Durante la fase de grupos de la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™, Argelia llegó a situarse con un cómodo 3-0 a favor sobre la República de Corea, gracias a los goles de Islam Slimani, Abdelmoumene Djabou y Rafik Halliche. Y a continuación recibió un tanto en contra, que redujo la diferencia en el casillero y motivó a los coreanos para volver a meterse en el partido. 

Sin embargo, Yacine Brahimi y Sofiane Feghouli tenían otros planes y, tras hacer una impecable pared con su compañero de selección, Brahimi batió con gran sangre fría al meta asiático, anotando así la cuarta diana de su país en la contienda y su primera en un Mundial.

Siete años más tarde, el centrocampista, nacido en París, marcó de nuevo en un torneo de la FIFA. Fue este sábado, al transformar un penal cometido sobre Youcef Belaili en la trabajada victoria por 2-0 sobre el Líbano en la actual Copa Árabe de la FIFA 2021™. Tras golpear el balón por el centro, celebró con alegría su gol en este torneo único.

“Estoy contentísimo de haber marcado en el Mundial y ahora en la Copa Árabe”, declaró Brahimi a FIFA.com. “Espero volver a marcar aquí, me encantaría conseguir más goles”.

Al contrario que en su primer compromiso, frente Sudán, los Fennecs pasaron apuros ante unos libaneses disciplinados y organizados en la retaguardia que, pese a partir con los pronósticos en contra, resistieron hasta el minuto 69, cuando los magrebíes consiguieron abrir el marcador.

“Sabíamos perfectamente que el partido iba a ser difícil y que el Líbano suele defenderse muy bien”, explicó Brahimi. “El problema fue que no marcamos pronto. Si lo hubiéramos hecho todo habría sido un poco más fácil, pero lo más importante es que hemos ganado, y estamos encantados. No cabe duda de que nos lo pusieron muy difícil, ya éramos conscientes de que iban a defenderse y apostar por los contragolpes”.

Su rival fue pues un hueso duro de roer, pero los argelinos nunca se rindieron y siguieron alternando entre el ataque por el centro y los extremos. Belaili, Baghdad Bounedjah y Hillal Soudani fallaron varias ocasiones, antes de que Belaili recibiera una falta dentro del área y el árbitro señalara penal, que Brahimi transformó con mucha tranquilidad.

“No dejamos de insistir, estuvimos a punto de marcar en más de una ocasión”, explicó el exjugador del Granada, de 31 años. “Perseveramos en la construcción de los ataques y al final lo conseguimos, que es lo más importante”.

Después de sus victorias sobre Sudán y el Líbano, Argelia y Egipto están ya en los cuartos de final. El martes, ambas potencias regionales se medirán para determinar quién pasa como primero de la liguilla: quien se adjudique el Grupo D podrá evitar así cruzarse con un temible Marruecos.

“No deja de ser un partido contra un adversario potente”, reconoció Brahimi. Vamos a descansar un poco después de los dos primeros, porque los hemos jugado en poco tiempo y eso puede que nos afecte físicamente”. 

“El partido de Egipto es dentro de tres días, así que habrá que concentrarse en recuperarnos y luego empezar a prepararlo, es un encuentro importante. Vamos a salir a ganar, porque nuestro objetivo es ganar todos los partidos en Catar, tendremos que seguir esforzándonos y mantener la concentración en este torneo”, concluyó.