El arte es el proceso del diseño creativo a partir de distintos materiales, o bien a través del lenguaje o los sonidos, para conectar con la naturaleza y el mundo. Esta podría ser una definición estándar de lo que es el arte.

¿Y qué tiene que ver con el fútbol? Pues que en ambos cuenta el resultado final de un proceso creativo. Así, Pablo Picasso creó sus cuadros, dibujos, gráficos, collages, esculturas y cerámicas, mientras que Pelé aprovechó su creatividad para fabricar goles.

En la actualidad, cuando vemos en acción a ciertos virtuosos del balón, tenemos la certeza de estar asistiendo a la obra de un verdadero artista.

Josephine Henning es una de esas virtuosas, una mujer que encarna lo bien que casan ambas disciplinas. La exdefensora alemana completó un gran palmarés: cuatro títulos de la Liga de Campeones Femenina de la UEFA, cuatro títulos de Bundesliga y una Copa de Alemania en 2013. Además, es la única jugadora que ha ganado el máximo torneo continental con tres clubes distintos: Potsdam, Wolfsburgo y Olympique de Lyon.

Henning también brilló con la selección alemana, con la que se proclamó campeona olímpica en Río de Janeiro 2016 y campeona de Europa en 2013. No obstante, en julio de 2018 decidió colgar las botas. Henning puso fin a su carrera en activo con 28 años.

"El deporte siempre será una parte importante de mi vida, pero ahora estoy expectante por ver hacia dónde me lleva este viaje. Muchas gracias por todas las aventuras y las anécdotas que viví con vosotras. ¡Ha sido una etapa maravillosa!", escribió Henning en su cuenta de Instagram.

El viaje pronto le mostró qué rumbo iba a tomar. Henning, natural de Maguncia, dijo adiós al fútbol para dedicarse plenamente a las artes visuales.

"Siempre he sido las dos cosas: artista y deportista", afirmó Henning, de 30 años, en la página web de la Federación Alemana de Fútbol. En octubre de 2018, Henning presentó sus creaciones en Tréveris —la ciudad donde se crio—, en una exposición llamada 21STORIES y compuesta por 20 ilustraciones y una obra de arte.

"Las personas tienen un papel muy destacado en mis cuadros, y muchos de estos diseños los hice durante mi carrera en activo como futbolista, por lo que una gran parte nacieron en Lyon, París y Londres. Aunque solamente uno de ellos trata específicamente este tema".

El arte siempre ha estado muy presente en la vida de Henning. "Después de la guardería, después del colegio... Pintábamos en cualquier parte. Mi madre ponía un papel enorme en el suelo y toda la familia pintábamos un cuadro. En nuestra casa, eso era lo normal", explica Henning, que estudió diseño gráfico y diseño de interiores durante su carrera en activo, en un reportaje de SWR2.

Pero, al principio, el fútbol era lo primero. "Mi padre jugaba al fútbol, y lo hacía habitualmente con sus amigos, que tenían entre 30 y 35 años. De pequeña, yo corría entre ellos por la cancha y también jugaba. Hasta que un día me dijo: 'Deberías ir pensando en jugar en un equipo. Tenemos que informarnos de si hay alguno'. Por suerte, había un equipo femenino donde vivíamos", cuenta Henning, ganadora de cuatro títulos de la Liga de Campeones, sobre sus inicios.

Tal vez, esas vivencias que adquirió en el fútbol ayudaron a Henning a dar el paso del verde de la cancha al blanco del lienzo, así como a posicionarse como artista. Del fútbol afirma haber aprendido "la pasión con la que se hace algo que sientes de verdad.

La preparación y la seriedad con la que te lo tomas, pero también un cierto desparpajo. Nunca podré jugar bien al fútbol si estoy demasiado obsesionada con ello. Del mismo modo que mi creatividad nunca fluirá si pienso demasiado en cómo quiero que sea mi obra".

Porque, en efecto, la creatividad no es algo que se encienda y se apague pulsando un botón. Que se lo digan si no a esas delanteras que sufren una larga sequía goleadora. Y es que el arte y el fútbol tienen mucho más en común de lo que pueda parecer a simple vista...