Aires de juventud soplan sobre el fútbol de Níger. Hace tres años, la selección sub-17 del país logró la hazaña de clasificarse para el Mundial de la categoría, de modo que India 2017 deparó la primera participación de una selección nigerina en una cita mundialista. Esos jóvenes talentos que hoy rondan los 20 años están llamando a la puerta del combinado absoluto, y dejan entrever un brillante porvenir para esta nación hasta la fecha poco representada en los grandes campeonatos.

“En comparación con Nigeria, Senegal, Camerún o Costa de Marfil, es verdad que Níger no es un país tan futbolero. Aun así, ¡tenemos jugadores que no se desenvuelven nada mal! Siempre hemos sido capaces de lograr proezas en competición. Y hay jóvenes talentos que hacen presagiar lo mejor para el futuro de la selección”, confirma Kassaly Daouda a FIFA.com.

Esa profecía no proviene de ningún cualquiera… Daouda es un auténtico mito en su país. El intocable guardameta de los Mena alcanza las 70 internacionalidades y acumula 18 años de carrera con su selección.

Especialmente, lo vimos brillar en las Copas Africanas de Naciones 2012 y 2013, “sus mejores recuerdos con la selección”. Y aunque, efectivamente, la plantilla de Níger tiende a rejuvenecerse, el hombretón de 1,91 metros no se siente particularmente empujado hacia la retirada pese a sus 36 años. Todo lo contrario…

“Ser el jugador que más veces ha sido internacional en la historia de mi selección es un orgullo inmenso para mí. ¡Y espero obtener algunas internacionalidades más!”, señala. “Realmente yo no mido lo que he aportado al fútbol nigerino, pero algunos de mis compañeros de selección me llaman ‘la leyenda’. ¡Eso tal vez quiera decir algo!”.

Efectivamente, eso quiere decir mucho. Por su experiencia y sus cualidades bajo palos, Kassaly todavía tiene cosas que aportar. El pasado noviembre volvió a mostrarse brillante en un partido clasificatorio para la próxima CAN, en el que solamente cedió ante un penal lanzado por Franck Kessié frente a la temible selección de Costa de Marfil.

“Físicamente, es más fácil para un portero jugar las prórrogas. Y mentalmente, las ganas y el disfrute permanecen intactos. Entonces, ¿por qué dejarlo?”, asevera Daouda, que milita en la competitiva liga nigeriana con el Katsina United.

“Vestir la camiseta de Níger sigue siendo un orgullo tremendo para mí. A pesar de todas esas internacionalidades, ¡se me sigue poniendo la misma carne de gallina cuando oigo el himno!”.

Mejor que mejor, ya que algunos partidos internacionales importantes se perfilan en el horizonte… Así, dentro de unos meses, Níger afrontará la segunda ronda de la fase de clasificación africana para la Copa Mundial de la FIFA Catar 2022.

Los Mena se encuentran en un cualificado Grupo A, donde aguardan Argelia y Burkina Faso (“dos peces gordos”, según las propias palabras de Daouda), pero también Yibuti, “al que Níger conoce menos, pero del que, evidentemente, no habrá que fiarse”.

Con toda probabilidad, esos compromisos deberían disputarse en presencia de Daouda: “¡Eso espero! Si me llaman, yo responderé presente. La perspectiva es tentadora”, admite, antes de concluir: “Además, ¡tengo que ir preparando el relevo!”.