizo real. “En ningún momento se me pasó por la mente decir no a un club tan grande y a una oportunidad increíble de crecer como persona y como futbolista. Superé muchas dificultades derivadas de marcharme al extranjero, pero lo hice, y la cosa acabó con el Atleti ganando el título en mi primera temporada allí”.

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Además, Linari acabó convirtiéndose en la primera italiana en ganar la liga española. Su momento de mayor orgullo, no obstante, se produjo al formar parte de un momento histórico para el fútbol femenino en su conjunto.

“Jugar un partido tan importante como el Atlético de Madrid-Barcelona, con más de 60.000 espectadores, es algo indescriptible. Oír a los aficionados cantar el himno a todo pulmón, sentirlo en tu propia piel, ver con tus propios ojos que mucha gente estaba ahí solo por nosotras, gritando nuestros nombres…”, destaca Linari, con lágrimas en los ojos.

“Las cámaras me captaron llorando antes del partido. Lloraba de toda la emoción, y porque me hizo pensar en cómo empecé a jugar al fútbol: sin nada, jugando en campos embarrados con otros críos del pueblo, y encontrarme en uno de los clubes más grandes del mundo, en uno de los estadios más bellos… sientes que no puedes escalar más alto”.

“Lo único que puede superarlo es estar aquí”, añade, “jugando este Mundial, haciendo historia para mi país, y haciendo que los italianos se sientan orgullosos del fútbol femenino”.

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