viernes 15 marzo 2019, 10:10

Ajax Joey: Cómo ser gamer y no morir en el intento

  • Joey Calabro, jugador del Ajax y qué supone ser profesional de los eSports

  • Fue cuartofinalista en la última edición de la eClub World Cup

  • 21º del mundo con Xbox actualmente, busca volver a la Gran Final

“Comparado con otros trabajos, esta profesión te obliga a mostrar siempre tu mejor versión, porque se trata de una actividad muy exigente tanto mental como físicamente”. Esta no es la idea que la gente acostumbra tener de un jugador profesional de eSports, puesto que, para los profanos en la materia, pasarse el día jugando a la consola no suele asociarse a un trabajo intenso y agotador. De hecho, para la mayoría, los videojuegos no son más que una afición. Y lo cierto es que, para los profesionales, esta actividad también fue en su momento un pasatiempo... hasta que dejó de serlo.

“Me ha cambiado la vida, tío. Es una locura”, confiesa a FIFA.com Joseph Calabro, más conocido como Ajax Joey. “Para mí se ha convertido en una actividad a tiempo completo, lo que es algo que nunca me habría imaginado, porque el FIFA siempre había sido solo un afición para mí”, explica.

En un sector en el que no faltan casos similares y donde a muchos jugadores les cuesta creer todavía que puedan estar viviendo de aquello que más les gusta, dormirse en los laureles no es una opción para quien quiera mantenerse en la élite.

Compatibilizar eSports y vida social

“Siendo sincero debo decir que conciliar el FIFA con la vida no es lo que mejor se me da”, reconoce Calabro, que en las clasificaciones de FIFA para Xbox ocupa actualmente el primer puesto en Estados Unidos y el 21º en el mundo. “Probablemente juego demasiado. Me paso el día dándole a la consola. Quizás podría tener algo más de vida social, pero es lo que hay. Me va bien así y estoy contento”, explica.

Sin embargo, aunque piensa que el tiempo que le dedica a practicar da sus frutos y le sirve para mejorar su rendimiento, Calabro no cree que el entrenamiento sea la única clave del éxito. “El aspecto mental es probablemente la parte más importante de este deporte, porque cuando compites al máximo nivel necesitas mantener la cabeza fría”, asegura.

“Hay días en los que juego fatal y eso me saca de quicio, porque sé que lo puedo hacer mejor, pero todo marcha bien una vez que logras mantener el control de tus emociones”, revela nuestro protagonista, que no obstante también se deja llevar por el entusiasmo alguna que otra vez a la hora de celebrar un gol o una victoria.

Calabro, cuya afición por el FIFA venía de lejos, no tardó en alcanzar la élite una vez dio el salto a los eSports de competición. “Cuando salió el FIFA 17 descubrí que existía la posibilidad de competir, así que empecé a participar en torneos. Entonces llegaron las rondas regionales de la FIWC, en las que hice un gran papel, y me clasifiqué para la Gran Final de FIFA 17, donde quedé séptimo del mundo. Ahí fue cuando me dije: ‘¡Bueno, supongo que ahora ya formo parte de este mundillo!’”, rememora.

“Mis padres me repetían que nunca iba a poder ganar dinero con esto y que los videojuegos no me iban a servir de nada, pero ahora me apoyan”, revela.

El próximo gran reto

Tras defender los colores del equipo Epsilon eSports, Calabro militó en el New York City FC hasta que hace casi un año recaló en las filas del Ajax. Junto con el séptimo puesto que conquistó en el certamen mundialista ya mencionado, su actual posición en el escalafón internacional es el logro más destacado de su trayectoria deportiva hasta la fecha.

Tras alcanzar los cuartos de final de la FIFA eClub World Cup, los esfuerzos de Calabro se centran ahora en volver a clasificarse este año para la Gran Final. “El listón se ha elevado considerablemente desde la Gran Final de FIFA 17. Cada año hay más torneos, más dinero en premios, más seguidores... Ir dando pasos de este tipo resulta fundamental para cualquier deporte electrónico que busque crecer”, concluye.