sábado 18 diciembre 2021, 21:30

Dos héroes insospechados dan el oro a Argelia y el bronce a Catar

  • Argelia se lleva el título en la prórroga con Sayoud como estrella

  • Los anfitriones mantienen la sangre fría para imponerse a Egipto en los penales

  • Un espectacular colofón para un certamen histórico

Argelia es el primer campeón de la historia de la Copa Árabe de la FIFA tras una última jornada con pocos goles pero llena de emociones y dramatismo.

Los Fennecs necesitaron de la prórroga para encontrar la forma de doblegar a una decidida y bien organizada selección de Túnez, con Amir Sayoud erigiéndose en el inesperado héroe de los campeones inaugurales. Previamente, Catar se hizo con el tercer puesto en el podio gracias en gran parte a una inspirada actuación de su joven segundo guardameta. 

FIFA.com resume lo acontecido en un día de fútbol que desató celebraciones en Doha, Argel y mucho más allá.

Resultados

Final

Partido por el tercer puesto

Momentos destacados

Barsham salva el día

Además de dar el cierre a esta Copa Árabe de la FIFA, el 18 de diciembre es el Día Nacional de Catar; un acontecimiento celebrado con gran entusiasmo en las calles y paseos marítimos de Doha.

Los anfitriones necesitaban que alguien de su selección animara la fiesta en el partido por el tercer puesto contra Egipto y, seguramente, habrían esperado que fuesen Akram Afif o Almoez Ali, sus carismáticos delanteros, quienes asumiesen esa responsabilidad. Pero dado que Afif estuvo inusualmente apagado, y que Ali falló increíblemente –y de forma impropia en él– una ocasión clarísima con la portería vacía, ese puesto vacante lo ocupó en su lugar el candidato más insospechado.

Meshaal Barsham, un portero de 23 años que se había pasado todo el certamen calentando el banquillo de Catar, abrazó el protagonismo y ofreció una actuación maravillosa, encadenando una serie de paradones soberbios que salvaron a su equipo de la derrota. Catar no habría llegado a la tanda de penales sin sus intervenciones y, cuando lo hizo, el joven arquero se erigió en el héroe una vez más, firmando la parada decisiva ante el lanzamiento de Mohamed Sherif y brindando a los anfitriones un Día Nacional memorable.

Los Fennecs encuentran un salvador

Barsham no iba a ser el único héroe insospechado, por supuesto. La final la acabó decidiendo un jugador que, como el guardameta catarí, había calentado banquillo lo suyo durante las últimas semanas.

De hecho, Amir Sayoud no había jugado ni un solo minuto desde que fue titular en el primer partido de Argelia contra Sudán –que además supuso su primera internacionalidad con la absoluta–. Pero si el jugador de 31 años pensaba que su larga espera por una nueva oportunidad iba a terminar con una decepcionante inactividad, el destino –y Madjid Bougherra– no lo quisieron así.

El seleccionador argelino sacó a jugar a Sayoud mediado el segundo tiempo y, cuando se llevaban 9 minutos de la prórroga, su apuesta dio fruto con creces. El gol decisivo para ganar el título fue además de bellísima factura: el centrocampista ofensivo que milita en la liga saudí enganchó de rosca un imparable zurdazo que se coló por la escuadra desde unos 25 metros, y grabó su nombre para siempre en la mitología del fútbol argelino. 

Hasta los planteamientos mejor trazados…

En el análisis previo a la final a cargo del Grupo de Estudios Técnicos de la FIFA, Steve McClaren entraba en detalles sobre cómo podría ganar y perder el partido una selección de Túnez considerada claramente como no favorita.

La clave, básicamente, estaba en jugar una final para olvidar; echándose atrás, defendiendo su área y evitando que sus defensas se enzarzasen en unos contra uno frente al “mejor cuarteto ofensivo del torneo”.

Al cabo de 90 minutos, las Águilas de Cartago podrían haber dicho: misión cumplida. Pero claro, aún quedaba la prórroga, y el éxito estratégico siempre puede socavarlo en un solo instante un momento mágico. Y eso es exactamente lo que se sacó de la chistera Sayoud…   

Fallos y una puntilla tardía

Además de héroes insospechados, la última jornada deparó algunos de los fallos más inesperados del campeonato.

Almoez Ali empezó mandando arriba una volea a un metro de la línea de gol, antes de que el argelino Tayeb Meziani, igual de inexplicablemente, rematara fuera una ocasión en la primera parte que parecía mucho más fácil de convertir. Incluso el máximo goleador del certamen, Seifeddine Jaziri, parecía haberse dejado la puntería en casa, al disparar a un lado de la portería cuando dispuso de una oportunidad de oro en el minuto 90 que podría haber dado el título a Túnez… ¡Pero hubo una ocasión que ni siquiera hoy se podía desaprovechar! Llegó en el minuto 125, nada menos, cuando –con toda la selección de Túnez, incluido el portero, anclada en el área rival tras buscar desesperadamente el empate en un córner– Yacine Brahimi pudo recorrerse todo el campo sin oposición para empujar a la red el gol más fácil de su carrera.

El dato

1: Antes de hoy, los 30 primeros partidos de esta Copa Árabe de la FIFA solo habían deparado un empate sin goles. Este sábado, durante 219 minutos de juego, parecía que nos encaminábamos a vivir dos en un solo día. Argelia, no obstante, mantuvo su extraordinaria racha de haber abierto el marcador en todos y cada uno de sus 12 últimos partidos internacionales y, con ello, se convirtió en la primera campeona en la historia de esta competición.    

La frase 

“Hoy es un día importante para este país, y creo que hemos hecho feliz a la gente con lo que hemos hecho sobre el césped. Estamos contentos con el desenlace de este campeonato. Estoy orgulloso de mis jugadores, y hoy hemos disfrutado jugando en un estadio excelente, como todas las instalaciones de aquí. Creo que está claro que Catar ha demostrado a todos que está muy bien preparado para albergar un Mundial”. Félix Sánchez, seleccionador de Catar