jueves 17 marzo 2016, 06:29

Irlanda brinda por su año histórico

2016 lo tiene todo para ser un año histórico en el fútbol de la Isla Esmeralda. Por primera vez, sus dos selecciones nacionales competirán en el mismo gran torneo: la Eurocopa de la UEFA 2016.

Martin O’Neill clasificó a la República de Irlanda para la que será su sexta gran competición desde 1988, después de que el equipo accediese a tres Copas Mundiales de la FIFA™ y dos Eurocopas. La Irlanda del Norte que dirige Michael O’Neill se adentrará, sin embargo, en terreno inexplorado, puesto que el Ejército Verdiblanco nunca había alcanzado la gran cita europea, y su última participación en un certamen global se produjo hace 30 años, en México 1986.

“En cierto modo es una época dorada para las dos selecciones nacionales. Los éxitos iniciales de la República siguieron la estela de Irlanda del Norte en el 82 y el 86”, explica el norirlandés Michael O’Neill a FIFA.com. “Es positivo para el fútbol tanto en Irlanda del Norte como en la República que las dos selecciones estén clasificadas para la Eurocopa”.

“Martin superó un grupo complicado, hubo un momento en el que parecía difícil que se clasificasen. Pero consiguieron tres grandes resultados en sus cuatro últimos partidos y luego ganaron una eliminatoria difícil contra Bosnia. Me alegré de que también lo lograsen”.

El camino hacia Francia Los dos conjuntos miran ya a la Eurocopa, pero su camino hasta llegar a la gran cita no ha podido ser más distinto. A falta de cuatro encuentros en los clasificatorios, los Chicos de Verde de Martin O’Neill languidecían en la cuarta posición, después de sumar un solo punto de seis posibles frente a Escocia. Pero pelearon y se recuperaron en los compromisos restantes, entre ellos un partido ante Alemania, campeona del mundo, que se saldó con victoria irlandesa. De este modo se hicieron con la tercera plaza, para luego superar a Bosnia y Herzegovina en la repesca.

“Después de perder fuera contra Escocia el panorama era sombrío, y más tarde tampoco pudimos ganarle en casa”, explica Martin O’Neill a FIFA.com. “Los medios de comunicación irlandeses prácticamente nos daban por eliminados entonces”.

“Esa actitud derrotista no me sorprendió, porque yo ya había visto este tipo de campañas, y de los cuatro partidos que nos quedaban a nosotros y a los escoceses, tres eran dificilísimos. Pero yo siempre creí sinceramente que podíamos recuperar terreno”.

“Ganarle a Alemania fue toda una inyección de moral, por supuesto, y aunque no pudimos clasificarnos automáticamente ganando en Polonia, la victoria sobre Alemania nos permitió afrontar la repesca con mucha confianza”.

Y la tortuosa trayectoria de la República de Irlanda contrastó claramente con el periplo de la modesta Irlanda del Norte, que se convirtió en el primer equipo del quinto bombo de la historia de la fase previa de la Eurocopa en clasificarse como primero de grupo, por delante de formaciones como Rumania, Hungría y Grecia, excampeona de Europa.

“Cuando se realizó el sorteo admitimos que nos había tocado un grupo difícil, pero estábamos convencidos de poder terminar entre los tres primeros”, asegura Michael O’Neill. “Después de ganar los tres primeros partidos, nuestro objetivo cambió, y pasamos a aspirar a la clasificación automática. Y, al final, antes del último, los jugadores se habían mentalizado para conseguir la primera plaza de la liguilla. Fue algo estupendo”.

“Disfrutamos de la euforia de la clasificación después del partido de Grecia, pero enseguida bajamos de las nubes, y en el último partido, contra Finlandia, hicimos lo suficiente para ser primeros de grupo”.

Ante los pesos pesados de Europa En la Eurocopa, ambas selecciones deberán enfrentarse a adversarios de mucho renombre, pero podrán inspirarse en los buenos resultados obtenidos en los últimos años ante países que los superan con creces.

“El sorteo me pareció muy difícil, porque Italia es como si fuese cabeza de serie, y Bélgica es el equipo número uno del fútbol mundial en estos momentos”, añade Martin O’Neill. “Suecia también va a ser un oponente correoso. Y es imposible no entusiasmarse ya con ese primer partido contra ellos en el Stade de France, donde estoy seguro de que tendremos un apoyo enorme”.

En el caso de Irlanda del Norte, esta competición tiene una relevancia mayor si cabe, al tratarse de su primer gran torneo en una generación. Y Michael O’Neill espera que la experiencia sea memorable para los jugadores y los aficionados.

“Tenemos que aspirar a superar el grupo, y ya se lo he dicho a los hombres. Nos hemos clasificado como primeros. Sí, somos un país muy pequeño y tenemos un número muy limitado de jugadores, pero llegamos como primeros de grupo”, recuerda.

“La clasificación para los octavos de final en el torneo de este año presenta un escenario similar al de la fase previa de la Eurocopa, en el sentido de que es posible pasar siendo terceros, y eso da esperanzas a los países más pequeños. Va a ser muy difícil contra Polonia, Ucrania y Alemania, y el primer partido será clave: un resultado positivo nos dejaría con opciones de aspirar a todo en los dos restantes.

“La clasificación fue algo grandioso. Hay toda una generación de hinchas norirlandeses que nunca han visto a su equipo participar en una fase final, y para ellos va a ser una experiencia fantástica”.