La FIFA celebró hoy una reunión con un amplio abanico de instituciones políticas, así como de organizaciones independientes pro derechos humanos y de los trabajadores, para hablar de la promoción de los derechos humanos en Catar con vistas a la Copa Mundial de la FIFA 2022.

La mesa redonda virtual contó con miembros del Parlamento Europeo, del Consejo de Europa, del Parlamento de Suiza, Alemania, Austria, Francia, Chipre, Noruega, Dinamarca, Rumanía, Italia y Eslovenia; así como con representantes de alto nivel de la Comisión Europea, el Grupo de Estados contra la Corrupción (GRECO), las Naciones Unidas, la OMS, la ONUDD y la UNESCO.

Los representantes políticos tuvieron la oportunidad de conversar con el secretario general del Comité Supremo para la Organización y el Legado, S.E. Hassan Al Thawadi, junto con expertos de la OIT, la ICM, la CSI y la red FARE, así como con el Presidente de la FIFA, Gianni Infantino, y la Secretaria General de la FIFA, Fatma Samoura.

El diálogo brindó la oportunidad a las partes interesadas de plantear sus preguntas e inquietudes sobre varias cuestiones clave; incluido el bienestar de los trabajadores y los derechos de la comunidad LGBTIQA. Asimismo, pudieron enterarse por boca de las organizaciones expertas de los importantes avances que se han logrado desde que se concedió el Mundial a Catar, así como de los desafíos que aún quedan pendientes.

"Los temas de los que estamos hablando son muy importantes", afirmó el Presidente de la FIFA. "Precisamente por eso, es importante tener la oportunidad de explicar y entrar en más detalles, escuchando cuál es la situación real no tanto de boca de la FIFA y las autoridades cataríes, sino de expertos independientes en derechos humanos".

"Tenemos que reconocer los enormes avances que ya se han logrado. Todavía quedan retos pendientes, pero las autoridades de aquí de Catar merecen todo nuestro reconocimiento. Los problemas siguen existiendo, como en todos los países del mundo. Tampoco todo es perfecto en nuestro mundo occidental. Por eso tenemos que presionar en pos del progreso, pero también apoyar a los que verdaderamente quieren avanzar, reconociendo que a veces se necesita tiempo", añadió Infantino.

S.E. Hassan Al Thawadi resaltó la visión a largo plazo del país anfitrión: "Cuando presentamos nuestra candidatura al Mundial, siempre dijimos que este Mundial –el primero en el mundo árabe y en Oriente Próximo– puede ser un catalizador de cambios positivos en muchos frentes distintos".

"Aunque la gente puede debatir sobre cuántos progresos se han hecho, nadie niega que hay un compromiso para avanzar, y que se han hecho avances. Desde el primer día, nos hemos comprometido a garantizar que se entregue un legado antes del campeonato y que ese legado dure también más allá del campeonato; concretamente, sobre la reforma laboral, pero también sobre otros temas", añadió.

"Los trabajadores migrantes me están diciendo: 'Gracias al Mundial, porque hay un gran cambio en Catar. Nuestras condiciones de vida y de trabajo están mejorando paulatinamente, y estamos contentos con las reformas laborales'", señaló Ambet Yuson, secretario general de la Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM). "Simplemente desean que estas reformas se cumplan estrictamente y se apliquen a todos los trabajadores migrantes. Pero también están preocupados por lo que pase después del Mundial, y queremos ver que estos cambios continúan tras concluir el Mundial".

Max Tuñón, jefe de la oficina de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en Doha, también se refirió pormenorizadamente a las reformas laborales que se han introducido y al trabajo que queda todavía por hacer. "Sigue habiendo problemas relativos a la aplicación, con empleadores que toman represalias contra los trabajadores que tratan de cambiar de trabajo… Las reclamaciones salariales tardan demasiado… las estructuras y los mecanismos de queja están ahí, pero pueden pasar meses antes de que el trabajador o trabajadora reciba su salario. No hay soluciones rápidas. Se tarda tiempo en crear instituciones y garantizar que están cumpliendo con su deber; e incluso en cambiar la mentalidad de los empleadores. No es un cambio de la noche a la mañana. Pero yo diría que las reformas han tenido lugar a un ritmo increíblemente impresionante".

Tim Noonan, director de campañas de la Confederación Sindical Internacional (CSI), comentó: “Llevo más de 25 años trabajando por los derechos de los trabajadores. He visto desafíos enormes, pero nunca he visto que las leyes laborales de un país entero cambien en una dirección tan positiva en torno a laorganización de un campeonato. La atención del mundo está puesta en Catar. Todavía queda un camino importante por recorrer, pero ya han recorrido un largo trecho. Ahora, la responsabilidad recae también en otros, incluidas las empresas multinacionales que operan aquí; para garantizar que, como mínimo, se aplican los cambios legales".

"Nuestra preocupación primordial de cara a 2022 es la necesidad de garantizar que los visitantes no sufran discriminación. Queremos un Mundial que obtenga una nota alta en este aspecto, y estamos trabajando con la FIFA para ello", afirmó Piara Powar, director ejecutivo de la red FARE.

"Nuestra principal cuestión aquí en Catar sigue estando en los derechos de los LGBTIQA y, concretamente, en la ley que criminaliza la homosexualidad. Sabemos que muchas personas LGBTIQA tienen miedo de venir, de lo que les espera. Sabemos que hay un componente cultural complejo, y que parte de los mensajes que tienen que salir van sobre recalcar los comportamientos que cabe esperar [allí]. Pero el respeto a la cultura local no debe impedir que se llegue a garantizar la seguridad de las comunidades LGBTIQA. Podemos ofrecer un diálogo con estos grupos y escuchar sus inquietudes directamente, y ofrecer garantías. Estamos deseando que se produzcan avances y cambios, y ver a las personas de cada comunidad, a cada tipo de ser humano, en este increíble país".