sábado 13 junio 2020, 09:26

El debut mundialista de los Gavilanes

Estamos a 15 de mayo del año 2006, y la Copa Mundial de la FIFA™ de Alemania asoma desde hace tiempo en el horizonte. Ese día, a las cuatro en punto de la tarde, aterriza en Stuttgart un avión procedente de África. A bordo viaja la selección nacional de Togo, el primer combinado en desembarcar en territorio alemán. Cerca de 70 periodistas y 15 equipos de televisión, entre ellos canales japoneses y brasileños, informan de la llegada de los Gavilanes, que pisaban por primera vez suelo mundialista.

Con su concurso en el Campeonato Mundial Juvenil de la FIFA celebrado en Chile en 1987, la selección nacional sub-20 de Togo se había convertido en la primera de la historia del país en participar en una cita mundialista, pero ahora, por fin, se había dado el salto definitivo.

"Se me quedó muy marcado", recuerda Assimiou Touré en su charla con FIFA.com. "Es una de las cosas más grandes que me han pasado en la vida. Sin aquello, hoy no sería lo que soy ahora".

Para Touré, nacido en Togo hace 28 años, pero criado en Alemania, ese Mundial de 2006 jugado en su tierra de adopción fue más especial si cabe. Siendo internacional sub-18 con la Mannschaft, a principios de 206 recibió una llamada que lo cambiaría todo: la del entonces seleccionador togolés Otto Pfister.

"Lógicamente, me lo pensé un poco, pero finalmente me decidí a representar a Togo. Puede que no vuelva a surgir nunca una oportunidad así, aunque espero, cómo no, que Togo vuelva a clasificarse algún día para un Mundial. El hecho de haber nacido en Alemania hizo que todo fuera mucho más especial. Para mí fue, desde el principio, como jugar un Mundial en casa. Tras caer eliminados, animé a Alemania, por supuesto". Los alemanes terminarían cerrando el podio de un Mundial que ganó Italia.

Los Gavilanes y la falta de experiencia Togo llegó casi un mes antes de su debut... que se produjo finalmente un 13 de junio de hace 10 años. El combinado africano jugó ante la República de Corea en Frankfurt, y el partido no pudo comenzar mejor, con un gol de Mohamed Kader a la media hora de juego.

Sin embargo, los goles de Lee Chun Soo y Ahn Jung Hwan en la segunda mitad echaron por tierra las esperanzas de Togo de sumar su primer punto en una Copa Mundial de la FIFA™. El entramado africano tampoco pudo dar la sorpresa contra Suiza (0-2) ni contra Francia (0-2), a la postre finalista, por lo que tuvo que hacer las maletas al término de la fase de grupos.

Pese a todo, fue una experiencia inolvidable tanto para el equipo liderado por Touré, Emmanuel Adebayor y el capitán Jean-Paul Abalo, como para sus seis millones de compatriotas. "En Togo el ambiente fue fantástico. La gente se reunía en torno a cualquier televisor para ver nuestros partidos", cuenta Touré. "Por lo general, los países africanos están locos por el fútbol, y nuestra participación en aquel Mundial dio un espaldarazo al deporte rey en Togo".

El fútbol de ese país comprendió además que podía codearse con los mejores. Al fin y al cabo, una de las selecciones más jóvenes de África había caído eliminada, principalmente, por su falta de experiencia. No obstante, esa histórica presencia en Alemania 2006 no se vería refrendada más tarde por nuevas participaciones mundialistas, y Togo no ha logrado desde entonces completar su camino hasta otro Mundial. Tampoco estará en Rusia 2018, tras despedirse prematuramente en las eliminatorias africanas.

En los últimos años, de hecho, sólo su pase a cuartos en la Copa Africana de Naciones de 2013 ha arrojado algo de esperanza al fútbol togolés.

A Touré, por su parte, la experiencia mundialista le permitió recalar en el Bayer Leverkusen con apenas 18 años, aunque las contínuas lesiones —entre ellas una fractura de tibia y peroné que lo mantuvo una buena temporada en el dique seco— han frenado la progresión de este defensor, que precisamente por eso no ha vuelto a formar parte de la selección togolesa con regularidad.

Sin embargo, ni Touré ni su país pierden la esperanza. El francés Claude Le Roy lleva actualmente las riendas de la selección y tiene claro su objetivo: hacer volar de nuevo a los Gavilanes hasta lo más alto. "En África, Togo no es ni mucho menos una selección menor", explica Le Roy a FIFA.com. "El país ha participado en algunas fases finales del campeonato africano, así como en el Mundial de 2006. Y aquí hay muy buenos futbolistas, por lo que el potencial existe".

Uno de esos futbolistas es Touré, que mientras intenta conseguir la continuidad que le lleve nuevamente a la selección, no olvida aquel Mundial de 2006, un acontecimiento que tendrá siempre un lugar destacado en la historia del país que lo vio nacer.