Al igual que en muchas otras partes del mundo, el fútbol también se vio afectado severamente por la COVID-19 en la República Kirguisa, y sus consecuencias se hicieron notar especialmente en este país de Asia Central.

El fútbol detuvo su actividad en el punto más crítico de la pandemia, pero la FIFA pudo contribuir a restablecer la competición en condiciones controladas gracias a los fondos de su Plan Global de Apoyo COVID-19.

Este apoyo llegó en forma de equipamiento y gastos de mantenimiento de las canchas, costes médicos relacionados con la COVID-19 y fondos para ayudar a transmitir los partidos por televisión y en YouTube, incluidos, por primera vez, todos los encuentros de fútbol femenino y juvenil.

“Fue una gran alegría que continuara el campeonato de fútbol en Kirguistán, al igual que la competición de copa”, señala Baktiyar Duishobekov, centrocampista del FC Abdysh-Ata Kant.

“Queremos agradecerle a la FIFA el apoyo a nuestra federación, que logró superar esta compleja situación cumpliendo con los requisitos médicos para que se pudieran disputar todos los partidos”.

La FIFA ha luchado de manera activa contra la COVID-19 desde principios del año pasado, colaborando estrechamente con la Organización Mundial de la Salud. El pasado mes de julio, el Bureau del Consejo de la FIFA aprobó el innovador Plan de Apoyo COVID-19, que reservó 1.500 millones de USD en fondos para las federaciones miembro de la FIFA y las seis confederaciones.

El proyecto del Plan de Apoyo COVID-19 en la República Kirguisa apareció en el primer episodio de Living Football, el nuevo magacín de fútbol de la FIFA.